kagaya ubuyashiki

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U.A.

En este universo alterno Kagaya no tiene ese enfermedad que lo va matando lentamente, pero si tiene un cuerpo un tanto débil.

-¿que le pasa a (t/n)-san?-pregunto Amane mientras veía a lo lejos a la chica de cabellos castaño oscuro comiéndose sus uñas.

-cuando (t/n)-san tiene hambre se enoja y empeza a comerse las uñas, luego revisa su monedero para ver si puede comprar algo-la chica sacó de su uniforme su monedero y lo abrió-y al ver que no tiene para comprar algo empieza a llorar y dice que tiene hambre-los ojos de la chica comenzaron a cristalizar se y unas pequeñas lagrimas empezaron a salir de sus ojos rodando por sus mejillas-.

-tengo hambre-se escucho decir a la cazadora mientras colocaba su mano en el abdomen, Kagaya y Amane empezaron a reír de forma baja por las acciones de la chica.

[...]

-¿quieres se mi concubina?-pregunto amablemente el azabache dejando a la pilar confundida-lo hable con Amane, y esta de acuerdo-.

-hmm...-la chica colocó una mano en su mentón mientras pensaba aquella oferta-¿pero seguire trabajando como Pilar?-Kagaya asintió.

-no tendremos problemas con eso-.

-¿y por qué quieren que viva con ustedes?-.

-muchas veces no podemos dedicarle tiempo a los niños, por eso queríamos que tu te encargaras de jugar con ellos y tal vez educarlos. Mi cuerpo me impide poder compartir tiempo con ellos-y hay estaba nuevamente su sonrisa amable cosa que derretía el corazón de la de cabellos castaño oscuro-y siempre podrás comer cuanto quie-.

-¡aceptó!-el azabache dejó salir una risa debido a que si mencionabas la palabra comida la chica automáticamente aceptaba.

[...]

Vaya que aquella pilar hacia las cosas de maravilla desde que empezó a vivir con la familia Ubuyashiki.

Los niños no paraban de reírse y hasta incluso terminaban bastante cansados de tanto jugar con la pilar que tenia demasiada energía, era como una hermana mayor para aquellos niños los cuales poco a poco le fueron teniendo más y más afectó.

Aparte de jugar con ellos también les enseñaba artes marciales mixtas para que se pudieran defender, ya que Kagaya no encontraba muy apropiado que aprendieran a utilizar la espada a su corta edad.

-¡vamos tu puedes!-gritaba la pilar mientras Kanata hacia por fin la última flexión que le había puesto esta, terminando agotada en el suelo-no hiciste muy bien-dijo mientras cargaba a la niña y la ponía en una de esquinas de la casa.

La pilar era bastante estricta con los entrenamientos pero a la vez bastante suave ya que cuando veía que no podías más te decía que lo hiciste increíble aunque fallarás, cosa que motivaba más a los niños.

Kagaya y Amane sabían que habían tomado la mejor decisión de sus vidas al ver como sus hijos eran felices y prácticamente no les faltaba nada.

-¿pasa algo?-pregunto Kagaya mientras veía a la Pilar un tanto incomoda mientras daba ligeros masajes en su pierna.

-solo que en la misión que tuve me torcí un poco la pierna, por suerte no se fracturó pero el dolor es bastante incómodo-respondio mientras estiraba su pierna-con un poco de ejercicio volverá a la normalidad-.

-hay un ejercicio bastante bueno para relajar los músculos y quitar el estrés-eso llamo la atención de la chica la cual estaba bastante interesada en ese tema ya que ser pilar no es algo muy fácil y casi siempre se tiene estrés-tener relaciones sexuales-.

-¿qué?-dijo confundida y con la cara toda roja cosa que le sacó una pequeña sonrisa al azabache.

-es un buen ejercicio para relajar los músculos, además no tendría problema en ayudarte con eso-.

-tengo que prepara algo para comer-dijo la de iris chocolates para levantarse del suelo he irse bastante apresurada cosa que hizo sentir un poco mal al azabache.

Y el resto del día la chica se paso evitando a Kagaya, incluso se había encerrado en su habitación y se rehusó a jugar con los niños cosa que los entristeció.

[...]

Ya era de noche y Kagaya se encontraba caminando por los pasillos dispuesto a disculparse con la pilar por lo que había dicho, notó como la habitación de la chica estaba brillando y aparte se podía ver un poco de luz salir por la puerta ya que al parecer esta estaba un poco abierta.

Mientras se acercaba a la habitación empezó a escuchar unos suspiros y ¿gemidos?, no sabía si tal vez se trataba de su imaginación pero no había duda cuando este miro por la puerta algo que lo dejó sorprendido.

"Se estaba tocando"

La pilar tenía el Yukata bastante abierto dejando ver sus pechos mientras que con una de sus manos masajeaba uno de estos y con su otra mano libre tocaba su intimidad que no se veía debido al Yukata que cubría esa zona.

Sus mejillas estaban de un ligero tono carmesí mientras que unas pequeñas lágrimas estaban en el borde de sus ojos dejando maravillado al azabache por lo hermosa que se veía.

Al cabo de unos minutos esta mordió parte del Yukata y su cuerpo empezó a temblar, después de unos pocos segundos dejó de morder aquella prenda y una sonrisa de satisfacción se formó en los labios de la chica.

Cuando la chica miro a la puerta se quedo de piedra al ver a una persona hay parada y rápidamente se sentó mientras se acomodaba el Yukata y le daba la espalda a aquella puerta-¿me viste?-pregunto mientras escuchaba como la puerta se abría y se cerraba.

-sí-contesto el azabache mientras se acercaba a la chica la cual se ponía más tensa y nerviosa por cada paso que daba el mayor, hasta que este se sentó detrás de ella y colocó sus manos en ambos hombros de la chica-pero no me molestó-este beso el hombro de la contraria povocandole un escalofrío-¿te molesto lo que te dije hoy?-.

-es que... Yo respeto a la señora Amane y no me parece apropiado acostarme con su esposo cuando ella hacido tan amable-.

-no sabes que es una concubina ¿verdad?-esta luego de un rato nego con la cabeza-los concubinas son mujeres que viven con un hombre si la necesidad de estar casados o comprometidos, también se puede tener relaciones sexuales. Por eso le pregunté a Amene su queria que fueras mi concubina y ella aceptó-.

Ahora la pilar estaba como un tómate mientras que el azabache ahora la abrazaba por la espalda.

-¿quieres hacerlo?-pregunto cerca de tu oreja dando un escalofrío.

Y vaya que esa noche la pasaron muy bien ambos en aquella habitación cosa que los demás no notaron.

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Pedido por PinkuRen

kimetsu no yaiba (one-shot) (lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora