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MARATÓN 3/3

Estuvimos unos minutos jugando con el pequeño Yeontan cuando Taehyung recordó la comida que esperaba por nosotros en la cocina.

—Mierda la olvidé—se regañó a sí mismo.

Corrió adentro de la casa con mi mirada clavaba en su espalda desviándose tal vez un poco más abajo...jeje.

—Luego nos vemos pequeño—acaricie por última vez al peludo.

Fui detrás de Taehyung que se dirigía hacia la cocina, acercándome más pude percibir el delicioso aroma de la comida .

—Huele delicioso—dije sentándome en una de las sillas de la barra.

Me miro con una sonrisa mientras calentaba la comida.

—Se ve delicioso—dijo dándome una mirada de arriba abajo.

Lo mire divertida entre retándolo.

—Que tan delicioso?—mordí mi labio.

—Podría devorarlo ahora mismo.—me dijo con una sonrisa pícara.

Reí ante su expresión y prendí el televisor, donde justamente pasaban el noticiero de la tarde.

—Nuevamente el misterioso asesino volvió a hacer aparición en la cual la vicitima fue nuevamente  una joven localizada como Jung Yerin de 23 años de edad fue encontrada sin vida a las afueras de Seoul, contaba con la respectiva marca hecha con cortes de navaja de este anónimo agresor la cual es una X solo que en esta ocasión la distintiva característica se encontraba en uno de sus muslos...

Yerin?...

Voltee a ver a Taehyung con algo de preocupación, este solo miraba el televisor atento.

—No se te hace conocido ese nombre?—capte su atención por un momento pero después devolvió sus ojos al televisor.

—Si...—dijo en voz baja pero sin despegar su mirada de la pantalla.

—Está es la quinta víctima, aunque no creo que el asesino sea de por aquí, si no ya lo habrían atrapado—devolví mi mirada al Tv.

—o Puede ser alguien muy inteligente...—susurró tan bajo que no logré escuchar.

—Mande?

—Ya es tarde JiHan no creo que deberías irte a casa, no quiero que te pase nada   malo—me miró.

—Solo si puedo dormir en la habitación de invitados.

—Okay...—terminó de calentar la comida y nos sirvió a ambos.

Narrador POV

Caminaba a paso rápido por las calles solitarias y oscuras de aquel barrio, el frío viento golpeaba la piel del chico entumeciendo sus mejillas, paso tras paso parecían escucharse más de lo habitual cuando el zapato se encontraba con el mojado pavimento de la acera. Vestido totalmente de negro para no llamar demasiado la atención de la escasa gente que pudiese haber.
Llegando así a un club nocturno algo concurrido en aquel barrio, famoso por algunas acciones ilegales cometidas ahí dentro. La gente ya se escuchaba a unos cuantos metros y la música proveniente del lugar también.
Acercándose a la entrada con un simple movimiento de cabeza los grandes guardias posados en la entrada le permitieron el paso.

Se sentó en el área VIP la cual se encontraba en un tipo de balcón que había dentro del club así los adinerados podrían ver a todo aquel que entrase al club, incluyendo a las chicas que solían subir a esa exclusiva área para pasar tiempo con ellas o hasta quizá tener una noche de sexo. Las cuales aceptaban debido a que aquella zona era algo costosa de reservar, por lo que solo alguien con verdaderamente mucho dinero pagaría.