Games [kylo ren y tu]

31 Ben Solo

-Narra White-

Cuando llegué a la base todos me recibieron con un abrazo, también les dieron la bienvenida a las tres desertoras que trajimos con nosotros, pero había algo... Algo que no estaba bien.

Hemos dejado ahí a Ben, y aunque era lo de esperar me siento mal...

Le enseñé a las tres sus nuevas habitaciones para distraerme un poco, parecían maravilladas, sobre todo Meena. Lizzy seguramente también lo estaba, pero su cara no lo expresa.

- Gracias por todo, White... - me agradeció Christine algo ida.

- ¿Pasa algo? - pregunté algo preocupada.

- Mis padres... Si se enterasen me matarían - se abrazó a si misma y luego miró a Lizzy.

- Sus padres básicamente la vendieron a la primera orden diciéndole que se ganase su herencia - suspiró la chica de pelo plateado, desviando la mirada.

- Bueno, ya todo pasó, ahora sois libres y ayudaremos a otros a serlo también... - sonreí algo forzosamente poniendo la mano en su hombro.

- Sé lo que estas pensando, White... - empezó a decir Liz - No te preocupes por el, tarde o temprano le conseguiremos devolver a la luz -

Tiene razón, estaba pensando en él. ¿Como puedo hablar de liberar a la gente cuando sé que Ben Solo está atrapado dentro de su propia oscuridad? Me estoy torturando demasiado.

- Hey señoritas, ¿les gustaría manejar unos x-wing por primera vez?- se acercó Poe con una mano en la cadera. Se me escapó una risita.

- ¡Vale! - exclamó Meena emocionada, las otras dos la siguieron.

- Pero no os valláis muy lejos, Poe ya sabe por qué - le fulminé con la mirada y entré a mi habitación.

Suspiré pesadamente y me quité el uniforme que me dió Kylo, para ponerme una camiseta que me iba grande y mis pantalones cortos negros. Ahora que lo pienso, a veces no se ni de donde mierdas saco tantas camisetas de hombre. Esta por ejemplo es gris, con las mangas negras y si te fijas en el borde de cada manga hay una K bordada.

Me tumbé de un salto en mi cama y empecé a pensar en mis cosas hasta que sentí un escalofrío atravesando mi columna vertebral, y cuando miré a los lados vi su espalda frente a mi cama.

- ¿Ben...? - susurré temiendo que fuera una alucinación.

- ¿W-white...? ¿Has...vuelto?- preguntó volteándose a mirarme.

- Eh...No - bajé la mirada algo avergonzada.

- Mierda, ya me he vuelto loco... - murmuró llevándose las manos a la cabeza - White, algo está pasando... -

- ¿Lo dices porque piensas que no soy real? Perdona pero me ofendes - me puse muy roja de la verguenza de inmediato al ver su ceño fruncido - Perdon, se me escapó. -

- Vale, puede que si seas de verdad, pero no lo digo por... Esto. Esto ya me pasó antes con Rey, idioteces de Snoke. - se acercó a mi hostilmente.

- Siento haberme ido así, Ben...- confesé con las mejillas aún ardientes.

- Es curioso...- se arrodilló y acto seguido tomó mi mentón con su mano y para acercar mi cara más a la suya - cuando tu dices mi nombre, no siento la necesidad de rectificarte... Ya sabes a lo que me refiero, total ya sabías quien soy en realidad...-

- Me da igual quien seas en realidad, sé que puedes cambiar - puse mis manos sobre sus mejillas observando como él empezaba a molestarse. Creo que no debí decir eso.

- No voy a cambiar, White... No...puedo... - bajó la mirada mientras negaba con la cabeza.

- Como digas que es demasiado tarde para ti me voy a poner muy nerviosa - escuché como se reía y volvía a mirarme.

- White...He ido demasiado lejos...¿ Como no va a ser demasiado tarde para m-

- Yo creo que aún puedes cambiar. Y seguramente termine como tu padre por pensar así, pero me da igual - le interrumpí de forma seria.

- Eres muy cabezota... - dijo esbozando una pequeña sonrisa, a lo que yo me calmé y sonreí también - y muy mona también.-

- Ya vale, no? No soy tan pequeña - me puse muy roja de nuevo y fruncí el ceño.

- No es por eso, bueno da igual... - se levantó y me ofreció la mano.

Suspiré y la acepté, él me acercó a su cuerpo terminando en una especie de abrazo.

- Me gusta tu camiseta, es mía. - susurró acariciando mi ala izquierda.

- Ya decía yo que Poe no mantiene las cosas así de limpias. - bromeé apoyando la cabeza en su pecho, estoy muy cómoda ahora mismo.

- No lo pongo en duda. Pero, ¿Por que la tienes tú? - preguntó bajando su mirada a mis ojos.

- No lo se... Pero no te la voy a devolver - le miré divertida y saqué la lenga mientras me apartaba de él.

- Que tienes, ¿Siete años? -se cruzó de brazos.

- No creo la verdad, yo me veo mayorcita - le imite.

- Yo te veo enana - se burló, quería decirle algo pero desapareció.

Me empecé a reír al pensar en la mierda de conversación que habíamos tenido, pero al tocar mi mejilla me di cuenta de que en ningún momento me había bajado la temperatura. ¿Tengo fiebre o qué me pasa?

Negué con la cabeza y fui a ducharme, necesito relajarme un poco. Me quité le ropa y entré a la ducha volando, literalmente.
.
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- Que no se te olvide, ahora eres mia.. - susurró en tono ronco.......
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Sin darme cuenta tenía una mano en el cuello, ¿Qué fue eso? No tenía nada allí, es decir...¿Me lo imaginé yo sola? ¡No! No, White no pienses en esas cosas mejor lee la biblia.

Esto es culpa de Ben, estar tantos días con él me ha pegado sus pensamientos oscuros. Oscuros a mi manera...

Me sequé y obviamente me vestí, para luego abrir mi cajón y coger la espada láser. En ella había pegado un trozo de papel... ¿Pero qué...?

La memoria de to
sido borrado, deb
parar esta total loc
sonar que compart
obablemente ella/el t

Sue

Guárdame y
encuentra mi otra
mitad

Vale, no se entiende lo que dice pero voy a pensar que... Lo que pasa es que no es tan sencillo, alguien quiso dejarme un mensaje discreto y encriptado por alguna razón, pero, ¿Por qué?

Además parece mi letra, ¿Yo escribí esto...?

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Capítulo que no tiene mucho sentido, pero igualmente espero que os guste,

Chau! ( ꈍᴗꈍ)