Capítulo 18: Guerra de corazones.

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Feliz navidad mis lectores, espero que se la pasarán bien, aún les debo su regalo, pero mientras lo organizo aquí tienen el penúltimo capítulo de la primera parte, espero no ganarme su odio eterno, por cierto y disclaimer.

Este capítulo contiene ALTO VOLTAJE, si no te gusta este tipo de contenido salta las primeras 10 páginas, aunque sé que les gustará sin más dilación disfrútenlo, hay Yaoi lemon suculento.

7u7

Oliver.

No sabría decir que me dolió más, la mirada de desaprobación de Rubí, las lágrimas de Ben o las de mi madre.

Ella no quería esto, pero era lo que se necesitaba hacer, tendríamos el apoyo de la familia de Ana hasta que el mismo dinero fuera mío y de ella.

Ben salió de mi casa seguido por Rubí mientras gritaba su nombre, no esperaba que me felicitaran, pero necesitaba su apoyo, sé que suena egoísta pero no tenía otra salida.

Mi madre se había echado a llorar en uno de los sillones, el único que se había quedado a mi lado era Jaime.

Él se aproximó a mí y me dio un abrazo, deje a mi madre ahí y nos fuimos a mi habitación.

-Gracias por quedarte, ¿Te puedo pedir un favor?

-Sabes que si primo.

-¿Puedes insonorizar la habitación?

Jaime chasqueo los dedos y un campo mágico de color rosa nos cubrió haciendo lo que le pedí a Jaime.

-Gracias.

Comencé a gritar en ese momento, lanzaba puñetazos al suelo, estaba furioso, Jaime se quedó conmigo todo el tiempo, mi amigo permanecia en silencio solo observandome, cuando mis puños estuvieron completamente sangrando Jaime se acercó a mí.

Jaime me tomo por detrás evitando que me siguiera haciendo daño, seguía gritando y las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.

-Tranquilo amigo, todo estará bien.

-No, ¿Es que no lo ves? Nada está bien.

Jaime paso una mano por mis nudillos y las heridas de se cerraron gracias a su magia.

-Todo estará bien, yo me encargo.

Jaime desapareció en ese momento, me quedé solo en mí habitación, ya no tenía a nadie, Swift había salido volando en cuanto llegamos, Rubí y Ben se fueron en cuanto le propuse matrimonio a Ana.

La boda se celebraría el sábado por la tarde, lo que sería en menos de 24 horas, no estaba listo, no estaba listo para dejar ir los sentimientos que tenía por Ben, no estaba listo para casarme.

Después de unas horas solo en mi habitación mi mamá vino a buscarme, me encontraba acostado en mi cama abrazando las dos almohadas que tenía.

Una la tenía abrazada con las piernas y la otra era mordida en la funda por mí, cada que estaba nervioso hacía eso.

-No se te a quitado esa maña cierto.

-No, pero supongo que pronto no podré morder las fundas de mis almohadas, Ana detestaba que lo hiciera.

-No te preocupes que no habrá boda, pediremos ayuda a los gobiernos y si no cerraremos el instituto, pero sobre mi cadáver te casas con Ana.

-Ese no es el punto necesito proteger los artículos además, no me voy a casar contigo, me estoy cansando con Ana, una vez la ame solo tengo que resistir tanto como vivan sus padres.

Oliver Blair y El Misterio de las Seis Bestias (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora