En la noche era cuando más podía pasar desapercibido, no podía cometer errores, no podía dejar que detalles demostraran mi lado oculto.
Comenzaba a perder la paciencia, mi insistencia en tocar la puerta esperando a que salga estaba fracasando totalmente. Rondé la casa buscando una entrada fácil, las puertas de la cocina nunca fallaban.
El notar que vivía solo me facilitó el plan, hubiera sido una pena traumatizar a un niño.
- QUIÉN ERES TÚ.
- Cállate - ordené apuntando con un arma.
- Qué quieres, no tengo dinero.
- ¿Piensas que quiero robarte? Oh no no Isaac, vengo por algo...mejor, para mí - reí.
- Tú eres...voy a llamar a la policía - amenazó.
- ¿Ves este golpe?
- Está bien, lo lamento pero baja eso...se te puede escapar un tiro - dijo nervioso.
- Hmmm, sería una pena que se escape sin ser de provecho. ¿No?
- ¿Por qué haces esto? ¿Es por Christopher? ¡Pero si es un...!
- ¡CÁLLATE!
Retrocedió quedando con su espalda pegada a la pared, de pronto lo hombre que demostraba ser quedó reducido a un simple idiota cobarde que solo esperaba la ocasión perfecta para escapar.
- ¿Vas a matarme?
- Dependerá de ti.
- Vamos hombre, no te arruines la vida por un chico, eres joven y lindo - halagó.
- Christopher no es un chico cualquiera, no lo mereces.
- ¿Te gusta? - preguntó curioso.
Lo miré fijamente bajando el arma, llevaba un buen tiempo vigilando los pasos de Christopher que la palabra "gustar" no hacía justicia a lo que sentía.
- Podríamos llegar a un acuerdo. ¿Tienes algo de beber?
- Sí.
- Pues muévete idiota - ordené.
No le quité la mirada de encima, si lograba escapar sería mi fin.
- Toma, es Whisky - entregó.
- ¿Sin hielo?
Volvió al mini bar que tenía, aproveché la instancia de completar lo que verdaderamente era mi objetivo.
- Dime, que quieres.
- Que te alejes de Christopher, no te quiero cerca de él.
- ¿Sabes que cogimos? - preguntó con ganas de fastidiar.
- Sé que no lo hiciste llegar - reí.
- Si me dejas darte un consejo...
- ¿Tú a mí? Vaya, esto se pone interesante.
- Si fue capaz de recaer conmigo no esperes a que te tome enserio, tenemos un vínculo no concluido.
- Que tú no logres olvidarlo no significa que él esté en la misma posición - respondí.
- No lo conoces, Christopher es así, verá a alguien mejor que tú y te dejará.
- Eso nunca va a pasar.
- ¿Y si pasa qué? ¿Piensas matarlo?
Me levanté molesto, de solo imaginar aquello una rabia enorme invadió todo mi interior.
- Haré lo que sea necesario - respondí.
- ¿Por qué...? Oh mierda...q-qué...
- Creo que estaba algo fuerte - enseñé el vaso.
- QUÉ LE PUSISTE.
- Te hubiera explotado el cerebro de un balazo, pero eso sería levantar sospechas. ¿Crees que parezca un suicidio? - pregunté mostrando un pequeño envase de vidrio.
- Maldi...
- Debiste pensarlo dos veces, Christopher no merece sufrir y mientras esté conmigo nadie le hará daño.
- T-Te vas a ir al infierno - dijo bajo.
- Nos vemos allá, Isaac.
Quizás era una muerte lenta y dolorosa, su cara agonizante no era algo bello de ver pero era un peso menos que le estaba quitando a Christopher, algo que en un futuro me agradecería.