Fui Capaz

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Recuerda una y mil veces el sueño, no uno en específico, sino a todos los que ha tenido a lo largo de su existencia.

Recuerda que mientras asistía a la preparatoria y secundaria, escuchaba las platicas de sus compañeras de clase contándose que tenían sueños raros, como por ejemplo sentir que se ahogaban o que caían de una inmensa altura, e incluso soñando una vida con una persona que al despertar olvidan su rostro o tan sólo recordando unos labios de distinta textura.

A ella le ocurría algo parecido respecto a caer de una inmensa altura, solo que ella caía en el círculo que formaban unas escaleras de caracol totalmente oxidadas. Cayendo y extendiendo su mano tratando de alcanzar la luna que se perdía mientras más y más se sumergía en la oscuridad de ese pozo sin fondo.

Sus ojos le pesan, la tenue luz de la luna le molestaba. Se movió incomoda tratando de colocar su antebrazo en sus ojos para que esa luz dejara de quemarle las pupilas y le dejara de sentir un punzante dolor de cabeza. Cuando logra su objetivo analiza de reojo el lugar, encontrando todo en pinta de color blanco, por lo cual deduce que esta en un hospital y sigue con vida.

Con vida...

Analiza otra vez el lugar y observa que es la esquina a su lado hay un sillón, donde ya hacia Norman durmiendo con un libro en manos que había dejado a medias.

Se toca la cabeza y trata de analizar la situación. Había muerto ¿no? Había decidido estar con Ray y acompañarlo en toda aquella travesía que conducía al cielo o quizás al infierno, entonces ¿Por qué sigue con vida? ¿Y por qué Norman estaba ahí?

No lo entendía.

Observar a su lado y nota la caja de terciopelo rojo, claro que la reconoce. Importándole poco sus heridas se extiende para tomar la caja y abrirla. Ahí estaba, ese bonito broche de pedrería artificial y el diamante de millones que pertenecía a la madre de Norman.

Lo saca de la caja y lo comienza a mirar con total nostalgia, mientras su corazón bombeaba de una manera acelerada y tan hermosa, creando aquel sonido representado la calidez y de un corazón completamente lleno.

¿Lleno?

Ignorando el completo hecho de que esta con unas heridas que tardarán en sanar, sonríe y derrama lágrimas, su sonrisa es de una adolescente enamorada que por fin consigue lo que por años no había alcanzado, apretando el broche contra su cuerpo pidiendo disculpas por haber pensado en irse y dejar a la persona que la estaba llenando de amor eterno. Ahora comprende el porque de ese nombre Belove.

Sus sollozos comienzan a volverse mas ruidosos, Norman despierta y ve a Emma dándole la espalada y escuchándola llorar, se queda en silencio por unos segundos hasta que el igual comienza a dejar que lágrimas rueden por sus ojos.

Ella apenas y voltea a verlo, lo ve sonriendo de una manera tan hermosa y serena que ella imita su acción.

Norman se acerca a la niña de bonitos cabellos atardecer, sentándose en el filo de la cama y juntar sus frentes, era así de simple, no hacían falta las palabras cuando todo ese amor y desbordaba de su cuerpo, dando la eterna calidez y dulzura que ella estaba buscando, y que el sin saberlo, igual lo buscaba. Por primera vez desde que se conocieron Emma había dejado su cara seria y de tristeza, para ser reemplazada por una que demostraba felicidad y amor.

No podía pedir más.

Con cuidado se atrevió a tomar con ambas manos las mejillas de Norman, haciendo la acción de juntar sus labios con los del albino. Era la misma sensación desde la última vez que se besaron, llena del bonito sentimiento de amor, de un sabor dulce parecido a la miel, demostrando inexperiencia y algo de torpeza pero que se les hacían tan perfecto.

Nacida Siendo Una Loveless [TPN. Noremma]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora