Narradora:
Después de separarse del beso, Martin la abrazo y escondió su rostro en el cuello de la pequeña Rossellvet, ella sonrió a más no poder, por tener de nuevo a su chico con ella.
Unieron sus besos nuevamente, ambos sonrieron entre el beso, por volver a empezar de nuevo, se separaron nuevamente cuando sintieron a una pequeña personita que abrazaba sus piernas, ambos bajaron la mirada y encontraron al pequeño Thiago que se había unido al abrazo, Martin lo cargo en sus brazos y el pequeño Thiago lo abrazo por el cuello.
Thiago: papá.
Martin se sorprendió por las palabras de su pequeño hijo, pequeñas lágrimas corrían por sus mejillas, mientras que una sonrisa de formó en sus labios.
Martin: te amo campeón--lo abrazo dulcemente, mientras sonreía.
Por fin Martin tenía lo que más deseaba en la vida... Una familia.
*****
Martin llevo a su chica e hijo, Martin los llevó a su pizzeria favorita que por casualidad también era la de su hijo, ambos compartían gustos similares, el amor por la pizza, música, colores, frutas y muchas cosas más, el pequeño Garritsen bajo del carro de papá y entró al establecimiento de pizza, Martin y Diana caminaban juntos tomados de la mano, entraron y pidieron la pizza favorita de Thiago que casualmente era la Margarita.
Después fuero a tomar asiento en una mesa redonda, Thiago quedó en medio de papá y mamá, ambos hablaban y Thiago no podía dejar de mirar a su padre, Martin sonreia por los pequeños besos que dejaba su hijo en su rostro, al paso de unos minutos Diana se ganaba algunas miradas de los chicos y hombres "atractivos" y eso a Martin no le gustaba, hací que se levantó de su lugar y decidió sentarse al lado de su chica, así mismo, pasando un brazo por los hombros de Diana y unió sus labios en demostración que le pertenecia, era su pequeña, su chica y madre de su hijo, era totalmente suya.
Despues de haber almorzado, tenían que regresar a la empresa para que siguiera la jornada de trabajo, estando en la oficina de Diana, Martin tenía que despedirse de su pequeña y de su bebé, pero Martin no quería separarse de ellos, quería que estuvieran con ellos, todo el día.
Martin: no quiero que este momento se acabe pero tengo que regresar a la oficina, solo para terminar unos pequeños asuntos.
Diana: estas muy ocupado.
Martin: no, sólo que hacer un pequeño papeleo para entregarlo con Louis y el se encarga de hacer lo último.
Diana: bien, entonces no te estreces tanto, ok--dejó un pequeño beso, mientras que acomodaba su corbata.
Martin: ok... Te... Amo--dejaba besos en sus labios por cada palabra que pronunciaba.
Diana: y yo a ti.
Martin: nos vemos campeón--abrazo al pequeño Thiago y dejo un beso en su freten.
Thiago: ados, papá... Mañana vendas pala il a comel pizza.
Martin: si, hijo mañana estaré puntual iremos a comer pizza, esta bien.
Thiago: SIIIIII, papá venda mañana, gacias papi.
Martin: adiós hijo, te quiero y no desobedescas a Mamá y la cuidas por mi, si.
Thiago: chi.
Diana acompañó a Martin al elevador, salieron de la oficina con las manos entrelazadas y Diana se acercó con Frida, su secretaria y amiga de Diana.
Diana: Frida podrías cuidar un rato a Thiago, esta en la oficina.
Frida: claro--le guiño el ojo-- tómense su tiempo.
Diana se sonrojo y Martin soltó una pequeña risita, caminaron al el elevador, pararon al estar en frente del elevador, Martin tocó el boton, Martin miró a Diana y la beso, el pequeño timbre sonó, anunciando que las puertas del elevador se abrieron, se separaron.
Martin: te amo, mi amor.
Diana se acercó a él dejando sus labios en su oído.
Diana: también te amo... DADDY-- dijo con una voz muy sensual y tierna, mordió levemente el óvulo de su oreja y el soltó un pequeño gemido.
Martin entró al elevador y sonrió, Diana lo miraba con una sonrisa, Martin solo la observa, Diana bajó la mirada a su entrepierna y le hizo señas a Martin con los ojos, solo la miró y antes de que las puertas se cerrarán, Martin la tomó del brazo y la adentro rápidamente al elevador, cerrando las puertas detrás de ella, Martin junto sus cuerpos y conectaron miradas, Martin la tomó de las mejillas y seguía mirándola.
Diana: Thiago esta solo--dijo sin dejar de mirar sus labios y ojos.
Martin: está con tu secretaria.
Diana: pero...
Martin: dijo que nos tomáramos nuestro tiempo.
Diana: Martin.
Martin: también--tomó la mano de Diana y la llevó al bulto debajo de sus pantalones--siente como me dejaste y... No puedo llegar con esto a la oficina, todos me miraran raro.
Diana: lo siento pero estoy en la oficina, creo que no podré ayudarte, con eso--dijo y apretó levemente el miembro de Martin, el dejó salir un gemido de sus labios.
Diana sonrió victoriosa y antes de que ella se separara para tocar el botón, para que bajara en un piso cualquiera, Martin la beso, la acorralo en una de las paredes del elevador y tocó un boton para que el elevador se detuviera, sin despegar sus labios de ella, Diana soltó un gemido en sus labios, Martin se estremeció y bajó el tacto de Diana en su cabello, ella enterró sus dedos en el cabello de Martin, aún sabía cuáles eran sus puntos débiles del joven Garritsen.
Martin bajó sus besos al cuello de la pequeña Rossellvet y sus manos hacia el trasero de y lo apretó, Diana soltó un gemido después Martin se apartó un poco de ella sin dejar de besarse y desabrocho su pantalón de Diana, los pantalones resvalaron por las largas y lindas piernas de la hermosa chica de cabello castaño, así mismo dejando a la vista unas lindas bragas rojas de encaje, Martin se mordió el labio y este tomó sus bragas y las dejó que calleran al suelo, Martin bajó su mano y empezó a estimular la feminidad de Diana, provocando que la castaña soltara un gemido en el oído de Martin.
Eso fue el toque perfecto que Martin nesesitaba para que desabrochara su cinturón, junto con su pantalón y bajara la cremallera de este mismo, bajo sus boxers y su pene salió disparado apuntando a Diana, Martin la cargo y ella enrosco sus piernas en la cintura del joven Garritsen, y entró en ella en una estocada perfecta que los unía en uno solo, ella no podía dejar de gemir, Martin sonrió victorioso al saber que todavía tenía el toque y mismo tono como lo había recordado y aún recuerda lo estrecha que estaba.
Después de un bueno orgasmo, Martin se corrió dentro de ella, ambos gimieron el nombre del otro, el descanso la cabeza en el cuello de Diana mientras ambos recuperaban la respiración, Martin beso sus labios de Diana ella aceptó.
Ambos se arreglaron, Martin arreglo su traje italiano color negro y ella sus pantalones, después bajaron a recepción un poco sudados, Martin la llevó hacia su Masda y le abrió la puerta del copiloto, Martin rodio el carro y entró en el lugar de conductor, Martin prendió este y arrancó hacia una farmacia cercana, ahí compro, pastillas anticonceptivas y una botella de agua, Diana tomo de ellos y volvió a entra al auto negro, Martin tenía que regresar a su pequeña hacia la empresa Rossellvet, ya que su pequeño hijo se encontraba ahí, la despidio con largo y tierno beso, unió sus frentes y Martin mordió levemente el labio inferior de la chica.
Martin: no sabes como extrañaba hacerte el amor, otra vez.
Diana: nos vemos Mañana, Daddy-- tomo el labio inferior de Martin con sus dientes y lo mordió un poco.
Martin soltó un pequeño gemido y ella lo soltó dejó un corto beso en sus labios y abrió la puerta.
Diana: nos vemos Mañana... Daddy-- dejó un beso en sus labios y salió del auto, camino hacia el elevador, presionó el botón, las puertas se abrieron, ella entró y se dio la vuelta y miró el carro de Martin.
Le dedico una sonrisa y un ademan de adiós, las puertas se cerraron, Martin se fue a su oficina con una maldita sonrisa en el rostro.
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Sugar Garrix
Teen FictionEl un empresario de 24 años, mal carácter y en la mente sólo sexo. Ella una chica de 18 años, hija única de los más poderosos empresarios Rossellvet Derek. Tras la muerte de sus padres ella queda a cargo de su tía la cual sólo le interesa el dinero...