reales; patrick hockstetter

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- Entrad chicos, no está mi hermano - dije amablemente.

- Gracias - contestó Stan, la verdad es que era un chico muy educado.

- Íbamos a hacer el trabajo - dijo Beverly.

- T- tengo una i-i-idea, podemos j-jugar a un juego, n-n-nos vamos pr-pr-preguntando cosas y-y así nos conoceremos t-t-todos mejor - comentó Bill - Y al f-final a-a-apuntamos lo que nos ha d-dicho nuestro compañero -

- Me parece una idea fantástica - le dije a Bill.

- Pero chicos... a mi me ha tocado con Víctor Criss - contestó Stan tragando saliva.

- No te preocupes, te apunto cosas que le gustan en una hoja y a él le haré lo mismo - respondí a Stan, a lo que se relajó.

- Gracias Kendall - me dijo agradecido a lo que yo le sonreí.

- Podemos subir a mi cuarto, por si vienen mi hermano y los demás - comenté.

[...]

- Me gusta tu cuarto, tiene estilo - me dijo Stan.

- Gracias Stanley - le contesté sonriéndole.

- Puedes llamarme Stan - me recordó.

Mientras todos se sentaban en el suelo yo cerraba la puerta con llave, por si mi hermano venía.

- Bien, empecemos - dije mientras cogía una botella -, a quien le toque le tiene que preguntar al otro que le toque - giré la botella.

- Mike -

- Kendall -

Hice un gesto de queja, a lo que él se dio cuenta.

- Emm... ¿donde vivías antes de venir a Derry de nuevo? - preguntó con un poco de miedo.

- En Londres - contesté con fastidio.

Volvimos a girar la botella.

- Beverly -

- Richie -

- Richard, ¿te gusta alguien? - preguntó Beverly riendo.

- Lo primero, no me llames Richard que me recuerdas a mi madre, lo segundo, solo tengo ojos para la madre de Eds -

- ¡Quieres dejar a mi madre! - respondió molesto Eddie, lo que hizo que todos riéramos.

Tras unas cuantas rondas más me tocó a mi.

- Kendall -

- Y... ¡Ben! - dijo Richie en voz alta.

- Ben, ¿fue por tu culpa por lo que mi hermano repitió curso? - pude notar como se ponía nervioso.

- Emm... yo... s-sí - respondió Ben con sinceridad. Todos se quedaron sorprendidos a su respuesta.

Después de un par de rondas empezó a oscurecer, ya habíamos hecho las suficientes preguntas como para hacer un trabajo bastante completo.

- Toma Stan - le dije a Stan tendiéndole la lista.

- Muchas gracias Kendall - me agradeció Stan sonrojándose.

Mientras nos levantábamos y ellos cogían sus cosas de encima de mi cama escuchamos un coche aparcar.

- Mierda - dije en voz alta, era Henry - , chicos, ¿os daría miedo saltar por la ventana? - pregunté señalándola.