XIX - Dulce Bienvenida

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El puerto está abarrotado a cada ocasión en que los que fueron de saqueo vuelven a casa. No es la excepción. Muchos adorables reencuentros, algunas caídas al agua por abrazos y efusivos y un verdadero sufrimiento para bajar le botín de las naves. No permiten el paso y lo que menos se puede perder es el contenido de esos cofres que tanto costó llenar -y montar al barco en primer lugar-.

Hoseok es prácticamente arrollado por Taehyung apenas llega, siendo agarrado de la cara por este para besarlo de forma desesperada. Casi como si estuviera ocurriendo una tragedia demasiado grande por lo que Taehyung se aferra. Al separarse solo se vuelve a juntar y no es que lo moleste, en lo absoluto el asunto es que quiere saber que ocasiona ese comportamiento.

Aparte de los casi cinco meses de estar fuera de casa obviamente.

Cuando finalmente el Omega parece estar saciado se separa del Beta para sonreírle y recibir el mismo gesto por parte de Hoseok. Le da un beso en la nariz con un chillido animal casi desesperado.

—Extrañe mucho a mi sol.

—Es un tanto cómico que seas tú quién me diga así. —menciona señalando el cabello con la mirada. A final de cuentas, el que es rubio aquí es Taehyung, no él. De la manera en que sea, Taehyung siempre lo interpreta como un sol.

Desconoce la razón a ciencia cierta.

— ¿Qué tal les fue? ¿Fue complicado?

—Pues...—Un par de hombres casi se llevan a Hoseok por en medio, aunque esto fue totalmente a propósito. El par ya muy conocido por Taehyung.

— ¡Complicado para los franceses en París! Si queda alguien vivo allí debe estar llorando. —Carcajea divertido y orgulloso el Omega de melena rubia platinada y larga de un lado. Jiyong.

— ¡Jamás habrán visto caer su santa ciudad más rápido! —Prosigue el Alpha de cabello rubio cenizo. Seunghyun.

El par tiende a juntarse a Hoseok para entrenar o bien luchar juntos. Son una especie de amistad un poco extraña. El par se va celebrando con un grupo que arrastra a Hoseok y Taehyung tiene que unirse a esa muchedumbre para comprender del todo que ocurre pues no lo explican muy claro.

Namjoon ya está con cuerno en mano y en su trono. Al entrar la capacidad máxima de hombres y Hoseok se levanta, alzando el cuerno con ímpetu hasta el punto de botar un poco de su contenido.

— ¡Por Hoseok, el Víbora Lobo que conquisto París en menos de un día! —La exclamación es enorme y Hoseok sacude la cerveza que le tiraron encima para festejarlo. Taehyung tamborilea los dedos. Así que es eso.

—Los tesoros serán divididos después del banquete. Es tiempo de celebrar la victoria ¡ADELANTE! —Aporta Jimin con algunas Betas y Omegas repartiendo vasos llenos de cerveza para todos.

— ¿"Víbora Lobo"? —cuestiona a Hoseok que sonríe quitando el exceso de líquido.

—Digamos que pelear de manera extraña por fin trajo sus frutos.

—Ya veo. Tiene más frutos de los que imaginas, ven conmigo.

Hoseok tiene la esperanza de celebrar un rato con el resto para bebe y comer hasta que anocheciera un poco. Lastimosamente ese plan queda totalmente relajado por qué Taehyung así lo quiso. Lo arrastra hasta la pequeña casa que tienen en Kattegatt, casi sin importarle cerrar la puerta lo empuja directo a la cama.

—Debo felicitar a mí beta como se lo merece ¿Cierto?

Apoya los codos para levantar el torso mientras Taehyung se deshacía de la mayor parte de su ropa, quedando únicamente con la prenda superior. No le cuesta deshacerse de las prendas de vestir de Hoseok, con una mano estimulando la erección apenas despierta de este para que se endureciera más. Con un poco de ayuda acaba por subir totalmente al regazo de Hoseok.

Era un ritmo más apresurado al usual, pero bien, Taehyung tiene demasiada ansiedad encima y de algún modo realmente quiere felicitar a Hoseok por el logro. A final de cuentas, es una de las cosas que tanto quería lograr y ahí están cumplidas. Muerde el labio inferior del Beta, sonriendo levemente con los ojos lobunos al igual que Hoseok.

Hoseok jadea pesado por la resistencia que da entrar en Taehyung, esta lubrica por cosa natural de Omega, pero no es suficiente aún. Cosa que a este parece no importarle en un gesto totalmente masoquista de su parte.

—Oye, calma-

—No me voy a calmar después de que me dejaras aquí tirado por cinco meses ¿Crees que vivir en abstinencia después de semejante celo es sencillo? —Increpa exhalando aire caliente contra el cuello de Hoseok para luego morderlo y tironear la carne como si fuese a arrancarla.

— ¿Crees que no lo sé? Te extrañé. —Asegura rasguñando la cadera y hacia arriba de la piel de Taehyung, rompiendo la miserable tela que aún lo cubre.

—Que tal el experimento. —cuestiona con una risita.

—Fatal. No me gustan los Alphas.

—Igualmente. Supongo que ambos estamos defectuosos.

—Un defectuoso derroto al Dios cristiano y es heredero de este reino ¿Te gustaría acompañarme aun así?

—Por supuesto.

Hoseok gira, quedando con las manos ancladas a cada lado de la cabeza de Taehyung, aplastando un poco el cabello de este al mismo tiempo que lo jala. Taehyung deja las piernas abiertas, apenas dobladas para cuando Hoseok empieza el vaivén en su interior. Metiendo y sacando el pene en su culo. Saca la lengua, como su lado lobuno se lo exige, a la vez que su cola hace acto de presencia sin mucho problema.

Toma a Hoseok del rostro y al juntar las bocas enreda los brazos alrededor del cuello del beta, jalando su cabello por igual. Incita a que se mueva más rápido, tener mayor fricción entre su cuerpo y el ajeno.

Ambos pueden decir con un cien por ciento de seguridad que esto es lo suyo. Habían hecho una secreta prueba y era sencilla: Experimentar con un Alpha. Sus sujetos de pruebas eran Yoongi y Jungkook respectivamente, que quienes no se negaron a esto pues no lo sabían y de saberlo seguramente tampoco se habrían negado.

El punto es que... en ninguno de los casos les gusto. Hoseok aprovechó aquella oportunidad en Francia antes de invadir París, Taehyung el momento de flaqueo. Podrían catalogarlo como la peor experiencia que han tenido a nivel sexual y eso incluye masturbación, celo, heladas con parte intimas recogidas, etc.

A Taehyung no le gustó el nudo, tampoco no poder parar de chillar adolorido por el trato brusco.

A Hoseok tampoco le gustó el nudo, la incapacidad de la versatilidad.

Pueden decir que fue un auténtico desastre que fundamenta lo obvio: Sea por cursilería inútil o poca química corporal con alguien más se desean demasiado mutuamente. Tanto que solo de esta manera sienten verdadera comodidad.

Hoseok no debe temer que Taehyung quiera irse con algún Alpha, que no lo llenase lo suficiente.

Taehyung no debe temer que Hoseok se fuese con algún Omega o una mujer Beta, pues en ambos casos no podrían cumplir con esa necesidad apenas existente en él que solo se sacia siendo el sumiso.

Solo entre ellos se entienden y sacian.

¿Qué más pueden pedir?

Aunque en esta ocasión en específico Hoseok no suelta ni deja a Taehyung hacerle nada en ese sentido posicional. La necesidad de morderlo en la nuca todo el rato fue demasiado grande a pesar de que sabe que nada surgirá de ello. Solo estuvieron haciéndolo como si ambos fueran animales en celo hasta que las energías no dieron para más. La luna está bien en alto para ese momento y mira que la llegada fue en la mañana.

—Ouh Hobi, te agotaste. —Ronronea divertido, poniéndose encima de este y balanceando las largas piernas rasguñadas.

— ¿Y acaso tú no? —cuestiona con la cara colorada y sudada. Todo el pelo que tiene su cuerpo está mojado. Cabeza, axila, entrepierna. Todo.

—Por supuesto que sí, también me dejaste muy abierto, podría despertar mañana temprano y hacerlo yo mismo sin dolor alguno—Algo le dice que piensa hacer eso y la idea no lo fascina. Ha descubierto que le produce sueños y sueña que está orinando. Es desagradable—. Aunque vi a Papá..., Un poco más eufórico de lo usual.

—Ah, si... Es que conseguimos algo en París por pura casualidad.

— ¿Qué cosa?

Beta | Vhope || BOOK 2#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora