Capitulo Siete

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<<Hongjoong>>

A mi derecha, a mi izquierda los gruñidos tanto del alfa como del omega que es mi mejor amigo se hacen cada vez más fuertes, aunque los del alfa se notan más furiosos. Aún estamos en el comedor del instituto, a menos de diez minutos para volver a la siguiente clase, a la primera más bien a la que iremos Yeosang y yo, y ambos están centrados en Mingi, quien a pocas mesas de distancia almuerza como si la cosa no fuese con él, ajeno a los gruñidos, al odio que la pareja a mi lado siente ahora mismo por él después de lo que me ha hecho. Yo en cambio no es odio lo que siento sino molestia, irritación, un profundo dolor clavado como un puñal en mi corazón que solo me dan el deseo de salir corriendo de aquí, de saltarme todas las clases y alejarme de Song Mingi quien está más que encantado con ese nuevo omega, el que vuelve a besar al alfa sin este moverse o apartarle, sintiendo mis ojos arder incapaz de apartarlos de esa mesa.

— Deberíamos irnos —niego despacio ante las palabras de Seonghwa —Hongjoong estás tan alterado que tu celo se nota más. Aún estás con él y solo harás que todos los alfas vengan a por ti. Además no te beneficia ver a ese idiota.

Finalmente acepto ir con ellos fuera, dejando mi almuerzo sin terminar sobre la mesa, limpiándome los ojos antes de cruzar la puerta, mirando una vez más allí, dirigiéndonos a clase cuando apenas quedan cuatro minutos para el inicio de la primera de tres que nos quedan. Ocupo mi lugar de siempre, agradeciendo que tanto Yeosang como Seonghwa se sienten a mi lado no quedando espacio para que indeseados se acerquen a mi, lo cual nunca pasa porque él se sienta en otro lugar de la clase. Me abrazo a mis piernas, apoyando mis pies bien sobre la fría silla, apoyándome en una de mis rodillas, mirando mi móvil, ignorando a la parejita que se da su amor entre besos a mi lado. Escribo en respuesta al mensaje de Jongho, quien hace unos minutos me ha escrito queriendo saber si Mingi me ha molestado en algún momento, confirmándole que no porque hasta la hora del almuerzo no le he visto, omitiendo que le vi besando a otro. Lo guardo cuando suena el aviso del inicio de la clase, entrando la profesora tan solo dos minutos después, y algún que otro rezagado como ese alfa idiota que ahora mismo detesto, sintiendo su mirada sobre mi, apartando la mia, centrándome después de sentarme bien en mi silla con las piernas bajo la mesa, mirando en todo momento el libro, tomando los apuntes que nos pide la profesora, haciendo los ejercicios que manda quedándome alguno para casa cuando finaliza la clase. Al igual que en esta, las otras dos clases son iguales, sintiéndome peor con cada minuto que pasa, siendo eternos para mi.

Respiro aliviado cuando la tercera y última termina, despidiéndome de mis amigos, recogiendo lo más rápido posible, saliendo el primero de la clase, dirigiéndome lo más rápido posible a la entrada, sintiéndome en cierto modo libre, gruñendo, frunciendo el ceño, girándome dispuesto a enfrentar a quien me lo impide, intentando soltarme cuando veo que es Mingi quien sostiene con fuerza mi muñeca, tratando de evitar su olor a lluvia, que aún está en celo, las ganas que despiertan en mi interior provocando que mi lobo interior piense en el deseo de entregarme una vez más al alfa, desechando todo pensamiento, abofeteando con fuerza su mejilla.

— Dejame en paz Song y vete a meterte entre las piernas de ese otro omega —me alejo de nuevo, girando cuando salgo del instituto.

— Es beta y a mi él no me gusta —ando más rápido, alejándome lo máximo posible —yo quiero estar contigo Hongjoong.

— Mira tu que hoy no tendrás suerte porque yo no quiero estar contigo —casi llego a la parada —me doy asco ahora mismo por entregarte mi virginidad y más desde que te vi besándote con otro, y encima un beta que nada bueno te dará. ¿O es que piensas que podrás marcarle y tener hijos con él? Adelante entonces pero te van a salir mal tus planes y de mi olvidate porque no volverás a tocarme un solo pelo.

No es un juegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora