Por esta noche [SIN]

Alcohol

Su corazón latía a mil por segundo, estaba nervioso y le costaba hilar sus pensamientos. Pronto serían las ocho de la noche y Moon había quedado de recogerlo en dos horas.

El día se le había ido bastante rápido, no sabía cómo decirle a Yoongi que también iría a la fiesta así que prefirió ignorarlo e incluso pensó en decirle que la salida con Moonbyul resultó siendo en la casa de Jackson si llegaba a encontrarlo o podría intentar no encontrarse con él y simplemente disfrutar del rato. No es que se sintiera incómodo, él mismo le había dicho al menor que podía olvidar su confesión pero no se tenía fe con unas copas de más en su sistema. 

Yoongi aún no llegaba a casa así que pensó que Tea y Kook lo recogerían en el estudio, ese día tampoco habían hablado por mensajes ni siquiera se habían visto desde la noche anterior cuando Jin de manera decidida durmió en el sofá ignorando la mirada de cachorro abandonado que le dedicó el platinado. Aunque se había dicho que podía esperarlo también decidió que debía poner un límite, ayudaría a su amigo pero no podía seguir lastimándose.

Para aligerar sus nervios puso una película y trató de dormir un poco antes de que llegaran por él, se quedó unos minutos solo escuchando las voces de los actores y respirando de manera tranquila cuando estaba a punto de quedarse dormido el ruido de la puerta lo asustó. Era Yoongi entrando con un gran abrigo y algunos papeles debajo de sus brazos, estaba hablando con alguien por celular mientras arrugaba su nariz y soltaba pequeños suspiros de decepción, cuando colgó, la mirada del más bajo se centro en Jin que aunque estaba acostado en el sofá tenía una ropa bastante llamativa.

Siendo uno de los mejores estudiantes de Diseño de Vestuario y el mejor trabajador de la Boutique sabía que prendas resaltaban mejor sus atributos y aunque siempre estaba bien vestido, le gustaba esforzarse los días donde salía con sus amigos después de todo amaba atraer una que otra mirada de admiración.
Esa noche usaba una camisa manga larga de seda blanca que destacaba sus anchos hombros y unos cinturones de cuero negro acentuaban su estrecha cintura su outfit se complementaba con unos pantalones negros ajustados y un arete de cruz en su oreja izquierda.

Yoongi nunca se había fijado en su amigo, en parte porque sus ojos solo se mantenían en Jimin, sabía que era guapo pero verlo vestido de esa manera realmente lo atrajo.

- ¿Vas a algún lado, Seokjin hyung? - el menor descargó los papales en el comedor y fue quitándose el abrigo mientras se dirigía al cuarto para cambiarse.

- Saldré con Moon - Jin respondió con calma, los segundos que tuvo de sueño lo habían dejado sumido en un letargo. Yoongi se sintió decepcionado, aunque el mayor ya había dicho que no iría a la fiesta quería intentar convencerlo, no quería estar solo en ese desconocido ambiente y sabía que a Jin tampoco le gustaban esos planes así que seguro se entretendrían un rato y hasta se irían temprano - ¿A qué horas irán a la fiesta?

- El dúo problemático dijo que pasaría por mí a las 11, ellos aseguran que las fiestas son mejores entre más tarde llegues - Jin sintió un alivio, al menos no se irían al mismo tiempo y así no tendría que dar explicaciones de por qué tomaron el mismo camino y llegaron al mismo lugar - Voy a dormir unas horas, espero te vaya bien en tu cita, Jinnie.

Yoongi se sintió extraño cuando pronunció la palabra cita, sí bien sabía que le gustaba a Jin en los seis años que lo conocía nunca lo había escuchado hablar de otros amigos que no fueran Tae, Nam, Kook, Hobi, Jimin y él. No era como si esperase que Jin se quedara amándolo toda la vida pero tampoco le gustaba la idea de que a solo dos días de haberse confesado ya estuviera saliendo con una mujer.

Sin entender por qué le disgustaba la idea de que Seokjin compartiera su noche con otra persona se dirigió al cuarto del mayor y trató de dormirse rápidamente para no escuchar cuando su compañero saliera de la casa.

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La casa de Jackson era sin duda la más grande que había visto en su vida, el lugar estaba repleto de personas que se distribuían entre bailar, conversar en el sofá y competir por quién podía tomar más. Sin duda no era la fiesta tranquila que sus amigos le habían prometido, apenas entraba y Yoongi ya se quería devolver a la comodidad de la cama de Seokjin.

Se notaba que Taehyung y Jungkook conocían a todos en la fiesta, en el momento que pasaron por la puerta un hombre con una radiante sonrisa y una arrolladora personalidad los recibió con varios tragos, por lo que entendió ese era Jackson el dueño de la casa. A Yoongi le pareció que el chico era bastante animado casi escandaloso para su gusto pero era amable así que no le molestó recibir todos los tragos que le llevaba.

El peliplata decidió sentarse en uno de los sofás libres mientras veía a sus amigos jugar beer pong con otros compañeros de la universidad.

- ¿A quién hay que agradecer por este milagro, señor aburrido? - Un moreno de lindos hoyuelos se sentó a su lado ofreciéndole otro vaso de licor

- Agradecele a los pucheros de Tae y Kook - Yoongi tomo un sorbo de la bebida y sintió el ardor recorrer su garganta, ya era su quinto vaso y todavía no se sentía afectado o eso creía.

- Pudiste decirme que vendrías

- Lo mismo digo, Nam

Los dos se rieron y se dedicaron a observar a sus amigos mientras bromeaban de lo ridículos que se veían jugando. Yoongi desvío su mirada a la pista de baile y sintió reconocer a uno de los hombres que estaba bailando rodeado de cuatro chicas, sin dudas era Jin él creyó que a lo mejor estaba alucinando pero luego de observarlo más tiempo estuvo seguro que era él.

El pálido sintió ira recorrer por su cuerpo, Seokjin le había dicho que estaba ocupado esa noche y ahí estaba en la misma fiesta que él con cuatro mujeres tomándole fotos, ofreciéndole trago y bailando sensualmente a su alrededor. Se terminó su sexto vaso de licor y se acercó a la pista de baile, empezó a mover su cuerpo sutilmente mientras se acercaba al mayor y dejaba que su cuerpo sintiera la música y la cantidad de alcohol que ya le había afectado.

Cuando llegó donde Jin una mujer de pelo morado detectó su presencia y le susurró algo en el oído de Jin para luego hacerle una seña a sus tres amigas. Jin quedó solo con la presencia de Yoongi quien lo tomó de la cintura y comenzó a bailar al ritmo de la música mientras miraba sus labios, el mayor no sabía qué hacer se sentía incómodo pero los diez tragos que ya tenía encima no lo dejaban pensar coherentemente y le encantaba el agarre fuerte del peliplata.

El mayor apoyó sus brazos en el cuello de Yoongi y acercó su boca a la oreja para susurrarle.

- ¿Por qué haces esto, Yoongi?

Yoongi decidió ignorarlo, tampoco entendía, tampoco sabía por qué hacía eso, en su corazón solo sentía la necesidad de atraparlo como suyo y no permitir que esas chicas de antes se le volvieran a acercar. Al sentirse ignorado Jin no supo si debía alejarse o disfrutar de ese momento tan único donde tenía a Min Yoongi solo para él y completamente embobado en sus labios; dejándose llevar por sus deseos y lo desinhibido que lo hacía sentir el alcohol acortó más la distancia.

Seokjin movía su cuerpo de manera sensual restregando su pelvis en el menor haciendo que este se sintiera excitado y tentado de volver a besar a su hyung. Ya sabía que lo había rechazado, ya tenía claro que su corazón latía por Jimin pero no podía evitar fantasear con los labios de Seokjin, todavía sentía las mariposas de cuando lo besó por primera vez y ahora que estaba atrapado entre su cuerpo y el alcohol le había quitado el pensamiento racional, quería explorar hasta donde podía llegar con su mayor.

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Maratón 1/3

Empieza el especial de final de año