Treinta.

192 9 2
                                    

Jeon Jungkook.

Estaba en mi habitación, todavía sentía un poco de dolor por el accidente que había tenido, Kristen me acompañó hasta mi casa, mis amigos estaban llamandome ya bastant2te tiempo:

—¿Hola? —dije tomando la llamada de nombre Tae, pues no quería hablar con HeeYon y tal ves sea ella desde el celular de mi amigo.

—Jungkook soy Tae—sentí un alivio al escuchar la voz de mi amigo—Jimin y yo estamos preocupados por ti, ¿podemos ir a verte? —al escuchar eso no supe que decir—¿Jungkook, sigues ahí?.

—¿Vienen solo los dos? —se hizo un silencio incómodo—si vienen solo háganlo ustedes dos, no quiero ver a HeeYon ni a sus amigas, solo quiero a mis amigos, como era antes, solo los tres—dije con un nudo en la garganta, escuché sonidos en la cocina y recordé que Kristen sigue aquí.

—Claro hermano—escuché la voz de Jimin—si así lo deseas sólo iremos nosotros dos para volver a ser solo tres, como en los viejos tiempos.

Cerré la llamada sin más y escuché la puerta de mi cuarto abrirse, observe a Kristen entrar con una taza de té en la mano mientras revolvía el contenido de la misma con una cuchara.

—Te traje esto para que te sientas un poco mejor, espero que te ayude—dijo sonriendo mientras se sentaba en la cama.

—Gracias—dije devolviendo la sonrisa—eres muy amable—dije tomando la taza—por cierto, te quiero pedir un favor.

—Lo que tu quieras bebé—dijo sugerentemente a lo que yo solo solté una risita.

—Mis amigos van a venir, vamos a pasar una tarde de chicos ya sabes, entonces, creo que lo mejor será que nos viéramos mañana ¿te parece?.

—Claro, mañana me parece perfecto y también me gustaría que pases un tiempo con tus amigos, así te recuperas más rápido—dijo acariciando mi cabeza.

Se acercó mucho a mi y yo no iba a negarme a nada de lo que fuera a pasar, no me desagradaba para nada la idea y menos de saber que yo estuve dispuesto a dar todo por alguien que no hubiera dado nada por mi, es hora de que Jungkook vuelva y Kristen es una chica muy bonita, estamos solteros los dos así que no hay nada de malo.

Cuando estaba a punto de besarla el timbre de la puerta se escuchó y supe que serían mis amigos, así que decidí hablar.

—Creo que debes irte—dije sintiendo mi respiración acelerada—esos son mis amigos—dije escuchando la puerta otra vez.

—Esta bien, me iré pero si saldremos mañana ¿verdad?—preguntó Kristen sonriendo.

—Claro que sí, y más ahora que tenemos algo pendiente—dije guiñando mi ojo a lo que ella río—te acompañaría a la puerta pero estoy adolorido.

—Tranquilo, yo puedo ir sola—dijo dándome un beso en la mejilla—espero que pasar el tiempo con tus amigos te ayude a sentirte mejor.

—Yo también espero eso—murmure.

Escuché como bajó las gradas y lo único que hice fue recostarme en mi cama con mi mirada perdida en el techo de mi habitación, esperando a que suban mis amigos, espero que cumplan su promesa y vengan solos, no quiero ver a nadie ni nada que se relacione con HeeYon, no ahora.

—Jungkookie, ¿cómo sigues? ¿Descansaste un poco? —dijo Jimin.

—Jungkookie estábamos preocupados por ti, te fuiste sin decirnos nada—dijo Tae y en ese preciso momento los dos se acostaron en mi cama.

—Lo siento chicos, pero debía salir de ahí lo antes posible—dije con una sonrisa un poco triste.

—¿Como sigues? —dijo Tae.

—Bien, Kristen me preparó un té y ya descansé un poco, pero aún me duelen las heridas—dije en general pues no sabía a qué heridas precisamente me refería.

—Y del corazón, ¿cómo estas? ¿Cómo van esas otras heridas? —dijo Jimin viéndome fijamente y Tae solo asintió con la cabeza dándome a entender que él también quería saber eso.

Al momento que me preguntaron eso, solo una cosa apareció en mi mente, HeeYon, es increíble como esa chica me ha cambiado, antes no me afectaba ninguna mujer, ninguna se me había clavado tanto, es increíble como la persona que puede hacerte feliz un segundo al siguiente te puede destruir  por completo, como alguien que es tu amor también es tu perdición, nunca creí en el amor ni en todas esas cosas, pero hoy compruebo que eso que dicen es verdad, el amor duele y duele demasiado, pero no dejaré que eso me afecte, volveré a ser el mismo Jungkook de antes.

—Supongo que, todo en la vida duele, pero tu eres el que permite que eso te afecte más de la cuenta y yo ya tomé una decisión, no dejaré que eso me afecte, volveré a ser yo, el Jungkook de antes.

—Jungkook no creo que... —comenzó a decir Tae.

—¿De qué te sirve darlo todo por alguien que no está dispuesta a dar nada por ti? ¿Para qué te arriesgas a subir la montaña si sabes que al final terminarás resbalando y cayendo al vacío? Prefiero evitar subir la montaña y tomar otra ruta.

—Jungkook ¿estás seguro que eso es lo mejor? Nadie dice que el amor es fácil, de hecho nada es fácil en el mundo y si es fácil no vale la pena, ¿es qué a caso te vas a retirar sin luchar?—dijo Jimin viéndome fijamente.

—Si, lo haré y ya no quiero hablar de eso ¿Esta bien? —dije seriamente.

—Jungkook sabes que todo lo que te haga feliz y con lo que te sientas cómodo para nosotros estará bien—dijo Tae dándome unas palmadas en el hombro.

—Cambiemos de tema ¿les parece? —dijo Jimin antes de que yo pudiera decir algo—hace mucho tiempo que no salimos solo los tres, ¿les parece si mañana hacemos una salida solo entre nosotros? Como en los viejos tiempos.

—Me parece una muy buena idea, hace tiempo que no lo hacemos, ¿Qué dices Jungkook? Será divertido—dijo Tae.

—Claro que sí—dije animado—me encanta la idea, hemos dejado de divertirnos juntos ya hace tiempo, recordar como lo hacíamos no estaría mal, pero—dije alzando un poco mi voz para que les quede claro—sin chicas, ya saben a quienes me refiero.

Mis amigos sonriendo y asintieron con la cabeza, hace tiempo que los extrañaba, ya no pasamos tanto tiempo juntos desde que HeeYon y sus amigas aparecieron en nuestras vidas, siempre pasamos con ellas, en ocasiones cada quien por su lado por su lado, cuando salíamos en grupo más pasabamos pendientes de ellas que de nosotros como amigos, nuestras platicas no pasaban de un hola y unos cuantos comentarios para molestar, en verdad los extrañe mucho.

Pero algo seguía dando vueltas en mi cabeza, algo que me había hecho conocer el dolor de gustar y sentir algo por alguien, nunca antes me pasó eso porque nunca me concentré en una sola persona, siempre pensaba que era mejor no tener a nadie más en mi vida, por eso me gustaba estar soltero, la única mujer que me ha importado es mi madre, siempre me encantaba conocer chicas nuevas y la verdad eso no era problema para mi, pero todo dio un giro cuando esas tres chicas aparecieron, mis amigos ya dejaron de ser los mismos, y yo también, sentía que debía estar pendiente de aquella chica que conocí y a la que salve de caer en un charco una noche de lluvia.

Butterfly. ✨ᴊᴜηɢᴋᴏᴏᴋ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora