EL Misterioso Dyland ✔️

☸️Naciste para esto.

Capítulo 20

La voz de la cabeza de Dyland un día dijo' El amor vuelve a las personas estúpidas y débiles

Narra Dyland

Cada día era peor que el anterior, me sentía mal conmigo mismo. No podía dejar de pensar en la pinche vida que me tocó vivir.

En verdad quiero a Lorena cerca de mí, no quiero que se aleje de mí, pero creo que es necesario, aunque no lo permitiría. Tengo rabia conmigo mismo por ser tan egoísta.

Nunca dejaría que ella se aleje de mí, tengo por seguro que ella no quiere estar cerca de mí. ¿Quién quiere estar cerca de una persona tan horrible como yo?

¡Nadie!

No es algo que me importe tampoco, yo soy yo y cada cual tiene que aceptar a los de más tal y como son y así soy yo, no importa de qué manera este, incluso no importa de qué manera me sienta, aunque me desprecie a mí mismo, no le tomo importancia a lo las personas piensen de mí.

Ella tiene que saber la verdad de todo, pero aún no es el momento adecuado para decirle, aunque ella no quieres pertenecer a este mundo oscuro ya pertenece a el porque la persona que tiene el dominio sobre ella no dio la oportunidad, ella es una de las personas más importantes del grupo, es la inocente, la que no sabe nada, pero su cabeza tiene un precio inimaginable.

—Dylan — escucho a Tyler llamarme. Tyler es un hombre que igual pertenece a nuestros grupos.

— Si Tyler, puedes entrar. — afirmo, estaba sentado en mi cama pensando algunas cosas, principalmente pensando en ella.

—Están aquí las personas que querías ver. — sonrió de lado al escuchar lo que me acaba de decir. Mi plan A.

Es tratado de buscar ayuda profesional para dejar de hacer lo que hago pero es imposible, por más que trato de alejarme de esta vida tan miserable que llevo no puedo, es como una adicción que no se puede satisfacer con cualquiera cosa. Quiero ser un chico normal pero mi instinto no me deja. Nunca podré ser un chico normal, no soy normal.

¡Necesito matar y este es el momento! Eso me pide mi cuerpo cuando trato de alejarme de este caos.

Camino junto a Tyler con mi puñal en mano y con mi pistola a un lado de mi cintura.

—Buen trabajo Tyler. — chocamos las manos. Ambos estamos felices porque encontrar a este tipo no fue nada fácil, este fue uno de los tipos que más problemas nos causó y por fin lo tenemos. Es un traicionero que trabajaba con diferentes personas para huir de nosotros después de traicionarnos y abusar de nuestra confianza.

Una vez abajo veo al hombre, es moreno, alto, tiene varios golpes en la cara, pero no los suficientes.

La bodega está limpia, no está como antes. Me gustaba ver las personas que mataba en el piso de la bodega, pero Tyler me convenció que era mejor enterrarlos en la parte trasera.

Creo que todo esto es algo mental que tengo y me gusta mi mentalidad, amo lo que hago, me gusta ver como las personas sufren por mi culpa y más cuando ellos mismo se lo buscan.

A veces nosotros mismo somos lo que elegimos el camino de la muerte sin darnos cuenta.

—Pensaba que nunca te íbamos a encontrar. — comento, me acerco a él bruscamente y lo agarro por el cuello, puedo sentir el pánico en sus ojos y eso me gusta, me encanta ver a las personas de esta manera y más cuando el miedo es traducido por mí. Sus ojos grandes me observan con miedo e incitación, le sonrió malévolamente, rio a carcajada, realmente esto me gusta, no entiendo en qué momento le tome tanto amor a esto que hago, pero es de admitir que me encanta hacerlo.