A 6 minutos del final del partido, el Santa María jugaba con 10 hombres aunque mantenía la ventaja sobre el San Martín.
El San Martín seguía manteniéndose positivo a pesar de que quedaba poco tiempo.
Joe tenía la pelota en sus pies y hacía todo lo posible por agotar el tiempo pero en un descuido, Ben le robó el balón y mandó un excelente pase a Fran quien no dudó en ir a toda velocidad a portería rival.
Fran hacía ver mal a la defensa del Santa María haciéndoles túneles y sombreritos, habilidades que aprendió gracias a su novia, Timantti.
Llegaba el momento decisivo, era el último enfrentamiento con el portero, Fran entró al área e intentó elevar el balón para hacer un sombrerito más pero el arquero se lanzó desesperadamente sobre el capitán del San Martín.
Lamentablemente, para el Santa María significaba la expulsión directa de su portero y el equipo no contaba con un suplente, en ese momento, Joe se ofreció para ocupar la portería e intentar tapar el penal.
El lanzador estaba listo, era nadamás y nada menos que Fran.
Fran se colocó frente a la portería y con poca distancia se prepar9 para ejecutar el penal que le daría el empate al San Martín que parecía ser decisivo.
El árbitro hizo sonar su silbato y con un potente disparo de pierna derecha, Fran regresaba a su equipo a la batalla faltando sólo 5 minutos para acabar el partido.
Se reanudaron las acciones y el Santa María se fue con todo al ataque quedando pocos minutos para el final.
Joe daba las últimas indicaciones mientras pasaba el balón de lado a lado intentando armar alguna jugada que los regresara la ventaja pero sus compañeros se sentían muy presionados y no podían mantener la posesión de la pelota.
Tal acción hizo que el San Martín aprovechara los errores del rival para armar su última jugada que les diera el triunfo y conseguir remontar.
Fran, Freddy y Ben se fueron juntos al ataque por última vez haciendo pases de primera intención como la vez anterior intentando repetir que la misma jugada les diera resultado pero no fue así, Joe leyó la jugada y ésta no pudo ser terminada con éxito.
El árbitro miraba su reloj y Joe corría desesperadamente tratando de sorprender al arquero del San Martín tirando desde fuera del área pero fue inútil.
El silbante dió por terminado el partido dejándolo en un empate a 2 tantos por equipo.
Ambos equipos cayeron rendidos al campo pero emocionados por haber dado todo en el encuentro.
En ese momento, Fran miró al cielo y dijo...
- Gracias, Timantti, a pesar de que no gané, tú nunca me dejaste sólo...
ESTÁS LEYENDO
El Sueño de Timantti
AdventureHola a todos, soy Ricardo y en esta ocasión les traigo una nueva historia muy diferente, mi nueva trama involucra el sentimiento más bonito que pueda existir como lo es el amor y el amor al fútbol, espero que les guste.