Extrañas coincidencias (Harry Styles) Terminada/Editando.

Capítulo 32: "No la dejes caer."

Hemos pasado el día encerradas en la habitación excepto para cenar, que salimos a una pizzería que hay cerca, había venido también Lola y Patri se encargó de explicarle todo.

He hablado una vez más con Niall, para que me dijera que estaba un poco más calmado, y que estaban demasiado ocupados por los preparativos y ensayos para la gala de premios de esta noche. Harry directamente seguía sin hablarme y me evitaba.

- ¿A qué hora dices que son los premios? – Dijo Lola acostada en la cama de al lado de la que estábamos Patri y yo.

- A las 9 de allí. A las 5 aquí.

- Pues a dormir, a esa hora nos despertamos, ¿te parece bien?

Eran las 12 de la noche ya. Les mandé un mensaje a cada uno de los chicos animándolos y decidí dejar a Harry para el final. Tenía esperanzas de que se dignara a decirme algo.

“Mucha suerte, vais a triunfar, como siempre. Ánimo, sé que ahora mismo estarás nervioso. Por favor Harry, dime algo… no sabes la mierda de día que he pasado”

Efectivamente he pasado una mierda de día. Mis amigas me animaban, pero me duraba un minuto, he pensado tantas formas de pedirle perdón y sé que todas las va a negar. Pero es que joder… no fue mi culpa.

Sé que debería haberme estado quieta, y no haberme hecho ni una foto, en realidad no soy nadie para tomarme fotos con una fan. No quiero que la gente piense que lo hago para ganar popularidad. En realidad eso es lo que evito. No quiero que nadie me conozca. No quiero que me conozcan por estar con el famoso rompecorazones de One Direction.

Simplemente estoy con él por ser como es, por tratarme como nadie lo había hecho. Por sacarme una sonrisa de tonta cada día y ser más que mi mejor amigo. Es el único que puede cambiar mi estado de humor con solo poner una de sus caras raras o contar uno de sus tantos malísimos chistes.

Al fin conseguí respuesta, pero no creo que fuera la que esperaba.

“Lo sé, gracias. ¿Tú has pasado mal día? ¿Y yo qué? Vuelves a ser egoísta.”

“No soy egoísta, te he pedido perdón en mil mensajes, no me coges las llamadas y ni si quiera te molestas en saber cómo estoy yo”

“Adelia, no voy a hablar ahora, estoy ocupado.”

“Si estuvieras ocupado no contestarías a mis mensajes ahora…”

“Lo que sea, no quiero hablar contigo, déjame y ya está”

“¿Qué te deje? No te voy a dejar, ¿por qué si quiera quieres que te deje?”

“Porque esto es todo un error, creo que deberíamos dejarlo ahora.”

¿Qué deberíamos dejarlo? Por dios, pero qué mierda está diciendo… Resignada sin saber que más poder decirle tiré el teléfono a la cama y mis amigas buscaron una explicación. 

- Ade no lo dice en serio, seguirá cabreado, todo esto tiene que tener alguna explicación. – Dijo Patricia volviendo a repetir su gesto de esta mañana.

- ¡Yo es que lo mato! Te lo juro, estoy muy cabreada. ¿Qué se piensa el gilipollas este? Me va a escuchar… Puto niñato… - Gritó Lola. Patricia le quitó le móvil de las manos y me lo dio a mí.

Había un mensaje más.

“No quiero que vuelvas a pasar por lo de anoche, no debes pasar por ese agobio por mi culpa. Tenemos que dejarlo por tu bien. Es lo mejor ahora. Lo siento.”

“Harry no me hagas esto… No por mensajes. Yo te quiero. Por favor… Vamos a hablarlo”

“No seas pesada, joder.”