Un mal negocio

Capitulo 45

La estación de trenes era el escenario de un acontecimiento muy preocupante y desastroso para mi. Taylor y el sujeto del arma se apuntaban mutuamente y Louis no dejaba de forcejear con Chris, Demian se había refugiado en un rincón, pude ver como colocaba sus manos sobre sus oídos y temblaba de miedo, aquella escena terminó de romper mi corazón. De pronto sentí unos brazos a mí alrededor, Chris había noqueado a Louis y ahora me tenía sujeta por detrás, creo que quería una escapatoria.

—suéltame Chris— lo llame por su nombre.

—jamás, tu me tendrás que sacar de aquí— me dijo al oído —¿Crees que estoy solo en todo esto?

—¿Por que haces esto?

—por dinero... y por ti, me prometieron que serias mía y asi va hacer.

Chris se quitó la capucha y Taylor se sorprendió al igual que yo al saber quien era. Me pegó más a su cuerpo y lamió mi mejilla, Taylor intentó avanzar pero Chris le advirtió que no lo hiciera. De pronto muchas luces se encendieron, me cegaron un poco la vista pero cuando ajuste mis ojos a la luz pude ver muchos policias acercarse poco a poco a nosotros con lámparas alumbrando la estación de trenes. El jefe de la policía Julio Torres apareció con un chaleco anti balas y se colocó enfrente de Chris y mio.

—dejala ir— dijo con voz firme
—tu amigo ya se entregó.

Voltee a ver al otro sujeto y si, él ya había entregado el arma. Estaba de rodillas en el piso con las manos sobre la cabeza, mientras un oficial le colocaba unas esposas.

—no les tengo miedo, ella se ira conmigo.

—no tienes escapatoria, estás rodeado ¿Que piensas hacer?

—no van a dispararme mientras ella esté a mi lado.

—no estés tan seguro de ello— el tono con el que había pronunciado aquellas palabras, hizo que mi piel se erizará.

—¿Sabes quien planeo todo esto?– me dijo Chris al oído, moví la cabeza en forma negativa —tu propio padre... dijo que si hacía todo bien, podía quedarme contigo y eso pienso hacer.

—estas mintiendo— dije con la voz quebrada por el llanto.

—piensa lo que quieras, el no es quien tu crees, tu padre oculta muchas cosas, para empezar ni siquiera es tu padre biológico.

Las palabras de Chris me cayeron como una cubeta de agua helada. ¿De qué demonios hablaba? ¿Mí padre no era mi padre biológico? Tenía la esperanza de que estuviera mintiendo para salir libre de todo este problema, mire a Taylor y pude ver en sus ojos odio y al mismo tiempo preocupación. ¿Como llegue a todo esto? Chris comenzó a dar unos pasos hacía atrás conmigo aun pegada a su cuerpo, nadie se movía, creo que estaban esperando que él cometiera un error para avanzar y terminar con todo esto.

—si quieres saber más de lo que a hecho tu padre te recomiendo que me acompañes, diles que se alejen y nos podremos marchar.

Era obvio que quería saber todo, pero no quería irme con él, si intentara algo yo tendría que luchar y poner en riesgo a mí bebé. Todo el lugar estaba rodeado y al parecer no había salida así que me arriesgue e intente algo, estaba segura de la policía reaccionaría rápido. Me detuve un poco y me voltee muy lentamente para quedar frente a él.

—esta bien, me iré contigo...— levante las manos y las coloque sobre su pecho —quiero que me cuentes todo— le dije con mi voz más tranquila —tenemos que salir de aquí.

—eso es nena— sonrió victorioso —tu y yo nos vamos a divertir— me tomo de la cintura y acercó su rostro al mío —dejemos aquí a estos perdedores.

Se acercó muy lentamente a mí y pegó sus labios a los míos, no veía a Taylor pero se que estaba muy molesto, la voz de el jefe Julio me lo confirmo cuando escuche "tranquilo, no hagas nada". Chris empezó a besarme y yo le segui el beso, quería que se confiara y cuando sentí su cuerpo relajarse levante mi pierna y con mi rodilla le di un golpe en los testículos. Chris cayó al piso con las manos sobre sus partes intimas, me aleje de él y corrí hacía Taylor. Este estaba confundido pero me recibió con los brazos abiertos, la policía se fue encima de Chris y lo esposaron. No podía dejar de llorar en los brazos de Taylor, de pronto reaccioné y me aleje de él para acercarme a Demian, mí hermanito aún seguía temblando de miedo, me acerque y lo abrace.

—ya acabó todo— le dije con voz suave.

—tenía mucho miedo— me dijo llorando.

—lo se mi amor, yo también.

Llevaban a Demian a una ambulancia que había llegado para que lo revisaran, Louis ya había recobrado la conciencia y estaba siendo atendido. Al fin me sentía tranquila, pero aún había algo que resolver, pero tenía que esperar a estar frente a frente a mi padre. Camine hacia donde estaba Taylor, cuando llegue a su lado lo intente abrazar pero este se alejo, mí corazón se estrujo y baje la cabeza apenada.

—estoy molesto contigo, te dije que no quería que tu entregaras el dinero y no te importo— levante la cabeza para ver sus ojos, pero estos carecían de cariño, eran solo enojo y decepción —gracias a dios Louis hizo lo correcto esta vez y me puso sobre aviso.

—Taylor...

—no puedo hablar contigo ahora, además, acabo de verte besar a otro hombre— dijo cortante y se fue.

Me quede helada ante su reacción, pero en el fondo sabía que tenía razón en molestarse. Me acerqué a Louis y pude ver su cara avergonzada.

—¿Por qué lo hiciste?— queria sonar enojada pero fue todo lo contrario.

—te amo Nia, eres mi mejor amiga, esta vez quería hacer lo correcto, espero algún día me perdones.

—después hablamos— acaricie su mejilla —¿Estas bien?

-si, solo son pequeños golpes.

Me aleje de Louis y me fui de nuevo con Demian, él me necesitaba más que nadie. Después de que lo checaron los paramédicos, unos policías nos escoltaron en una patrulla hasta la estación de policía, mí hermano y yo teníamos que declarar. No tenía ánimos de nada, pero entre más pronto lo hiciéramos, más pronto acabaría todo este embrollo. Demian estaba muy afectado, se estremecía ante cualquier ruido y solo quería estar a mi lado, me partía el corazón verlo así.

El jefe de la policía llamó a nuestros padres para avisarles que todo esto había acabado, querían que se presentaran en la estación de policía, Chris ya había declarado todo y creo que querían encararlo con mí padre más que otra cosa. El detective solo los cito, nos les dijo nada de lo que había pasado. Ya casi amanecía y mis padres no llegaban, tenía un mal presentimiento respecto a mi padre. El sol salió y a las 8 de la mañana en punto llegó mi madre, sola, como había sospechado él no vendría.

—¿Y papá?— le dije a mí madre cuando entró a la estación.

—huyo— mi madre se quebró
—perdoname amor, nunca pense que seria capaz de tantas cosas por dinero.

—¿Es cierto que no es mí padre biológico?— le dije sin más, quería saber toda la verdad de una vez por todas.

—perdoname, yo salí embarazada de otro hombre, el hombre que yo amaba, pero no era de nuestra clase, así que tus abuelos le pagaron a tu padre para que se casara conmigo y limpiara el nombre de la familia.

No lo podía creer, toda mi vida era una mentira, mi padre no es quien yo pensaba. Ahora entendía muchas cosas, todo estaba claro. A el nunca le importe, el solo queria dinero. Me dejé caer en una silla cercana y me lleve las manos al rostro y comencé a llorar desconsolada, hoy más que nunca necesitaba a Taylor pero él no estaba conmigo y lo entendía, habia cometido muchos errores pero el peor de todos es que puse a mí bebé en riesgo.

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Claudia Franco ❤️