Alquimia Oscura: Los hijos de la piedra filosofal

Dentro de la mansión de los Xfire

Dean subía las escaleras de la mansión mientras la primera planta y el pasillo de la segunda planta se encontraba repleta de gente, a mitad de las escaleras él se detuvo miro hacia abajo, una imagen vino a su mente, era el de niño subiendo lentamente las escaleras, este miraba sorprendido toda la mansión. Detrás estaba Cheng quien lo miraba con cara de molestia o de confusión de por qué esa reacción.
—"Bienvenido a tu nueva casa Dean— Exclamo una voz proveniente de la segunda planta, tanto Dean como la imagen de el de niño subiendo las gradas se dirigieron al final de las escaleras, era una imagen de Nakamura sonriendo con amabilidad— Eres un Xfire a partir de ahora"
—" ¿¡QUE!? Usted me vio la cara anciano estúpido ustedes asesinaron a mi familia"— Respondio la imagen de Dean mientras señalaba a Nakamura.
— "Cierra la boca estúpido mal agradecido"— Respondio Cheng al ver la forma de actuar de Dean.
—"Déjalo Cheng— Exclamo Nakamura— Tiene derecho a sentir ese enojo es una carga que tenemos gracias al liderazgo de nuestro líder anterior además Dean es cierto me odias pero quiero que tú seas un Xfire ejemplar que cambie a los futuros miembros a no ser tan salvajes"— Exclamo con una sonrisa de amabilidad Nakamura con los brazos extendidos.
— No creí que al final lograrías tu cometido conmigo anciano — Exclamo en voz baja Dean mientras terminaba de subir las escaleras. Miro algunos cuadros que tenía Nakamura en la mansión.
— Espero que esta vez te atrevas a saludarme como se debe niño callejero — Grito una voz poco chillona a la derecha de Dean, este se sorprendió levemente y giro su cabeza en dirección a esa voz, la conocía. Miro a una chica que lo observaba y tenía sus manos en la cintura, una chaqueta de cuero negra una blusa negra y una falda que le quedaba apretada en los muslos, su piel era blanca tenía los ojos azules cristalinos y su cabello era negro, este le llegaba hasta los hombros pero se lo sujetaba con una cola, el vestido era escotado y dejaba ver un poco sus pechos, no eran de gran tamaño, eran moderados pero si provocaban alguna distracción.
— Ashley Nakamura — Dean agacho su cabeza frente a ella como señal de respeto— Lo siento por la muerte de tu— Fue interrumpido por un puñetazo en la cabeza —¿¡POR QUE CARAJOS FUE ESO!? — Pregunto molesto Dean mientras se sobaba la cabeza.
— Eso es por irte sin despedirte cuando fuiste a Inglaterra además me hiciste pagar la cena ese día— Dijo Ashley mientras se hacia la ofendida con una voz dramática y colocaba su mano derecha sobre su frente y cerraba los ojos.
— Sabes que olvide la billetera además no te hagas la dramática cuando tú te ofreciste e inclusive no querías que fuera al hotel que ya había sido cancelado por el anciano de tu hermano— Argumento Dean con el rostro ruborizado.
— Yo jamás haría algo tan vil como eso sería muy indecoroso de mi parte hacerlo — Dijo Ashley mientras miraba a Dean con desagrado.
— Maldita sea deja de querer trangiversar todo lo que digo — Dijo con molestia Dean.
— Oblígame niño callejero— Respondió Ashley con los brazos cruzados mientras se miraba con cabreo con Dean. Pasaron dos minutos y estos empezaron a reír, ella coloco su mano derecha en el hombro izquierdo de Dean mientras que este la coloco en la espalda de ella — Es bueno verte después de mucho tiempo niño callejero.
— Ni que lo digas princesita de porcelana— Respondió Dean mientras se limpiaba las lágrimas que habían salido por la risa que le provoco la situación— Sabes tu hermano seguramente nos hubiera gritado que dejáramos de hacer estas escenas.
— Créeme era lo mejor ver sus reacciones en nuestras peleas después de todo él pensaba que nos odiábamos solo porque te enseñe alquimia y eras un estúpido para aprender— Exclamo Ashley.
— Me costó aprender por que eras pésima para enseñar además soy el único que casi igualo tu alquimia pirotécnica— Exclamo Dean mientras te rascaba la cabeza con su mano derecha.
— Por favor si no te hubiera exigido como lo hice seguramente fueras asqueroso usando alquimia además tú mismo lo has dicho casi me igualas fueras un buen alumno si me superaras— Exclamo con arrogancia Ashley.
— Entonces debo de considerarte una pésima alumna ¿no Ashley? — Exclamo Bob quien acababa de Salir de la oficina y había caminado hacia las escaleras pero se detuvo al ver a ambos.
— Bob digo jefe es un placer verlo— Exclamo nerviosamente Ashley al verlo con una sonrisa melancólica, ella inclino su cabeza como señal de respeto.
— Me sorprende que evadieras que el hecho que te dijo pésima alumna— Exclamo con un tono de voz burlesco Dean, Ashley levanto su mano derecha y tomo a Dean de la parte trasera de su cabeza e hizo que este la inclinara— ¿¡QUE DEMONIOS TE PASA ¡?— Pregunto cabreado.
— Es nuestro líder callejero estúpido al menos muéstrale respeto— Dijo reprendiendo a Dean Ashley.
— Calma no importa Ashley además yo debo de darte mis condolencias por la pérdida de tu hermano— Exclamo con una voz melancólica Bob luego miro a Dean— Ve con Ivanov está en la recepción donde se encuentra el ataúd ósea en el anfiteatro y quiero que nos esperes ahí Dean.
— ¿Qué diablos? Tenemos días de no vernos y lo primero que haces es enviarme donde Ivanov— Exclamo molesto y confundido a su vez Dean.
— No me mal entiendas Dean me alegro de verte, de saber que ya no estás tan deprimido pero debo de hablar con ella sobre algo crucial en estos momentos para la organización además no te preocupes lo sabrás luego del entierro ya que debo de hablarlo con Ivanov también como contigo— Exclamo Bob mientras se daba la vuelta.
— Nos veremos pronto Dean además no te preocupes debes de entender a Bob se encuentra en una circunstancias difícil digo está a las puerta de una guerra cosa que ni mi hermano estuvo— Exclamo Ashley mientras empezaba a ir detrás de Bob. Ambos entraron a la oficina dejando a Dean solo en el pasillo.
— Otra vez solo— Exclamo Dean en voz baja— bueno que más da iré a extorsionar a Ivanov para que me invite a cenar — Dijo Dean mientras colocaba sus manos detrás de la cabeza y empezó a caminar hacia el anfiteatro— Por alguna extraña razón hay algo que me está incomodando— Dijo Dean en Voz baja— Bueno tal vez solo sea mi imaginación.

En la oficina del líder de los Xfire Bob se sentó en la silla tras el escritorio, se quitó los lentes y coloco sus manos sobre su cabeza, Ashley lo miraba sin inmutarse, ella se encontraba frente a Bob , los separaba el escritorio.
— Ashley tu estuviste con tu hermano tras la muerte del líder Marcus — Bob levanto la cabeza y observo a la chica— ¿El sentía una presión abrumadora sobre sus hombros?
— El tenia miedo recuerda que en ese entonces la organización podía inclusive dividirse por que habían algunos fanáticos que querían al hijo de Marcus como líder pero tanto como Marcus lo eligió a él y el hijo no quiso desafiar el deseo de su padre— Respondió Ashley.
— Tu hermano siempre se preguntó si hizo bien en aceptar el puesto por eso pensaba demasiado en sus decisiones — Bob se puso de pie, volvió a colocarse los lentes— La razón por la que te llame es por la decisión que debo de tomar luego de lo ocurrido en Tokio , si debe de haber una respuesta o abstenerme a un nuevo ataque de los Unravel o quien sea que esté detrás de eso.
— Me imagino que la desertora esta acá con ustedes y les dio esa información— Ashley se dio la vuelta y camino hacia la salida — De ser cierto esa información te recomendaría que actuaras al identificar al verdadero enemigo— Concluyo Ashley mientras ponía su mano en la perilla de la puerta.
— Quiero formes parte del comité de guerra y que te quedes después del entierro eres inteligente y necesito alguien como tú para discutir o pensar estas cosas— Exclamo Bob.
— Me alagas Bob y por el respeto que te tengo como el cariño que te tenía mi hermano aceptare la oferta— Respondió con una sonrisa leve Ashley — Además estoy segura que hay algo más que quieres discutir conmigo.
— Así es recuerdas la leyenda que menciono Marcus una vez sobre la alquimia que hacía a invencible a los alquimistas parece que encaja con los atacantes de Tokio , y Sakuragicho — Exclamo Bob mientras observaba la ventana de la oficina.