Guerrera

Rumbo a un abismo

El tiempo a pasado cómo 5 años, cada vez que queremos acercanos a Tariel siempre hay algo que se nos interpone, es de suponer que saben sobre isla sirena lo que sucede dentro, pues somos atacados constantemente por inquisidores, Damon sabe que vivimos en esa isla asi que sus ataquea son constantes no nos deja hacer la vida bien, hemos tenido que evacuar a las personas para que no haya mas inocentes, e estado a punto de la muerte y Phoenix bueno a perdido un brazo en una de sus peleas en mar abierto. Cada día nuestra estancia en Grexia se vuelve mas salvaje, Angus a cortado comunicación conmigo desde hace 4 años que así lo decidió, y creo que hasta tiene una mujer, me alegra por él, y yo estoy sola bueno no voy a lamentarme por eso. Alexander no quería dirigirme la palabra pero siempre me defendía en conflictos me amaba quizás a su manera, es injusto que no sepa que el niño que tuve es de el, pero es mejor así. -sentada en el escritorio de mi camarote-

Llegaba conmigo Eros entraba muy angustiado.

Edris:
-que pasa Eros? -veia su expresión- que sucede?

Eros:
-Damon, me entere que a mi familia la encontró y colgo a mi esposa. Tienen a mis hijos.

Me levantaba de la silla, e iba a el.

Eros:
-Ese desgraciado, Edris el plan que tengas es momento ya de atacar. Ese desgraciado esta haciendo cosas terribles.

Edris:
-Eros, lamento mucho lo que paso pero es imposible entrar a Tariel. Ahora nos verna llegar en barco. La veces que hemos mandado gente las han matado. Esto es delicado Eros.

Eros:
-se levantaba de un lado a otro- lo hare contigo o sin tu ayuda, te e apoyado en cada decisión Edris, son mis hijos. No harías lo mismo por el tuyo?

Le veía la verdad lo hare sentir mal si supiera que no siento afecto por el niño, quisiera tener un sentido de remordimiento o sentimiento pero todos estos años me e endurecido, sólo me quedaba observandole.

Edris:
-vamos a ir por tus hijos a Tariel y tratar de recuperarlos. Esto es una locura. Dile a los chicos que se preparen. Avisare a los demás que es hora de atacar. Me levantaba reunía a todos los piratas y mercenarios presentes.

Edris:-hablaba-
-a llegado el día de pedir su ayuda, necesito, que sus espadas se unan, necesito a ustedes en esta guerra, por que Tariel no dara caza a Piratas ni mercenarios, sera un reino libre. Les doy mi palabra, acabaremos con los inquisidores. Son nuestras aguas, sabemos cómo movernos en cada parte de este maldito mundo. Y les haremos ver que somos invencibles.

Todos gritaban de furia y estaban alentados.

Edris:
-estamos cansados de escondernos, ya no más, nosotros les daremos batalla, sera dificil pero no imposible, no pido que me sigan quien dese irse puede hacerlo. Pero les dire que un mercenario o pirata mas hara la diferencia, en el dia que le pateamos el trasero a los inquisidores.
Levanten la mano quienes me ayudaran en esto.

Todos levantaban las manos, yo veía a Phoenix, estaba decidido íbamos a pelear ahora, nos íbamos a preparar, caminaba hacía el mini bunker dónde estaba toda la operación, habian logrado hacer algo parecido a una Granada a un que no eran tan confiables pero de algo iba ayudar. Decia que cargaran los barcos, me iba alistar. Phoenix usaba una protesis en su brazo que el hacía me le quedaba viendo, es algo muy avanzado lo e visto en fin no importa. Necesitaba tener un respiro todo este tiempo e vivido peleando para sobrevivir, cuando sera que tendre paz?  Yo creo que hasta que muera.
Una vez lista subia al barco que yo dirigía, sonabamos los cuernos para dar por avisado que zarpabamos, no eramos muchos pero valdra la pena, iremos a Tariel a armar una batalla.
En camino me recargaba en la orilla del barco, Alexander se aproximaba a mi.

Alexander:
-a un no puedo comprender a pesar de tu indiferencia, quiera protegerte.

Edris:-le veia-
-No necesitas hacerlo, se muy bien defenderme.

Alexander:
-No sientes nada por mi?

Yo negaba con la cabeza

Edris:
-No! No pierdas la cabeza por mi Alexander, ocupate de tu vida, yo puedo defenderme. Lo que hubo fue hace muchísimo tiempo. Ahora sólo recuperaremos las tierras que una vez me vio llegar, -veia el horizonte- estuve lejos de casa por mucho tiempo.

Alexander:-volteaba a verme-
-Creí ser fuerte siendo quie soy, formandome quien soy, pero reconozco que tu eres mi debilidad Edris, quisiera que me amaras un poco cómo yo lo hago.

Yo viendo al frente sin hacer un gesto, el se alejaba, le veia al irse. El amor es absurdo en un campo de batalla, pierdes lo que amas, si hubiera sido normal quizás hubiera vivido amando a alguien, pero decidí este camino, no me arriepiento e llegado lejos. Haré un cambio de cómo nos ven.-me colocaba a un lado de Phoenix-

Phoenix:
-Edris-volteaba a verme-
Si muero, podrías hacerte cargo de mi hija?

Le veia

Edris:
-tienes una hija? Por que no me lo haz dicho?

Phoenix:
-haz estado ocupada y casi no nos vemos, o siempre hay algo que me impide decirtelo, tengo una hija en Tariel. Recuerdas a Amanda?

Yo asentía

Phoenix:
-ella quedo embarazada cuando desaparecimos, no conozco a mi hija pero se que existe. Podrias buscarla si yo no logro llegar.

Le veia extrañada

Edris:
-Que cosas dices, sí tu mueres yo también lo haré tonto. No vamos a morir -le tomaba el hombro- vamos a ganar.

Estaba amaneciendo sera un día largo con posibilidad de una batalla al final del día, usaremos humo para crear efecto niebla con los barcos y asi entrar a tariel, estrellaremos un barco contra la muralla. Espero funcine espero llegar. Descansaba durante todo el dia mentalizando lo que quizas pueda encontrar, matare a Taryn eso no cabe duda.

Angus en alguna parte de Grexia, estaba sentado revisando unos papeles, recibía una visita se quedaba helado. El se paraba lentamente, lo había encontrado Taryn, el veia a su actual mujer llamada Yada a lo lejos daba señas y la chica tomaba al niño, se salía por la parte trasera.

Taryn:-entraba con hombres-
-tantos años Angus, y te encuentro en Valle Violeta, pense que me hechaba de menos pero veo que no. En tu hogar modesto, -traían a la mujer pero no tenía al niño-

Angus preocupado veia a la chica, ella se veia asustada.

Angus:
-Vamos Taryn, no cometas una locura. No metas a ella en esto.

Taryn:
-esto tu lo haz provocado, desde que hiciste todo a mis espaldas junto a Edris, y me rompiste el corazón Angus, en verdad yo te amaba, creo que a pesar de todo te sigo amando.

Angus:
-Puedes quedarte con el reino, no me interesa ya! Dejame ser feliz Taryn. Tu también puedes serlo. Pero por favor no metas a inocentes en esto.

Ella se aproximaba a el

Taryn:
-regresa conmigo a Tariel y no le pasara nada. Necesito a todos mis enemigos cerca y que mejor tenerte en una celda Angus.

Angus:
-No te entiendo Taryn, estas loca. Yo te saque de ese basurero. Tu me debes todo a mi, lo que eres.

Ella volteaba enfadada

Taryn:
-No te debo nada, siempre escudado detrás de mi para tomar decisiones, ahora sere la reina que tu querías, hare que todos me veneren. Y matare a esa maldita perra de Edris, a su bastardo. Y todo lo que a contaminado desaparecere.

Su mente no estaba bien, se veía cómo desquiciada, se había vuelto peligrosa-angus tomaba un arma punzocortante-

Angus:
-esta bien Taryn tu ganas, regresare contigo. Mira tratare de que todo vuelva a ser como antes. Si prometes no hacerle daño a Yada y a Edris,
Seguiras siendo mi reina.

Taryn:
-eso quiero que sea todo cómo antes, accedere no acerle nada si tu la destierras de Tariel para siempre.

Angus no se creia lo que hacia pero por el momento trataba de evitar una tragedia, el asentía. Taryn veia a sus hombres y soltaban a Yada pero agarraban a Angus, se iba sin despedir de su hijo pero yada conocía toda la verdad asi que aceptaba que Angus se fuera.