《Capítulo 17:》"Denki Kaminari"

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Le sonreí sin saber muy bien cómo actuar. Lo último que pensé, fue que me volvería a encontrar con él.

-¿Ya os conocéis?-preguntó Ochako, con el ceño fruncido.

-Me choqué con él en el centro comercial, ¿recuerdas?-dije, evitando reírme. Por alguna razón, la situación me resultaba cómica.

-¿¡Fue con Kaminari!?-asentí, ante su cara de sorprendida. Giró a mirar al rubio.-¡¡Por tu culpa, Izu-chan tuvo una dislocación!!

La cara de Kaminari era un cuadro. Había una mezcla de sorpresa, confusión y culpa que me hizo sentir algo de pena por él. Parecía un chico agradable y simpático, alguien con quien podría reírme cuando quisiera y que podría llegar a ser un buen confidente. No estoy segura de si eso último llegó a ser algo verdadero.

-¡¡L-lo lamento mucho!!-se disculpó, alporizado.

-No te preocupes.-le guiñé un ojo.-Ahora ya estoy bien, que es lo que importa.

A mi lado, noté a Shoto algo tenso. Estaba segura de que se sentía muy incómodo y fuera de lugar, así que decidí echarle una mano.

-Por cierto, ¿todos conocéis a Todoroki?-dije, a sabiendas de que no. Me reí cuando nadie dijo nada.-Vale, os explico. Por ciertos temas, él es mi guardaespaldas, lo que significa que tiene que ir a donde yo vaya. En otras palabras, vendrá al viaje. Todoroki,-lo miré.-Ellos son: Mina-señalé a mi amiga.-, Tsuyu-señalé a la ranita.-, Kaminari, que lo acabo de conocer yo también-esta vez me guiñó él un ojo.-, Sero-señalé a mi amigo peli negro.-, y Tokoyami.-señalé al medio cuervo.-Al resto ya los conoces.

Todos dijeron algo al bicolor, ya fuera un Encantado, un Es un placer, o un simple Hola.

Dicho todo aquello, nos dirigimos al interior del aeropuerto para así subirnos al dichoso avión. La mayoría de mis amigos nunca había montado en avión, y eso quería decir que estaban nerviosos e incluso histéricos en el caso de Uraraka. Yo también odiaba volar, y lo evitaba siempre que podía, por pocas veces que fueran.

Tras enseñar el pasaporte y dejar las maletas en la cinta, nos subimos al transporte. Los asientos eran de tres, y discutimos varios minutos la distribución. Sin saber muy bien cómo, yo acabé sentada entre Kaminari y Shoto, quien se negaba a dejarme sola el más mínimo instante. Por un instante, pensé que lo que le incomodaba era que fuera a solas con Denki. Lo agradecí. Detrás, teníamos a Mina, Tsuyu y Uraraka; a nuestra derecha, a Kirishima y a Kacchan; y detrás de ellos dos, a Sero con Tokoyami.

Pasados otros diez minutos, el avión despegó. Inconscientemente, y por la inquietud de la subida, agarré la mano de Shoto, que se encontraba posada en su posabrazos. Se tensó de nuevo bajo mi contacto, pero pronto se relajó al ver que no se la agarraba por ningún motivo romántico o seductor. Para nada, yo lo que tenía era impaciencia. Pero, desgraciadamente, Ochako vio el gesto, y se encargó de echarme una mirada "pervertida" a la que respondí rodando los ojos.

En cuando estuvimos normal de nuevo, le solté la mano, y al alejarme de su contacto, me sentí vacía, como si me faltase algo para darle sentido a mi vida. Los sentimientos que provocaba Shoto en mí eran cientos y todos ellos muy contradictorios, por eso me costaba tanto saber por qué me ponía nerviosa en su presencia, si era por si me intimidaba o me atraía; si aquel cosquilleo en el estómago era por amargura de tener que estar siempre vigilada o por su contacto; de si la sensación que recorría mi cuerpo de pies a cabeza cuando sonreía era por inquietud o enamoramiento. Tan ingenua era yo en aquel entonces. Creía que estaba sola, pero tenía muchos amigos a mi lado, y lo mejor de todo, tenía a Todoroki, quien ya parecía estar a mi lado por gusto más que por obliga. Ojalá lo supiera. Mas no tuve mucho tiempo para pensarlo, ya que la atractiva risa de Denki me distrajo.

El Brillo De Tus Ojos | ᵀᴼᴰᴼᴰᴱᴷᵁ-ᶠᴱᴹDonde viven las historias. Descúbrelo ahora