POV's Izuku.
El viaje tras los exámenes era algo que llevábamos esperando muchos meses. Aproximadamente desde septiembre. Yo podría haberlo hecho mucho antes, claro que sí, tenía todo el dinero que necesitara si así lo quisiera, pero para mí era mucho más importante ir con mis amigos. Ir a España cuatro días con ellos era algo que me hacía sentir muy contenta, no sabría explicarlo bien...
Esa mañana, volví a madrugar, pero no me hizo falta despertador, porque no di pegado ojo en toda la noche. Tenía la maleta hecha del día anterior y la ropa que iba a ponerme sobre el escritorio: unos vaqueros junto con una sudadera negra de All Might y mis converse. Así que a las cuatro de la mañana me puse en pie, totalmente despierta y espabilada, aunque aquello después me pasará factura.
En cuanto encendí la luz, Negan se quejó, revolviéndose sobre los pies de mi cama, haciendo que me riera. Corrí al baño y me di una ducha en un santiamén, estaba realmente emocionada. Cuando salí, habían pasado solo cinco minutos. Coloqué una toalla al rededor de mi cuerpo y salí a mi cuarto. Casi me da infarto cuando vi que no estaba sola allí.
-¡Te voy a matar! ¡Menudo susto me has metido!-me quejé, lanzando un cojín a Kacchan. Él sí parecía dormido.
-Tsk. Encima de que me ordenas levantarme a las tres y media, ¿aún no estás preparada? ¿No tendríamos que estar yendo ya hacia el aeropuerto?
-¿Ves? Si te hubiera dicho que hasta las cuatro y media no salimos, estarías todavía dormido. Te lleva media hora levantarte, Kacchan.
El cenizo se quejó, dejándose caer en la cama, a un lado de Negan, quién le gruñó y se apartó de él.
-Te odio, Deku...
Sonreí y comencé a vestirme. No me llevó ni dos minutos.
-Kacchan, más te vale levantarte o te tiraré un cubo de agua fría por la cara otra vez.-lo amenacé, hablando totalmente en serio.
Katsuki se recostó en seguida, más espabilado, y me miró a los ojos, despierto como un tiburón.
-Ni se te ocurra.
Con superioridad, le saqué la lengua, y agarré mi maleta.
-Vamos. Todoroki debe de estar esperándonos abajo.
Intentando no despertar a nadie, bajamos las escaleras. La luz del comedor estaba encendida y la puerta entreabierta. Escuché unas voces hablar en murmullos. ¿Acaso Shoto no estaba solo? Dudaba que mis padres estuvieran despiertos a aquellas horas, ni siquiera por esto. Kacchan y yo entramos sin hacer mucho ruido, y vi a mi guardaespaldas sentado a la mesa con los brazos abollados en ella y la cara entre las manos. Al principio no me fijé en que Mitsuki estaba sirviéndonos el desayuno, solo me fijé en el desordenado cabello del bicolor, en su camiseta de manga corta blanca combinada con unos vaqueros rotos en las rodillas. Verlo vestido normal, sin traje ni mierdas, hizo que una oleada de sentimientos me invadieran por completo. Sentimientos que no entendía.
-Ey, mamá, ¿qué haces despierta?-preguntó mi amigo de ojos carmín, haciendo que el cuerpo de Shoto se tensase al darse cuenta de que estábamos allí.
Sus ojos llenos de sorpresa se cruzaron entonces con los míos. Tuve la tentación de apartarlos, pero no di. Esos preciosos orbes me tenían engatusada. Con un pequeño sonrojo, le sonreí, y me devolvió el gesto de la forma más tierna que nunca nadie lo había hecho.
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El Brillo De Tus Ojos | ᵀᴼᴰᴼᴰᴱᴷᵁ-ᶠᴱᴹ
FanficOdiar por inercia es la manera más sencilla de desquitar la furia, Shoto lo sabe a la perfección. Sin embargo, no desaprovecha la oportunidad que le ofrecen de vengarse de quien considera el detonante de la nefasta vida que lleva, arrebatándole a lo...