6

33.9K 2K 257
                                    

Al día siguiente, Nat se empeña en acompañarme a la facultad de Iván. La  conozco demasiado, y sé que se trae algo entre manos.

Como imaginaba, Iván está con Alice. Ambos parecen muy cómodos hablando, y admito que me molesta un poco cuando él ríe a carcajadas.

Nat aprieta mi mano y me arrastra hacia ellos.

—¡Alice! —exclama —Qué ganas tenía de verte.

Esta sonríe, dándole un fuerte abrazo.

—¡Amiga! —se separa de ella, observándola de arriba a abajo —Estás hermosa.

—No más que tú —la halaga Nat —Mírate, mujer, pareces otra.

Alice se ruboriza, poniendo un mechón de cabello sobre su oreja. No sé si es por el cumplido de mi amiga o porque Iván la está mirando.

Aprieto mi mandíbula, a punto de largarme, pero entonces él se acerca con una dulce sonrisa.

—Bonita —me recibe con un beso de lo más apasionado, consiguiendo que me olvide de todo. Él es el único que tiene ese efecto en mí —Te estaba esperando.

—¿Para algo en especial? —murmuro rodeando su cuello con mis brazos.

—Quiero pasar toda la tarde contigo —dice, sorprendiéndome.

—¿De verdad?

—Claro, pequeña —contesta agarrándome de la cintura —¿Te apetece ir al cine y después a cenar a algún restaurant?

—Por mí perfecto —le doy un rápido beso en los labios, y él sonríe.

—Te recojo a las 6, ¿de acuerdo? —asiento repetidas veces.

Estoy tan ilusionada.

🌙🌙🌙

—Mi intuición no me falla, querida. Estaba en lo correcto —comenta Nat a través de la línea, y fruzo el ceño.

—¿A qué te refieres?

—Le hablé sobre mi estupenda relación con tu hermano y, sobre todo, de la tuya con Iván —explica —Solo tenía que fijarme en su rostro para percatarme de que Iván le gusta, y mucho. A mí no me engaña.

Frunzo los labios.

—¿Estás segura?

—Por supuesto —responde totalmente convencida —Pero tranquila, entre las dos nos encargaremos de alejarla de él.

No soy tonta, sé que Iván es un chico bastante atractivo, y no la culpo de haberse fijado en él, pero, si verdaderamente es mi amiga, deberá respetar nuestra relación.

—Jamás pensé que le pudiese llegar a gustar Iván —murmuro —Cuando estábamos en el instituto se mostraba indiferente, o al menos lo ocultaba muy bien.

—Más bien la segunda, cariño.

Seguimos charlando hasta que me despido para irme con Iván. Si de algo estoy segura, es que Alice no va a arruinar mi tarde junto a él.

🌙🌙🌙

Iván me obligó a ver una película de terror, y he de admitir que, a pesar de clavarle las uñas en algún momento, me gustó mucho. Por otro lado, el restaurant era sencillo pero muy hogareño, tal como me gustan, con una comida exquisita. Los camareros eran muy simpáticos, e Iván conocía a uno de ellos. Me contó que fue un buen buen amigo de su padre cuando eran jóvenes. Ambos prometimos que volveríamos.

Y ahora nos encontramos en su coche, a punto de despedirnos. Bien dicen por ahí que lo bueno dura poco.

—No me quiero ir —hago un puchero, cual niña pequeña.

—Quédate un ratito más conmigo —propone, esbozando una sonrisa traviesa.

—A ver, convénceme —pronuncio mordiendo mi labio inferior.

Él maldice, y río. Adoro provocarlo.

—Lo haré, pequeña malvada.

Besa mis labios sin ninguna prisa, y después baja a mi cuello. Ahí es donde pierdo por completo el control. Para torturarme aún más, levanta mi falda y toca mi intimidad.

—Mmm, me encanta cuando estás así —susurra en mi oído con voz ronca —Tan puesta para mí.

—Iván... —gimo cuando introduce sus dedos. Deseo tanto sentirlo dentro de mí—Fóllame ya.

—¿Estás segura de hacerlo aquí, bonita? —inquiere mirándome fijamente.

Asiento, pues soy incapaz de emitir palabra alguna.

—Vayamos al asiento de atrás, entonces.

Tú, mi debilidad © #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora