La voz de Kate diciendo mi nombre en estos dos días, aunque sea para mover los artículos que necesitaba, hacía que mi sistema corriera más rápido. Verla con sus gafas mordiendo su lápiz de trabajo tan concentrada dirigiendo a las modelos también hacía que mi cuerpo presentara una secuencia de emociones nuevas.Muchas veces me ha descubierto mirándola, como justo ahora. Su mirada parece desintegrar mis fuerzas y siento que lo sabe.
–Charlie– pestañeo enseguida despertando de mis pensamientos. Me hace seña para que me acerque, y lo hago después de soltar una de las sombrillas–. ¿Qué te parecen las modelos?
Las miro. Sus cuerpos largos y delgados pueden parar todo el tráfico de Colta. Una de ellas es castaña y sus ojos azules oscuros me hacen sentir unos terribles celos cuando miran a Kate de manera sugestiva. La otra es una pelinegra bronceada, que también me produce celos cuando sus ojos café se achican cuando le sonríen.
Miro nuevamente a Kate que espera por mi respuesta, y sé que no puedo decirle todo esto que acabo de pensar.
–Charlie. Me refiero a la vestimenta y las poses que están utilizando– me aclara con una sonrisa en su rostro, como si me hubiese leído el pensamiento y se estuviese burlando de mí.
– ¡Claro... son perfectas! Hacen buen contraste. Aunque no se mucho de esto– respondo, pero Kate parece buscar otra cosa.
–Sí. Hacen buen contraste. Pero, uhm... creo que entonces es la luz– dice y se dirige a los reflectores para cambiarlos de posición. Después va al control de luces y convierte la luz blanca en algo más tenue para darle la expresión que quiere–. ¿Ahora qué te parece?
Me quedo pensando con los brazos cruzados, mirando a Kate y a la escena con las modelos, tratando de buscar las palabras que puedan satisfacerla, pero no lo sé.
–No lo sé– le digo.
–Vamos. Dime aunque sea eso que no sabes– le miro y me rasco la nuca.
–Bueno. Me parece que ahora las sombras que llegan parcialmente resaltan las siluetas de cada una... Y sus rostros, ahm... Creo que proyectan la profundidad del tema que creo que buscas– ella me mira atenta–. Kate, la verdad no tengo idea de lo que he dicho.
–Tranquila. Me ha gustado.
Aquello hizo que me animara.
Ya la tarde estaba desapareciendo y me encontraba con Kate sentadas sobre una manta y algunos cojines alrededor de la escenografía que ahora está vacía. Sin modelos y sin fotógrafos. Hacíamos esta clase de picnic desde el día de los postres miniaturas, pero esta vez eran frutas con sirope de chocolate.
–Tu madre piensa que ahora me pareces mejor compañía que ella.
–También me lo ha dicho– digo, siguiendo la risa de Kate–. No entiendo como mis padres nunca me hablaron de ti– percibo la atención inmediata de Kate. Sé que es un tema difícil por lo poco que mi madre me hizo saber, pero a pesar del rápido gesto de Kate, no pareció incomodarle.
–Te dije que fue lo mejor– pude notar en la voz de Kate como de nuevo se descompensaba. Entonces, trato de indagar con cautela sobre la situación.
– ¿Mejor en qué sentido?
–En que no tendrás que escuchar una lamentable historia.
–Quiero oírla– digo con solidez, haciendo que tuviera su mirada directa sobre mí– ¿Puedo saber qué pasó?
Kate se queda perdida con nostalgia en sus pensamientos durante varios segundos. Yo solo le doy el tiempo que necesita.
–Nunca pude conocer a mi madre, y la relación con mi padre fue bastante imponente– suspira–. Supongo que quedó resentido cuando, por mi culpa, mi madre falleció al darme a luz. Es lo que él me decía, que yo tuve la culpa. No aceptaba mis preferencias sexuales y, por ello, me dio una vida de golpes y humillaciones– el comienzo de su relato me hace sentir una presión en el estómago. Kate, sin embargo, a pesar de lo arduo que me está revelando, mantiene su firmeza en sus palabras–. Tus padres siempre me apoyaron, pero no fue suficiente. Tenía que irme. Cuando lo hice, fue doloroso para tus padres y para mí. Más para tu madre. Cuando me fui, perdí comunicación con ellos.
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Kate
RomanceCuando se muda junto a mi casa, no puedo evitar expresar mis sentimientos de forma genuina hacia Kate. Sin embargo, ella intenta detenerme para mantener sus razones morales intactas. Obra registrada bajo el número: 2105067761906 TODOS LOS DERECHOS R...