-¡Spinel! Qué alegría que estés aquí- el alma le regresaba al cuerpo. La mencionada estaba de rodillas cerca del río.- Temía no encontrarte-
-¿Para qué?- la pregunta le desubico.- ¿Para qué querías encontrarme? ¿Vienes a presumirme a tu noviecita?-
-¿De qué estas hablando?-
-No me trates como una idiota, Steven- se levantó y le miró fríamente.- Ya no soy tan despistada como para no entender que demonios pasa-
-Ya te lo dije, no es lo que estás pensando-
-¿No? ¿Acaso no lo es?- con su mano en el pecho contrario dio un ligero empuje.- ¿Por eso me ponías tantas trabas antes? ¿Por eso no querías hacer el amor conmigo?- con pasos amenazadores le hacía retroceder.
-No, es solo qué--
-¿Que qué? Por eso no querías decirme que era una pareja, por eso no accediste a salir conmigo ¡Por eso me convertiste en tu opción de respaldo!- esta vez el empuje le mandó al suelo.- ¿Amigos con derechos? ¿Esa era tu nueva manera de decir "juguete"?- ardía en furia.
-No, no, Spinel, yo de verdad te amo- sus palabras ya no tenían validez ante el manojo de nervios que era su compañera.
-¡Mentiroso!- lo tomó de los hombros lanzandolo lejos.
Una vez en el aire activó su burbuja, anticipando el rebote cercano contra la tierra. Spinel no tardó en acercarse a su ubicación.
-Spinel, por favor- se levantó del piso.
-¿Qué? ¿Piensas resolver esto con un decreto pacífico?- con impulso se dirigió a él. Uno tras otro, los golpes amenazaban con hacerle un daño puntual y serio.
Steven solo era capaz de defenderse, no se sentía con el mérito de atacar por muchas razones, aunque su resistencia no duraría mucho, los golpes que lanzaba Spinel eran fuertes y venían en todos los ángulos.
-¿No piensas pelear acaso? ¿Vas a volver a cantarme una estúpida canción para convencerme?- atinó a darle un golpe en el estómago.
-N... No, está...- el aire se había esfumado por un momento de su sistema.- ¡Esta no es la manera! ¡Y tú ya lo sabes!- ahora se cubría con su escudo.
-Claro, tienes razón- se acercó hasta quedar de frente, lo único que les separaba era la transparencia de aquella barrera curva.- Tú no puedes pelear porqué con lo único que sabes herir es ¡Con las palabras!- dio un giro de impulso, entrelazó ambas manos y aumentó el tamaño de estas, dio en el centro de la protección y la lanzó lejos con todo y portador.
Su cuerpo dolía, no tanto como el día donde sus poderes flaqueaban, simplemente era el impacto de recién.
-Eres un mentiroso, Steven Universe- otra vez le tenía en frente, acorralándolo contra el piso.- Tal parece que me equivoqué, tú y tu madre tienen el mismo poder- habló gélidamente mientras clavaba su mirada sobre la contraria, unos ojos que buscaban acabar con él como en la ocasión que se conocieron.
-¿Q-qué?- Spinel ya lo sabía, la mención de su madre era tocar un punto delicado en el humano.
-Ambos pueden hacer que todo el mundo les ame, y cuando se han ganado la confianza de los otros ¡Bum! ¡Sorpresa! Hacen lo que se les da la gana con ellos, claro, solo te serví de diversión un tiempo ¿No?- su risa volvía a someterse en la locura, era escalofriante.
Steven estaba siendo embestido brutalmente con las palabras de su compañera, le estaba doliendo. Una parte de él gritaba internamente "¡No es cierto, no es verdad!".

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31 DÍAS DE JUEGO
FanfictionSteven se encuentra en una etapa de "crecimiento" muy peculiar, tiene una lucha constante debido a sus pensamientos "incorrectos". En una de sus visitas a Ciudad Playa, sin quererlo, Spinel termina involucrada en la confusión de su joven amigo, arr...