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60. Juntos

Capítulo 60.
Juntos

"Algún día, la distancia morirá de celos al vernos  juntos."

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Astrid sonrió con nostalgia observando el pronto atardecer.

Se encontraba en la parada de camiones esperando el transporte debido a que no se había dirigido en su carro propio a la trampa de María.

¿Se arrepentía de su decisión?

Por supuesto que no.

Sabía muy bien sus límites, lo que estaba dispuesta a arriesgar, a perder y también sabía hasta donde tenía que detenerse.

Se abrazó a sí misma al sentir el viento frío recorrer su cuerpo. Tenía un ligero suéter pero no era suficiente para el frío que sentía dentro de ella.

Suspiró con nostalgia.

Admirando con deleite a la primera estrella que aparecía con el manto oscuro. Sin duda esa luz sería lo único que la acompañaría en ese último día.

El último día con él.

En ese instante un carro azul brilló ante ella y pudo reconocer de inmediato el precioso rostro de su novio detrás de esas ventanas.

No pudo evitar sonrojarse ante lo guapo que se veía.

Tenía una camisa color vino arremangada hasta los codos, dos botones sueltos del cuello hacia abajo y aunque su cabello estaba despeinado, se movía en sintonía junto con el viento.

Su enorme sonrisa al verla la hizo sentir felicidad.

Él la amaba tanto como ella a él.

Hiccup bajó de su auto y como todo un caballero le abrió la puerta para que pudiera ingresar. Claro que ella era de esas mujeres que sabían muy bien cómo abrir una puerta, pero estas acciones simples de Hiccup la hacían sentir muy querida al tener tanto detalle de su parte.

— M'Lady, ¿Qué es lo que ha sucedido? — Cuestionó con una sonrisa mientras le robaba un pequeño y juguetón beso en sus labios.

Le colocó el cinturón de seguridad y una vez lista su novia, caminó hacia el otro lado del carro.

— No me traje mi carro porque tenía ganas de hacer un poco de ejercicio, ya sabes, todo el tiempo en la oficina hace que mi sangre se oxide como el metal.— Comentó con una sonrisa y un sonroje marcado ante ese sorpresivo beso.

Aunque no se quedó sin hacer nada a cambio, ella también le robó un beso que él muy bien correspondió.

Sus labios se deleitaron ante su toque, ella podía sentir su vientre moverse con ahínco. Y un calor que recorría desde su corazón hasta el resto de su cuerpo.

Con cariño Hiccup tomó la mano de Astrid mientras disfrutaba ese contacto labial entre ellos. La pasión comenzaba a encenderse pero sabían que se tenían que mover del lugar debido a que era una parada.

Y una vez finalizado el beso, arrancó hacia la dirección de un parque turístico decorado con luces y muchos árboles. Un lugar precioso para admirar y que había investigado que es uno de los lugares más recomendados para las citas.

— Ven.— Tomó su mano para pegarla a su cuerpo mientras le robaba un nuevo beso.

— Hiccup...— Sonrió con gusto al sentir que su novio la besaba varias veces y no le permitía respirar. Sus manos se posicionron en su cintura para no permitirle alejarse ningún centímetro de su cuerpo.