La agitación de mi respiración casi que me hacía ahogarme,la sudoración de mi frente y espalda mojó toda mi remera, y de repente,el llanto ensordecedor que salía de mi boca se abrió paso y rompió el silencio de la noche.
-¿Qué paso?- Sira se despertó de mi lado.-Tranquila.- Me abrazó mientras reposaba mi cabeza en su hombro que poco después lo humedecía con mis lágrimas.
-Eh,yo..estaba- no podía hablar.
-Tranquila,fue una pesadilla,sólo eso.- me miró a los ojos y corrió un mechón de pelo hacia atrás de mi oreja.
-Sira..- Pausé para seguir llorando y recuperar fuerzas.-Fue tan real.- Me desmoroné otra vez.
-Lo sé ¿quieres levantarte y hacemos café o algo?- me dio una sonrisa tranquilizadora.
-¿Qué hora es?- evité su pregunta anterior y al mirar el reloj eran las 3:33 AM.-Nos encontrábamos comiendo tostadas con mermelada y café,que él mismo hizo.
-¿Quieres contarme qué soñaste?- tragó un sorbo de café y su nuez de Adán se movió de arriba hacia abajo.
-¿Es necesario?- pregunté.
-No lo es,pero si quieres contarlo,mejor.-
-Soñé que estábamos yendo a la ciudad,iríamos a cenar..cuando íbamos por la carretera..-Me costó continuar.-
-Continúa.- Mordió su tostada.
-Chocábamos contra algo o algo nos chocaba,no entendí muy bien..-Me interrumpió.
-¿No recuerdas contra qué?- Su mirada se ensombreció.
-No lo sé, parecía un animal,algo robusto,en el sueño creíamos que era una vaca o algo así.-
Tragó tan en seco que se ahogó con un pedazo de tostada.
-¿Qué paso?- le pregunté preocupada.
-Nada,el pan.- dijo con voz ronca luego de toser.-Continúa.- Se levantó de su silla para ponerse a lavar su taza.
-El auto comenzaba a dar vueltas y salía despedida del auto,había mucha sangre.- Noté como se quedó quieto,como si tuviera una gran tensión por dentro. Dudé si continuar.- Luego,tú venías hasta mí y me pedías que no me durmiera..-No contestó. - Pero entonces..-me interrumpió.-Ya basta.- Su tono frío y seco me estremeció. Ni siquiera me estaba mirando.
-Lo sien..-me sobresalté al oír el ruido de la taza estrellándose contra el suelo.- ¿Qué te pasa?- le pregunté de mala manera.
-No quiero que hablemos más de éste sueño Medley.- Sin siquiera mirarme,se fue a la habitación.
-Tú me haz pedido que te lo cuente.- Me paré de mi silla y lo seguí. -Sira- Me ignoró.- Jamás,vuelvas a tirar algo así.-Mi voz sonó casi igual de fría que la de él anteriormente.-¿Piensas ignorarme? ¿Así de fácil haces las cosas?-sólo veía su espalda recostada,seguramente hasta ya se haya dormido.
Me negaba a dormir con él,no después de ésto,estaba tan enojada que ni siquiera podía conciliar el sueño.
Estuve como una hora sentada en el sofá mirando cosas en la tv sin sentido.
Sin más,decidí salir a caminar al bosque y poder aclarar mi mente. Y ni siquiera me molesté en tomar un abrigo,sólo el hecho de tener que ir a la habitación donde Sira dormía me provocaba molestia.
Las botas se enterraban en la nieve cada paso que daba,dejando una huella perfecta.
Estaba tan ensimismada en mis pensamientos que ni siquiera noté el frío,pero sí pude notar a Horus,que casi sabiendo mi estado emocional se dispuso a mi lado y caminó conmigo.
-Hola amigo.- Toqué su enorme cabeza con mi mano derecha. Por lo cuál él solo me dedico una mirada compasiva. -Veo que tú tampoco estás muy bien.- le dije al notar una pequeña herida en su oreja izquierda.
Caminamos los dos juntos hasta una altura considerable,y se veía un panorama realmente hermoso,desde allí arriba nada importaba,sólo estábamos Horus y yo,el uno para el otro.
Me senté en una roca enorme que no tenía nieve, y casi al mismo tiempo,Horus me siguió el accionar,viéndolo así,ambos sentados,él era más alto que yo,y la luz de la luna daba de lleno en sus ojos azules casi hielo.
Él no tardó mucho en observar la enorme masa blanca y luminosa de allí arriba con gran admiración,como si estuviera viendo a su mismísimo Dios,y no lo juzgo,la luna para mí también era casi un Dios.
-¿Es hermosa no es cierto?- le pregunté mirándolo. Él solo me correspondió la mirada y se acostó hacia adelante,cruzando sus dos patas delanteras una encima de la otra,para luego apoyar su cabeza en ellas,sin dejar de observar la luna.-Sí.- Dije casi entendiéndolo.- Para mí también lo es.- sonreí.
Al cabo de otro rato,el sueño comenzaba a adueñarse de mí,así como también de Horus,que sin esperar mucho tiempo ya tenía su cabeza puesta encima de mis piernas cómodamente acostado..y dormido.
No sentía frío,seguramente debido a mi amigo peludo que irradiaba calor como si de una estufa se tratara. Sentía mucha paz,aquí,ahora.
Sin pensar en el donde estaba ni en absolutamente nada me entregué a los brazos de Morféo.
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𝕯 𝖊 𝖒 𝖔 𝖓' 𝖘
Fantasy-Recuérdame-fue el susurro fugaz que escuchó antes de sumirse en una neblina de acontecimientos pasados. Algo nunca antes visto en la historia de la humanidad y no tan humanidad. ¿Acaso el amor podía desafiar todo? ¿Acaso el amor trasciende vidas y...