XXXVIII - Regalo Boreal

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—E-es muy frío por aquí ¿Eh?

—Pues será invierno pronto Hobi ¿Qué esperabas? ¿Qué hiciera calor? ¿Unas palmeras? —pregunta divertido por la queja del monarca. Hoseok hace un puchero antes de abrazar a Jimin por la espalda.

—Solo creo que deberías abrigarte más. Aunque te siento bastante caliente ¿Tienes fiebre? —Niega con la cabeza—. ¿Para qué vinimos? Dos días de viaje que seguro Taehyung usará como excusa para montarme más de lo que es saludable para mí. —Agrega con una sonrisa tensa.

—A eso llamo saber llevar riendas.

—No lo apoyes.

—Me hace gracia. En mi vida hubiera pensado en hacer lo mismo con Namjoon. Me gustaba mucho la manera en que lo llevábamos —dijo Jimin con ligera discreción—. Bien, que importa ¿No te parece un bonito lugar?

—Sí, realmente lo es.

—Podrías venir con Taehyung algunas veces ¿Sabes? —Ladea la cabeza, Jimin se recuesta de un árbol solitario. Es un lugar inmenso que da una sensación fantástica y paradisiaca gracias a lo estéril que es con respecto a la mano humana.

No hay casas.

No hay tierra sin pasto.

No hay gente haciendo escándalo.

Es un lugar demasiado perfecto.

—Venía aquí con Namjoon antes del invierno. Hay una sorpresa por la noche. Sería un lindo detalle que Taehyung también esté presente para cuando lo descubras—explica bajando lentamente hasta sentarse—. Me di cuenta de que no tengo nada para ti.

— ¿Disculpa? —Toma lugar a su lado, extrañado, el cabello corto y blanco se mueve gracias a la brisa.

—Namjoon te heredó el título; te enseñó a pelear, te hizo un lobo que nadie jamás olvidará. Yo solo me quedé viendo como eso sucedía. Hasta ahora me di cuenta de que no tengo nada que dejarte.

—Me dejaste sentirme orgulloso de mi casta y lo que soy ¿Qué más podría pedir?

Sonríe débilmente.

—Te dejo este lugar. Se supone que era un secreto entre Namjoon y yo, pero me he dado cuenta de que. Quiero que tú, Taehyung y mis nietos tengan tanto o más de lo que él y yo conseguimos. Aun cuando dos de ellos no me van a recordar.

—Si lo harán. Siempre los estás cuidando.

—Sabes cómo llegar. Puedes dejar a los cachorros con Hoshi aprovechando su visita y traer a Taehyung, no sea que el invierno se adelante y ya no pueda hacerlo.

— ¿Ahora?

—Si.

— Acabamos de llegar.

—Ve tu solo. Traje la carpa y aquí no vienen animales ni personas. Estaré bien.

—Oh. Vale ¿Seguro? —Asiente con la cabeza. Jimin luce extrañamente feliz, como no lo ha visto en un año entero, ni siquiera cuando su cuarto cachorro nació—. Bien... vendré con Tae ta. pronto como pueda.

—Adiós Hoseok. —Despide débilmente, apenas presta atención a esa rareza.

Jamás lo llama Hoseok.

Jimin lo ve irse y quita la montura a su caballo apenas Hoseok está lo suficientemente lejos. La noche llega pronto y con ello puede observar la gran aurora boreal, solo sentado con la espalda recostada en el tronco. No arma la carpa, no se coloca otro abrigo. Permanece ahí tan quieto como es posible viendo los colores danzar en el cielo.

Beta | Vhope || BOOK 2#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora