XXIV. Un nuevo amanecer

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Cuando el sol aparece en el horizonte, anunciando un nuevo amanecer,

Nunca te imaginas lo que puede suceder ni siquiera minutos después.

No hay destino escrito, uno toma sus propias decisiones durante su vida,

y éstas, son los que guían tu camino hacia adelante



Junio 2016

El salón de acuerdos de Luisiana estaba inundado de líderes. Casi todos estaban presentes y, según Michael que tenía buena memoria, no había muchos cambios desde la última vez que se habían reunido justamente antes de la guerra.

Marco debía acostumbrarse ahora a este tipo de reuniones, aunque no fueran tan comunes, ya que él debía mantenerse como líder de su clan hasta que Alex cumpliera los veintiuno que podía pasarle el liderazgo, al menos eso era lo que había leído en los documentos de Abby.

El anuncio en el clan fue sencillo, todos sabían que él seguiría y los que ya lo conocían sabían que podía hacer un gran trabajo como líder. También tenía que entrenar a su heredero, Abby con el tema de la guerra lo había entrenado poco luego de la muerte de Jacob.

Para Marco, el pensar en Abby y Jacob era doloroso. Sabía que en algún momento debía pasar este luto pero le era demasiado difícil. Era dejar de lado lo que más amó en el mundo, y era bastante difícil hacerlo con una casa en silencio, sin el dulce sonido de Abby mordiendo la punta de su lápiz o tecleando en su laptop.

La reina llegando al estrado llamó su atención. Marco notó que tenía una mano próstetica dónde había usado el fuego celestial para matar a Caillic. Marco se preguntó si seguía siendo tan poderosa, pero su presencia en el salón fue tan grande que de repente todos callaron atendiendo a la mujer.

—Han pasado dos meses desde la guerra —comenzó la Reina. Su mirada dorada se fijó en todos los presentes—. Hubieron vidas que se perdieron —Marco sintió como su la reina le hablara a él—, pero pelearon por su honor y aunque las pérdidas fueron pocas, siguen siendo pérdidas. Tristemente, criaturas de Caillic lograron escapar luego de la muerte de su líder, así que aún hay monstruos sueltos en el mundo como hechiceros renegados.

Ella hizo un ademán con su mano sana y un libro apareció frente a ella.

—Durante estos dos meses, anduve analizando varias cosas importantes en nuestra comunidad. Sé que los envié enseguida al mundo humano luego de un duro golpe, pero era necesario para tratar de normalizar las cosas. Entonces, he creado un tipo de nuevas leyes y derechos que ustedes han de cumplir y poseer.

Abrió el libro.

—He creado un consejo con diez de mis hechiceros más confiables, además, ustedes van a tener voz y voto en varias decisiones. Dado a eso, cada terreno que tiene un grupo de cinco especies, han de escoger a uno de sus líderes como su vocero. Dicho vocero, reuniría las propuestas y sugerencias de cada grupo de especies y puede solicitar una reunión conmigo para discutirlas. Yo, como la reina tendré la última palabra para decidir, pero el consejo de hechiceros puede ayudar.

» Obviamente, cada cambio de vocero (ya sea por cambio de territorio o de liderazgo en su propio clan o manada) debe serme comunicado.

Una mano se levantó logrando que la Reina mirara a la interruptora. Dado a su mechón verde en su cabello oscuro, pero su color de piel y facciones diferentes al resto de las sirenas, Marco halló enseguida que podría ser la tía de Opal, la líder de las sirenas del lago Nasser.

Dama de la noche [Los traidores #2] «TERMINADA»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora