Mi Vecino || Joerick

04

Erick

El día escolar se pasa realmente rápido junto a Christopher, el chico hace chistes cada cinco segundos por lo cual siempre estoy alegre a su lado.

Al llegar a casa, mamá demora aproximadamente dos horas en aparecer, en las cuales simplemente me digné a cambiarme y mirar animé en el televisor, sentado en la sala.

Boku no hero academia se está reproduciendo cuando mamá entra por la puerta y niega con la cabeza mirándome.

—Me voy a bañar, luego tú —Me señala—. También lo vas a hacer.

Alzo el ceño y ella se va sin más, desapareciendo por el pasillo. Vuelvo mi mirada al capítulo y me entretengo por unos largos minutos allí.

Mamá demora aproximadamente una hora en el baño, ya que se debe de arreglar, luego al salir llega al pasillo, observándome.

—Yo ya me voy yendo a la casa de la vecina —Avisa, dejo de mirar el televisor para fijarme en ella.

—¿Qué vecina? —Cuestiono.

—Patricia, la que tiene un hijo con rulitos —Habla, siento una punzada en el corazón—. Nos invitaron a cenar con ellos.

Me mantengo allí en silencio, sin saber qué decir. Ella se percata de eso por lo cual decide agregar algo más.

—Bueno, me voy, tú báñate y arréglate, mucho animé pero poco jabón —Admite, para luego abrir la puerta y salir de casa.

Río un poco y me mantengo en mi lugar, pensante.

Ir a la casa de Joel, suena demasiado tentador, pero... ¿qué diré? Nunca mantuve una charla muy fluída con él, y a decir verdad sería muy extraño que no haga el ridículo a su lado.

Pero por otro lado... quiero hacerlo, arriesgarme por primera vez.

—Qué más da —Digo mientras apago el televisor y cierro la puerta de la entrada con llave, para luego ir a mi cuarto a agarrar mi vestimenta.

Opto por una camisa blanca y un Jean, además de mis zapatos blancos.

Me baño pensando en absolutamente todo lo que podría pasar esta noche, terminar arruinando la cena o comenzar una amistad con el rizado.

Al terminar de bañarme luego de unos minutos, me seco y coloco la vestimenta. Siento el nerviosismo crecer en mi interior mientras me observo en el espejo del baño y suspiro.

Esto será más difícil de lo que pensaba.

Al salir de casa, cerrando la puerta con llave y guardando mi teléfono en el bolsillo el nerviosismo aumenta.

Llego a su casa en un abrir y cerrar de ojos, y allí afuera en silencio me pregunto una y otra vez si esto es lo correcto.

Mi mano se mueve hacia el timbre, y me vuelvo a cuestionar si debería hacerlo.

Cerrando los ojos aprieto, y los abro esperando que abran.

Los segundos pasan, y siento que mi corazón late demasiado rápido, mis manos sudan, y los nervios me calcomen por dentro.

Al abrirse la puerta lo veo, en su frente trae la misma bandana de la mañana, aunque trae puesto diferente vestimenta. Una remera negra, un vaquero y zapatos.

—Okay —Dice hablándole a su madre, sin fijarse aún en mí. Al cambiar la dirección de dónde se está fijando noto un cambio en sus facciones—. Oh...

Me mantengo allí, notando como el rizado me observa en silencio, tanto que hace que mis mejillas ardan.

—Em... —Susurro mientras aparto la mirada, Joel reacciona.