Star Wars: Los misterios de la Fuerza

Capitulo 2

Leila's POV.

Habia pasado ya mucho tiempo, mi vida se habia convertido en una rutina cualquiera. Vivia en Coruscant y estaba trabajando en el Senado; habia logrado relacionarme mucho mas con respecto a los otros senadores, puesto que antes estaba mas preocupada en los asuntos Jedi. Junto a Bail Organa, y otros senadores mas, incluyendome, opositores al Imperio, habiamos creado una alianza secreta. Esta alianza era en apoyo a los Jedis que habian sobrevivido y con mis contactos de la Elite, habian obtenido un puesto en ella, la mayoria habia cambiado de identidad y otros se mantenian ocultos en sistemas desconocidos, como el Maestro Yoda quien esta en Dagobah. Yo habia estado en la busqueda de Jedis, ofreciendoles mi ayuda, la mayoria desconfiaba de mi puesto que sabian que mi hermano era el traidor pero cuando les hablaba de la ubicacion real de Obi-Wan, accedian a mis servicios. Por mi parte, mi cumpleaños se acercaba, junto al de Luke y Leia. Planeaba visitarlos pero al ser niños de cinco años, me reconocerian pero se que me olvidaran con facilidad. Con respecto a la maldicion que tengo, me habia dirigido a Kerreshky a hablar con las brujas, me hablaron sobre que hasta los veintinuno emvejeceria y luego, viviria durante mucho tiempo. Hoy habia arrivado a Naboo para el informe que siempre le hago a mi madre. Hoy en dia, nadie sabe la verdadera identidad de Anakin actualmente, de hecho no lo he vuelto a ver desde aquel entonces.

-Princesa Leila- escuche que alguien llamaba a la puerta de mi habitacion.

-Adelante- dije.

-La Reina pide su presencia.

Me levante sin decir nada, y sali de esta. Camine por el Palacio, que se encontraba muy solitario, al llegar al Salon de la Reina, ella no estaba ahi, tampoco la Junta Consetorial.

-Princesa Leila Skywalker.

Abri mis ojos de sorpresa, aquella armadura negra y respiracion terrorifica, aquel hombre misterioso con el que habia tenido pesadillas, se encontraba en frente mio.

Mi espada se encontraba afirmada en mi cintura, arrastre esta por la Fuerza y la encendi.

-No es necesario que uses tu espada conmigo, Princesa.

-¿Quien eres? ¿Como has logrado evadir la seguridad?

-Despues de mucho, no me sorprende que no me reconozcas. Pense que serias mas inteligente... Busca en tus sentimientos, pensamientos, recuerdos, tu respuesta se encuentra en ti misma. Abre mas tu sentido, se una con la Fuerza.

Increiblemente, eso hice, busque en mis pensamientos y recuerdos, llegando a aquel lugar que me habia prometido cerrar permanentemente. La respuesta aparecio.

-Anakin.

-Ese nombre ya no significa nada para mi.

-Pero ese es el nombre de quien eres, el nombre de mi hermano. Aunque lo quieras negar conmigo y lo demas, sabes que te conozco lo suficientemente para saber las razones de porque traicionaste y asesinaste a los Jedi.

-No se que hare contigo. Eres una amenaza para el Imperio...

-¿Amenaza? ¿Ahora pase a ser parte de tu lista de exterminio?

-El Emperador dijo que era eleccion mia si te mataba o no.

-Sabes que nadie me puede hacer daño, Anakin.

-Tu debilidad es tu fe en tus poderes.

-Y tu debilidad es la idea de perder a alguien que amas y la confianza en tus nuevos poderes. Esa es la razon del porque no puedes matarme.

-No comprendo. Estas completamente sola, ¿Y aun asi quieres vivir?

-Tengo cosas por las cuales luchar. No soy Rebelde, pero luchare para que la Democracia vuelva a nuestro gobierno. Luchare por la Antigua Republica, por la cual mi novio y mi mejor amiga defendieron a muerte.