23. Tuyo, mío

109 8 36
                                    

*Aquel mismo día unas horas antes*

Tony cerraba los últimos botones de su camisa mientras Pepper repasaba su labial en el espejo que había a su lado, Happy arreglaba su corbata y Rhodes cepillaba su uniforme.

-Chicos -los llamó suave y los tres le miraron -¿Alguna vez pensaron que me casaría?

Rhodes rió al instante, aunque de forma dulce, Pepper sonrió mirándole tierna y Happy negó con una cata burlona.

-La verdad es que yo te veía siendo el soltero de oro toda la vida -admitió Happy

-Yo sí te veía casándote, con alguna modelo sólo para que la gente te dejase en paz, pero viviendo igual

-No seas bobo, Tony no tiene tan poca autoestima como para casarse con alguien por algo así, a él le daría igual toda la presión que le hicieran

Tony los observó con una risa en los labios.

-¿Lo tienes todo?

-¿Todo?

-No se supone que debe ser algo azul, algo nuevo, algo viejo y algo prestado

El moreno miró a Pepper, su eterna salvadora sabelotodo, con cierto pánico.

-¿Eso no era una tradición para las omegas hembras solamente?

-Eso.... eso supuse

-Oh ¿qué más da? -exclamó Rhodes -¿Desde cuándo eres tú retrógrado y tradicional? Se supone que eso es para la buena suerte, ¿no? Así que vamos a hacerlo porque lo necesitas, punto

Todos empezaron a buscar cosas y pensar.

-Bueno, el traje es nuevo

-Y aquí tienes algo prestado -se quitó Rhodes sus gemelos para dárselos a Tony

-¿Por algo viejo podemos considerar al novio alfa? Steve es centenario...

-¡Happy! -regañó Pepper -Uhm el ramo es azul... nos sigue faltando algo viejo

En ese momento llamaron a la puerta.

-Creo que yo lo tengo -sonó la voz de Natasha al otro lado

-¡Nat! ¿Qué haces aquí?

-Bueno, también eres uno de mis mejores amigos, ¿no?

La pelirroja, que llevaba el pelo en un moño bajo, el maquillaje ligero y un vestido del mismo color azul que Pepper, pues ambas eran madrinas de honor, entró.

-Steve me ha dado esto, al parecer lo conservaba desde hace muchos años

Nat sacó una pequeña cajita y la abrió, era una pinza para la corbata, Tony miró su pajarita, tendría que llevarlo en la solapa de la chaqueta.

-¿Qué es?

-Es una pinza de Howard, tu padre

-¿Cómo?

-Al parecer tu padre la usaba siempre en su corbata, era como su pinza de la suerte, y se la regaló para la última misión.... como estaba en su uniforme militar, la pinza se salvó, Steve ha pensado que necesitarías algo viejo

Tony se acercó y tomó la pinza, era dorada y tenía un trébol de 4 hojas en una esquina hecha con esmeraldas, en la otra esquina tenía grabado H.S.

-Ouh Steve -suspiró con un amor incontrolable

Natasha sonrió ante la reacción del moreno, la sacó de la caja y la colocó en la solapa derecha, Tony igualó su sonrisa.

Un cuento al revésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora