Por millones de años, los angeles cazaron vampiros para destruirlos. Por millones de años los vampiros cazaban angeles por el dulce sabor de su sangre.
Con el paso del tiempo los angeles se fueron extinguiendo y la raza sñrestante aumentando, llegan...
/No tiene nada que ver la canción pero escribí el capítulo con esta música de fondo HEKSHSJ
Desesperacion.
La dulce tonata de las trompetas bailaban en sus oídos enardecidos por el insoportable dolor en su pecho. Llevó su mano temblorosa a su pecho, lo tanteo quejándose por el dolor. Su respiración era fuerte y forzosa, estaba desesperado, trataba de respirar con todas sus fuerzas pero le era imposible sin antes ahogarse con su propia sangre.
El lobo a su lado solo le cuidaba, de forma expectante, ¿No era cruel aquello? Que el lobo solo lo mirara, que solo esperara. ¿Estaba esperando su muerte? No el no podía morir.
Un desgarrador grito brotó de su garganta, la tierra tembló bajo sus pies y los pájaros huyeron despavoridos, el lobo se colocó sobre él de forma repentina y gruñó mostrando los colmillos, sus ojos brillaron de forma intensa, y los ojos de JiMin respondieron centelleantes, pero el verde empezó a temblar, convirtiéndose en un aterrador rojizo. Le gritó al lobo encarandolo entre gritos y gruñidos.
La tierra parecía romperse.
•
— ¿Escuchaste eso? — Preguntó Jungkook hacia Namjoon, este miro hacia el interior del bosque, donde el menor había mirado, pero luego frunció el ceño.
— No... — Negó suavemente y se cruzó de brazos, tomando la temperatura de JungKook — No puedo creer que estés aquí... — Murmuro sonriente, para luego abrazarlo. — ¿Recuerdas... algo de cuando estabas sin vida?...— Jungkook estaba por contestar pero fue interrumpido.
— No lo hemos encontrado — YoonGi entró repentinamente a la escena con HoSeok detrás suyo y Jin a su vez. — Ha desaparecido.
— No debe estar lejos.
— Tiene alas, seguro ya se fue miles de kilómetros.
Empezaron a discutir, echándose la culpa mutuamente por haber perdido a seguramente lo que podría ser una bomba de tiempo. Más JungKook solo miraba hacia el ventanal, se levantó con cuidado, sintiéndose inestable, y camino hacia donde sus ojos no podían parar de ver.
Se quedó en silencio observando el baile de los árboles gracias a la brisa, colocando su mano sobre el ventanal, admirando el jardín del menor, lleno de bellas flores de distintos colores y tamaños para luego voltearse a ver a los mayores.
— Esta allá... esta en el bosque.
Enseguida los gritos se detuvieron y todos miraron en dirección a donde el menor apuntaba y se les erizo la piel de la nuca.
— Eso significa que debemos cruzar el jardín — murmuro Jin haciendo una mueca — JiMin jamás deja que pasemos al jardín.
— Dios, solo pasen. — murmuró YoonGi bastante cansado con la situación. Abrió el ventanal y salió caminando en aquella dirección rapidamente, los demás le siguieron poco después tratando de mantenerse cerca.
JungKook quedó mirando largos segundos el jardín mientras caminaba, varias veces lo había visto pero había cambiado bastante, dejó que los demás avanzaran y se agachó a tomar un muy pequeño macetero, en ella había una flor marchita, acaricio con suavidad sus pétalos secos pero no les pasó nada, la abrazó protegiéndola y miró el suelo, no pudo evitar jadear sorprendido al ver un montón de plumas blancas y largas cubrir la mayoría del piso, unas más sucias que otras indicando que habían estado más tiempo.
Empezó a caminar con rapidez persiguiendo a los demás con rapidez. El bosque tenía un aire turbio, no se escuchaba ningún pájaro como de costumbre, solo el sonido de las ramas quebrando se bajó sus pies. Jin estaba por decir que volvieran pero un grito desgarrador hizo ayer empezaran a correr en busca de la fuente del grito.
La escena que les encontró era desgarradora, JiMin se retorcía con furia en el suelo mientras gritos brotaban de su garganta, desgarrandola, giraba y pataleaba en el sueño mientras que sus alas aleteaban u lo obligaban a elevarse para luego chocar contra los árboles, haciéndole caer solo para volver a retorcerse como si le estuvieran dejando caer ácido en el cuerpo, sus huesos crujian con cada golpe, seguramente haciéndose trizas por la fuerza al impactar.
Chillo despavorido, arañando su cuerpo y lanzando puñetazos mientras gritaba incoherencias al cielo. De un momento a otro quedó quieto, un un charco de sangre se expandió bajo él, pero tan pronto como se esparció retrocedió como si nunca se hubiera prácticamente desangrado en el suelo. Su respiración se normalizó y sus alas descansaron tranquilidad sobre el césped, y Namjoon se acercó rápidamente a él y lo cargó entre sus brazos revisando que estuviera bien, más JiMin parecía dormido nada más, levantó su camisa y en su pecho únicamente había una cicatriz circular y pequeña.
Suspiró y lo cargó com cuidado empezando a caminar com tranquilidad de regreso a la cabaña para revisarlo como correspondía, pero todos quedaron en un pequeño transe cuando plumas blancas se desprendieron de las alas completamente negras del mayor.
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