Games [kylo ren y tu]

7 Su Ayuda

A las once nos iremos... La verdad es que ya tengo sueño. Fuimos a cenar rápidamente, donde compartimos mesa con los de alto rango, el general Huxtúpido y el general comosellame.

- ¿Por qué nunca la habíamos visto por aquí ? - preguntó comosellame.

- La conocí en una misión reciente, en una base lejana a este sistema. Y solo está de visita. - contestó Kylo abrazándome de la cintura.

- Tiene un perecido innegable a el experimento... E-B2-18 - sugirió Hux, poniendo furioso a Kylo.

- ¿Aquella rata con alas? A los diez años le dio un ataque al corazón. Murió - contesté fríamente.

- No me extraña, no era diferente al resto. - dijo Hux satisfecho con mi respuesta, yo asentí.

- Decidnos, ¿ya os habéis acostado? - preguntó comosellame metomentodo.

- No te incumb-

-No - interrumpí a Kylo - yo prefería esperar...

- Esta bien.. - respondió Hux, Kylo me acercó más a él.

- Ya terminé, amor. - dije mirándole a los ojos.

- Espérame, acabo ahora. - respondió Kylo algo apresurado.

De hecho, acabó casi al instante. Nos levantamos y fuimos a la habitación.

- Decir todas esas cosas me cansa hasta a mí. - suspiré quitándome el uniforme.

- Hacía mucho que nadie me hablaba con tanto cariño. Lo siento si no he dado el pego.. - se cruzó de brazos sentándose sobre la cama.

- ¿De qué hablas? Nadie me había dado nunca tanto cariño. - me puse mi ropa normal y fui volando a su lado.

- ¿Enserio? -preguntó sin creérselo, su mano rozó con la mía.

- Si. Debemos fingir que dormimos hasta la hora... ¿Me pongo en el suelo? - sugerí levantándome de la cama.

-No. Duerme conmigo. - ordenó agarrando mi muñeca.

- Eh... Vale... - titubeé algo asustada.

Me tumbe, sentí como se tumbaba el también y me arropaba. Hacía un frío increíble pero Ben no parecía notarlo.

- Hace frío... Como puedes vivir así? - susurre intentando no cerrar los ojos.

- Eres hipersensible, ¿recuerdas? - carcajeo abrazándome.

Pasamos un buen rato así, hasta que volvi a mirar un reloj.

- Ya son casi las once... - me di la vuelta y apoyé las manos en su pecho.

-¿Seguro que quieres irte? - me miró fijamente y acercó su cara a mi lentamente.

- Seguro... - contesté firmemente, él se apartó fríamente y se puso su casco.

- Pues vamos. - me ofreció la mano, yo la acepté y fuimos al angar muy rápido.

Cerré la puerta y me acomodé detrás de él, que arrancó con soltura y nos sacó rápidamente del alcance del destructor.

- Ben... - susurre.

- No soy Ben. Ben está-

- Déjate de ridiculeces... Le he visto. En tus ojos... - le interrumpí quitándole el casco.

- ¡Cállate! ¡No sabes lo que dices! Ben ya no existe... Ben era débil e inútil... - escupió aterrizando en un planeta en donde sabía que había una base.