El sonido del antro envolvía mis oídos, la noche apenas empezaba y yo quería bailar hasta que amaneciera, acaba de cerrar un contrato para la compañía de mi papá, desde que me gradué de la universidad e trabajado duramente al lado de mi padre. Llevaba más de dos semanas encerrada en mi oficina analizando y creando la estrategia para cerrar el contrato, y ahora que ya había terminado, podría irme de viaje alrededor del mundo, antes de volver a encerrarme en la oficina como Directora general de "Hoteles y Restaurantes Mcallister" la empresa de mi padre el famoso Joseph Mcallister, también tiene una empresa llamada "Mcallister Sport" famosas por dedicarse a la fabricación de artículos deportivos.
—¿que vas a pedir?— Louis sujetaba su cerveza mientras me miraba. Conozco a Louis desde la secundaria, somos los mejores amigos, él no tiene el mismo nivel economico que yo y eso estuvo a punto de poner en riesgo nuestra amistad, mis padres son muy conservadores y estirados y eso a veces me a traído muchos problemas pero he sabido manejarlos, Louis es el gerente de una de las tiendas de mi padre, tuvo una mala racha hace dos años y le dije que yo le daría trabajo, de primero se negó, pero después aceptó no teniendo más opciones.
—una cerveza— dije mirando la que sostenía Louis. —pero pide otra marca, esta sabe a mierda.
Mi amigo alzó una ceja y llamó a la mesera, Louis era muy atractivo, su cabellera negra alborotada, sus ojos azules y los tatuajes que cubrían gran parte de su piel, lo hacían lucir como el hombre más perfecto y todas las chicas caían rendidas a sus pies, lo cual el aprovecha al máximo.
—Nia ¿Que te he dicho mil veces?— me sonrió y me miró esperando mi respuesta, al ver que no le contestaba me hizo la pregunta que siempre me hacía —¿Que es peor que la mierda?
—una cerveza sin alcohol— le dije poniendo los ojos en blanco y regalándole una gran sonrisa. —trata de no intimidar a la chica con tus encantos— le dije tratando de no reírme.
—nos conviene, podemos tener bebidas gratis— me guiño un ojo y volteo hacia donde venia la chica sosteniendo una bandeja.
—¿que les traigo?— dijo la chica cuando llegó a nuestra mesa con una alegre sonrisa y sin quitarle los ojos de encima a Louis.
—dos cervezas hermosura— Louis le sonrió coquetamente a la chica —¿puedes traer de la mejor marca? A mi hermana no le gusta la cerveza corriente.
Louis siempre me decía hermana cuando veía a una chica linda, era su método para que supieran que no teníamos ninguna relación amorosa. La chica amplió su sonrisa al escuchar la palabra "hermana" tomos las botellas vacías y se retiró moviendo exageradamente sus caderas.
—¿Qué tienes pensado hacer Nia?— mi amigo me miró fijamente tratando de descubrir algo que según él yo escondía. —¿Ya me vas a decir?
—No lo sé, puede que me delates con mis padres— sonreí ante la mirada de asombro que apareció en el rostro de Louis. —no puedo confiar en ti.
—¿Estas hablando en serio?— la mirada de mi amigo pasó de asombro a tristeza, Louis es la persona en la que mas confío en este mundo, se que el daria la vida por mi y yo por él, desde que nos conocimos supimos que había algo especial entre los dos y no necesariamente como pareja si no como mejores amigos.
—puede ser— quería carcajear me en su cara, saque mi celular de mi bolso que estaba sobre la mesa y simulé jugar con él, pero lo que realmente estaba haciendo era tomarle fotografías sin que se diera cuenta.
—solo contéstame algo— le dije a Louis tomándolo por sorpresa
—¿Como puedo titular esta foto? le mostré mi celular y vio la imagen que yo había capturado, soltó un gran suspiro y me lanzó una mirada amenazadora.—ni se te ocurra publicar esa foto. me dijo mi amigo con voz grave y firme.
—le voy a escribir como título "mi amigo... el mayor crédulo que conozco"— comencé a carcajearme como una tonta, Louis me observaba entre molesto y aliviado, una hermosa sonrisa apareció en su rostro.
—tengo planeado un viaje alrededor del mundo y ¿Adivina quien va a ir conmigo?
Louis abrió tanto los ojos que parecían que se le saldrían de sus orificios, mi amigo jamás había salido de Minnesota, esta sería la primera vez y su rostro reflejaba la emoción que estaba sintiendo. Louis era de los hombres que pocas veces demostraba lo que sentía, solo yo conocía lo que decía las expresiones de su rostro.
—obvio yo— dijo fingiendo superioridad.
Tanto años de amistad me habían enseñado a interpretar a Louis, él jamás permitía que nadie lo viera frágil en ningún sentido, para la demás gente Louis era un chico de carácter muy maduro y fuerte, no se andaba con estupideces y siempre decía lo que pensaba, no le importaba si no le agradaba a las demás personas y yo admiraba eso de él porque siempre e intentado no darle importancia a lo que diga la gente, pero jamás lo he consigo y él vive su vida como quiere y no se deja manipular por nadie.
-—¡Claro! ¿Quien mas?
Mi amigo se levantó del banquillo donde estaba y se acercó a mí para abrazarme, cuando me rodeó con sus brazos y coloco su cabeza al lado de la mía le susurre al oído "vas a espantarme los galanes, ¿Podrías soltarme?"
—creo que quiero besarte— una enorme sonrisa estaba dibujada en su rostro.
—¡claro que no! Ni se te ocurra— le dije en tono molesto.
—de hecho, alguien no a dejado de observarte desde hace rato— me soltó y volvió a su lugar —creo que lo conozco— tomó un largo trago a su cerveza casi vacía
—estaba en la fiesta esa que te acompañe— se detuvo un momento tratando de recordar el lugar exacto.—¿Cual fiesta? Hemos ido a miles. sonreí.
—esa donde fue pura gente estirada como tu.
Puse mala cara y le di a mi amigo un golpe en el brazo, odiaba que me dijera estirada y el siempre que podía me lo decía. Louis se toco donde lo golpee y no pude evitar sonreír ante su mueca de dolor.
—ya se quien es— dijo de pronto —es Taylor Henderson, el hombre que nos presentó tu papá, creo que tiene negocios con el.
Voltee muy disimuladamente y efectivamente era él, es uno de los hombres más ricos del país, no podía negar que era muy guapo y atractivo, pero las veces que lo había tratado, pude ver que era un hombre muy antipático y aburrido. De hecho parece mayor de la edad que tiene, siempre vistiendo formal y muy serio, mi padre me dijo que tiene 36 años, es muy alto, cuerpo un poco atletico, cabellera rubia como el sol y unos intensos ojos azules. Me sorprendió mucho verlo en el antro, no pensé que fuera de los que visita estos lugares, me quede observando un poco su vestimenta y no tenía nada que ver como lo había visto en anteriores ocasiones, esta noche anda vestido más acorde a su edad y se veía muy bien. Regrese mi mirada a Louis.
—si es el— puse los ojos en blanco —deberíamos de irnos antes de que se acerque a nosotros.
—demasiado tarde, viene hacia acá.
Di un gran suspiro, iba a tomar mi bolsa para salir de ahí inmediatamente pero no logre hacerlo.
—buenas noches— dijo una voz atrás de mi —un honor tenerlos en mi antro, ¿Ya se iban?
—si…— me voltee hasta quedar frente a él —¿Así que usted es el dueño?— nuestros ojos se encontraron y sentí algo dentro de mi que no podía explicar.
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.Necesito saber si les gusta la historia, dejenme sus comentarios por favor, las quiero mil 😘😘
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Claudia Franco
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Un mal negocio
RomanceNia es una chica de negocios que quiere divertirse junto a su amigo Louis, sin esperarselo un hombre aparecerá en su vida con un negocio que cambiara todo en su entorno y las cosas no séran igual jamas, acompáñala a descubrir nuevas amistades, nueva...