Parte II: Presente - Capítulo 41

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La pintura tenía cuatro cuadrantes.

En el primer cuadro, había una pequeña bola de fuego flotando en el fondo del agua.

En cada uno de los siguientes tres cuadros, el fuego se hacía cada vez más grande de una manera amenazante, y finalmente cubría todo el fondo del agua en el cuarto cuadro.

Los contornos del primer y cuarto cuadro no estaban claros; el primero diluido por el agua, y el cuarto destruido por el fuego.

El incendio en el último cuadro estaba fuera de control y la única barricada para detener cualquier destrucción adicional era un conjunto de barras de aspecto robusto que mantenían el fuego encerrado en el marco como si fuera una cárcel.

A juzgar por los pinceles secos y la paleta limpia al lado del caballete, esta pintura del fuego y al agua debía estar terminada.

Debía ser la pintura en la que Sungmin estuvo trabajando en casa durante los últimos días.

Kyuhyun se paró en el salón, mirando la pintura por un rato.

Hoy era viernes, la fecha límite para el borrador inicial de su plan de publicidad para el proyecto El faro y tenía que estar en el trabajo temprano.

Estaba a punto de irse a trabajar antes de que Sungmin despertara, pero esta pintura había despertado su interés cuando se dirigía a la puerta.

Ignorando o incapaz de escuchar el tictac del reloj, Kyuhyun observó la obra de arte brillante.

Fue fascinante, tanto como Estrellas.

Contaba una historia muy profunda.

Era una historia sobre Sungmin, aunque Kyuhyun no podía identificar cuáles eran los detalles exactos de la historia.

Cuando se trataba de arte, Kyuhyun sabía que Sungmin siempre era el mejor en expresar todos sus pensamientos y emociones.

Cuidadosamente, las yemas de los dedos de Kyuhyun rozaron el borde del último cuadro lleno de fuego aprisionado.

El fuego gritaba, se retorcía para liberarse y tal vez también lloraba.

Probablemente era solo la imaginación de Kyuhyun que la voz que gritaba pertenecía a Sungmin.

Al escuchar cómo su corazón se aplastaba, Kyuhyun levantó los ojos hacia el marco superior que estaba dominado por agua en lugar de fuego.

Luego frunció el ceño ligeramente confundido.

El agua era lo suficientemente fuerte como para calmar el fuego, y el fuego no podía arder a un estado tan extremo cuando se enfrentaba al agua.

Al menos para Kyuhyun, el orden de los cuadros no era el adecuado.

Sin darse cuenta de lo que estaba haciendo, Kyuhyun tomó el lienzo en sus manos, lo volteó y lo colocó de nuevo en el caballete, de modo que el marco superior estaba ahora en la parte inferior y el marco inferior ahora en la parte superior; para que el fuego no se extendiera, sino que se redujera de arriba a abajo.

Fue entonces cuando notó que Sungmin se estaba despertando y volvió a la realidad.

Aunque no se apresuró, recogió su maletín y salió de la casa.

Cuando el ruido metálico del cierre de la puerta resonó, Sungmin suspiró, sabiendo que Kyuhyun tampoco estaba dispuesto a compartir ningún tipo de saludo esa mañana.

Sungmin verificó la hora y sacó los pies de la habitación para lavarse y prepararse para el día inaugural de la exposición de Siwon.

Estaba pasando junto a la pintura del fuego y agua en el salón, luego se detuvo en seco.

Su pintura estaba puesta boca abajo sobre el caballete.

Frunció el ceño. Kyuhyun debió haberlo hecho. ¿Pero por qué?

Olvidando que pronto debía estar en la exposición, Sungmin se sentó lentamente y miró su propia pintura, reflexionando sobre el cambio que Kyuhyun había creado de la nada.

Era inesperado, y lo inesperado hizo que este cambio fuera más que sorprendente.

Kyuhyun rompió la base de lo que deseaba decir con la pintura y construyó una completamente nueva.

¿Por qué no había pensado en esto antes?

Por supuesto que el agua era más fuerte.

¿Cómo demonios pasó por alto un hecho tan obvio?

A través de esta pintura, Sungmin quería preguntar por qué su fea verdad tenía que ser destructiva cada vez que hablaba de ella, tanto que la gente lo llamaba loco y lo obligaban a contenerlo.

Y a través de un simple cambio de posición, Kyuhyun respondió que no tenía que ser así.

Sungmin estuvo en blanco durante mucho tiempo ya que la idea dio un giro completo y lo golpeó con fuerza.

Eso era por qué.

Por eso había tenido un sentimiento inseguro e incómodo sobre la pintura, incluso después de que estuvo terminada.

Incluso después de los toques finales había tenido problemas para decidir el título de la pintura y marcarla como completo, debido a ese extraño instinto de que algo faltaba.

Ahora sabía lo que faltaba.

Kyuhyun completó la pintura para él.

Eso era.

Sungmin acarició el lienzo con una leve sonrisa.

El título adecuado para la pintura apareció en su mente.

Iba a llamarlo Verdad.

En busca de un faro {KyuMin} [TRADUCCIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora