¿Qué pasaría si te dijese que Bella Swan tenia una hermana?
¿Y si esa hermana se alojase en la cabaña 13 del campamento mestizo?
Las hermanas se reencontraran a petición de Renee en Forks aunque nunca se llevaron del todo bien. Bella siempre culpó a...
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P.O.V. Lilith
- ¡Hey!- gritó Collin haciendo que saltará del susto.
- ¡¿Quiéres matarme o que te pasa imbécil?!- exclamé lanzándole una mirada intimidante.
- Igual de agradable que siempre- respondió Brady sarcásticamente mientas que Collin tragaba grueso, atemorizado.
- Tú cállate, moreno teñido- contesté sacándole el dedo corazón y restregandoselo delante de su cara. La mirada reprobatoria de Emily hizo que una leve sonrisa apareciese en mi rostro.
- Serás puta- dijo Brady, ofendido por mi comentario.
- ¡Brady, vocabulario!- amenazó Emily mientras el resto de chicos se reían sin tratar de disimular.
- Estabas mirando a Paul como una acosadora, no recordaba este tipo de hormonas viniendo de tí- dijo él ignorando a Emily.
Su comentario me pilló desprevenida. ¿Cuánto tiempo me había quedado mirando a Paul? Lo más importante, ¿qué coño había pasado para que me comportáse así? Como acto reflejo, mandé una mirada de asco a ambos chicos y me dirigí hacia la manta de picnic, donde Kim y Emily se encontraban sentadas. Sonrieron enormemente al ver cómo me acercaba con las mejillas sonrojadas.
Vale, nunca me había sonrojado. Y menos por una persona que ni siquiera conozco. No era común verme colorada, pocas personas habías tenido el privilegio de verme así.
Levanté la cabeza y puse mi feceta habitual en la cara. Todas las miradas estaban puestas en mi, pero hubo una que realmente me sorprendió. La de Paul. Ese chico me miraba diferente a los demás. Me observaba fijamente, analizadome como si fuera lo único que le importaba. Me removí incómoda, tratando de apartar su mirada de mí. Cosa que, obviamente, no funcionó.
Al parecer, Kim y Emily se dieron cuenta de la situación.
-Chicos, ¿por qué no van a jugar un rato con el balón?- comenzó a decir Emily.
- Pero Emily, ni siquiera terminamos de merendar- se quejó Jacob, indignado.
- Calla Jacob, vamos a jugar un rato- contestó Nessie, la cual parecía entender a que se refería la morena.
- Todo lo que digas me parece bien, cielo- contestó el chico embobado.
- ¡Dejaste que te comiera la cabeza, hermano!- gritó Quil Atera haciendo reír al grupo.
Todos corrieron tras la pareja, hacia un lado de la playa. Miéntras tanto, yo me quedé con ambas chicas, aún sintiendo la mirada de Paul en mi espalda.
- Bueno, sentimos si Paul te incomodó- dijo Kim sonriendo, como si supiera algo de lo que yo no tenía constancia.
- No, tranquila. No tiene importancia- contesté evadiendo el tema.
