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Al observar que el chico dejó de aplicar fuerza decidió soltarle, este tomó una gran bocanada de aire.

-Spinel, ¿qué haces aquí?- al reponerse su tono arrastraba cierto grado de enfado, ¿y cómo no?, casi le asfixia. 

Las palabras se frenaron un poco al notar como Steven fruncía el ceño y le miraba notablemente irritado. 

-Quería verte...- retrocedió ligeramente mientras pegaba sus manos a su cuerpo, estaba intimidada. 

Aquello retumbó en la mente del joven, su semblante se suavizó al ver con más detalle cómo los ojos de la gema se cristalizaban.

-Perdón- suspiró de manera prolongada.- Es solo que no debes hacer eso, cubrir mi nariz y boca, no puedo respirar- trató de transmitir confianza con un tono blando.

-Pensé que soltarías un grito si aparecía así de la nada, por eso tuve que hacerlo- el joven de rizos rodó los ojos haciéndose de palabras en su mente, ¿cuál era la reacción que entonces debió haber tenido?, es decir, entró a su casa en medio de la noche sin previo aviso y le sorprendió en su habitación.

-¿Pero por qué-- estaba a punto de preguntar los motivos de su singular visita y más cosas a detalle, aunque se vio interrumpido.

-Te extrañé- soltó con pena y un rubor en sus mejillas.

El de tez clara se enterneció, esa confesión había movido algo dentro de él. 

-¿De verdad?- caminó hacia ella, tomó la mano ajena que se encontraba a un costado del cuerpo de la delgada.

-Sí, mucho- el exceso de sinceridad hizo que el humano-gema sintiera la necesidad de jugar un poco con la situación. 

-He estado algo ocupado, además, nos vimos la semana pasada- con lo último claramente intentaba recalcar la "insistencia" de la otra, y aparentemente lo logró. 

Spinel se sentía de cierta manera una "acosadora", ya que, las últimas visitas habían sido por parte suya y por voluntad propia, no había una invitación de por medio. 

Tenía que admitir que, desde el día en que Steven le besó se sentía extraña; aquel muchacho no pasaba desapercibido en sus pensamientos, le recordaba de un momento a otro de forma espontánea. Revivía una y otra vez aquel recuadro, y al momento de hacerlo sus labios cosquilleaban, se sentía sumamente exaltada, ansiosa. Le gustaba las sensaciones que desencadenaba en ella, la mayoría desconocidas hasta el momento. 

Lo importante es que algo le obligaba a buscarlo, el querer repetirlo. 

-Lo sé, pero...- era difícil exponer lo que pasaba por su cabeza sin sonar extraña a oídos de su compañero. 

-¿Pero?- sonrió mientras tiraba ligeramente de su brazo para acercarla a él. 

Su boca se abría sin soltar ninguna palabra, entre menos eran los centímetros su mente se volvía un lío. 

Steven gozaba la tensión que generaba, las preguntas que quería hacerle se desvanecieron, los pensamientos anteriores fueron aplastados por otros "nuevos". 

Eran segundos que parecían eternos, solamente se miraban el uno al otro, la incertidumbre se hacía presente, ¿qué estaba pasando?, ¿qué estaban esperando? Las cosas quizá hubieran podido ser una mala broma o una burla, pero, las manos del chico se posicionaban en la cintura de la gema metiéndole más presión, un escalofrío le recorrió por completo el cuerpo, su respiración inconscientemente se alteró de golpe.

Como si ambos se hubieran sincronizado, rompieron la distancia. 

El de tez clara estaba sorprendido, era claro que la contraria estaba correspondiéndole con desesperación. Ahora se encontraba rodeando la cintura ajena, apegaba sus cuerpos con fuerza, aquel tacto entre labios se tornó un nivel más elevado. Steven mordía levemente el labio inferior de la gema de tonos rosas, cómo si quisiera fastidiarle le aprisionaba durante segundos tortuosos, ella en un principio se quejó por medio de sonidos leves, que con el tiempo se perdieron en suspiros. Spinel se dejó llevar por quién ahora le sostenía de los muslos para levantarla del piso, instintivamente llevó sus brazos alrededor de ese cuello y rodeó con sus piernas el cuerpo del otro, aumentando así la adherencia de sus partes bajas. El de rizos le estaba guiando a su cama, llegando a dicho sitio le recostó en ella, seguían concentrados en no romper aquel ritual, los sonidos húmedos incrementaban y sus respiraciones se aceleraban por la desesperación que les generaban dichas acciones. 

(Imagen que se me olvidó agregar para dar más detalle, ¿por qué?, porqué a veces pienso que me explico de la berenjena) 

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(Imagen que se me olvidó agregar para dar más detalle, ¿por qué?, porqué a veces pienso que me explico de la berenjena) 

Alguien no estaba pensando, claramente. 

Sin saber como el humano-gema tuvo un momento de razonamiento, dándose cuenta de la situación en la que se encontraba se separó de la de coletas, posicionó la palma de ambas manos a los lados de su compañera, se apoyó y levanto su torso para encararle, su mirada solo podía ser interpretada como "deseo", claro, la situación no daba para otro escenario. Sus hormonas le habían jugado de nuevo en contra, tal vez Spinel no entendía lo grave de la situación, no obstante, él sí, pero se esmeraba en ponerse pretextos o simplemente ignorarlo. 

Su rostro enrojeció cuando, al bajar la mirada notó la clara unión de ambos cuerpos que aún perduraba gracias al enrollamiento de la gema rosa. 

-Spinel, es tarde, necesito dormir- fue lo único que se le ocurrió debido a la situación incómoda. 

-Claro, tienes razón- sus miembros dejaron de sostenerse del híbrido y cayó completamente sobre el colchón. 

-A todo esto, ¿por qué la visita a estas horas?- trataba de esconder su vergüenza enfocando la vista en otro punto de la habitación. 

-Te lo explicaré luego con más detalle, pero necesito que esta vez seas tú quién vaya a verme- 

Steven no estaba muy convencido por lo dicho, sentía la necesidad de presionar a Spinel para que le contara de vez, pero ciertamente y como él dijo, ya era bastante tarde. 

Aquella figura delgada desapareció dejándole solo, tristemente, no pudo evitar sentirse frustrado por culpa de lo recién acontecido. 

°°°

¿Qué demonios hago con mi vida actualizando a esta hora?, no sé 

¿Ya están al tanto del mame del Steven siguiendo los pasos de su madre? jsjs

¿Alguien más sigue considerando extraña la obsesión de Onion hacia Steven?

¿Ya me debería ir a dormir en vez de estar escribiendo a lo wey? asies

31 DÍAS DE JUEGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora