Capítulo 15

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CANCIÓN SUGERIDA: Sorry - Halsey.

No había podido estar tranquila desde que Kate cruzó la puerta de mi habitación con sus manos temblando, a pesar de que intentó ocultarme su estado desconcertado. Incluso, mis padres llegaron cinco minutos después, mucho antes de que pudiese recomponerme de todo lo que había sucedido.

La hora de las diez se había acercado y la noche en conjunto con mi ansiedad se hacía cada vez más fría y oscura. Después de tanto controlar mis células nerviosas y luchar contra mis pulsaciones dentro de estas cuatro paredes, mis fuerzas se habían agotado, dejándome débil. Y cuando tan solo he dejado de contenerme, mis impulsos tomaron todo el control. Me he vestido con un suéter sobre mi pijama y me he acobijado en un gorro verde olivo con mis pantuflas calientes.

Salgo con mucho juicio y silencio de mi habitación, y tiro la mirada al cuarto de mis padres, más allá del mío. Cuando me aseguro de que no seré pillada, paso por el pasillo y bajo las escaleras.

Al tocar el timbre de la casa de Kate, sé que no estoy actuando con claridad, mucho menos siendo razonable al salir enferma bajo este clima húmedo, sosteniendo en un hilo la tormenta. Pero estaba sintiendo morirme en la mitad de mi habitación si me quedaba un segundo más.

Kate abre la puerta y se nota claramente que no se esperaba ver mi rostro. Su mirada es tan fuerte que me deja muda. En un instante pasa de impactada a molesta. Y antes de que pueda explicarme me toma por el brazo, me lleva hacia dentro y cierra la puerta tras ella con suficiente fuerza. Sus ojos ahora están convirtiéndome en piedra. No estaba preparada para esta reacción. Incluso, es primera vez que la veo de esta manera. Pero, soy capaz de asumir todo lo que pueda decirme y aceptar que de nuevo estoy siendo una imprudente y descuidada.

Kate solo me pasa por el lado, sin hablarme, subiendo por las escaleras con dirección a perderse de mi vista.

Mis manos están temblando. Mi corazón casi desvaneciéndose y mi mente totalmente en blanco sin saber qué hacer. En mi memoria aun reaccionaba la imagen viva de una Kate enojada. Estaba nerviosa en el hall de su entrada, aun con los pies petrificados al suelo. Pero no he venido hasta aquí para paralizarse. Debo hablar con ella.

Mis piernas subieron el último escalón, dando al pasillo con poca luz.

Pude reconocer el cuarto de estudio donde se aguarda aquel majestuoso piano de cola profesional. Continúo caminando hasta detenerme frente a una puerta cerrada que refleja luces titilantes por la rendija de abajo. Supongo entonces que es una Tv encendida y que Kate se encuentra allí dentro. Respiro y doy dos toques a la puerta con la incertidumbre de no saber cómo voy a encontrarla. Espero alguna señal pero, nada de ello. Cuando decido insistir, mi corazón ha saltado al oír su voz al otro lado de la puerta.

– ¿Qué estás haciendo aquí, Charlie? – escucho su voz sonora y me recuesto con necesidad a la puerta de madera. Quería traspasarla.

–Déjame entrar– le pido. Y su silencio tarda más de lo que puedo soportar.

La puerta se abre y de inmediato mi respiración se frena. Sus ojos verdes crema me reciben más suaves de lo que realmente estaba preparada a enfrentar. Kate me da la señal de pasar y en cuanto lo hago, puedo ver la intimidad y privacidad en esta parte de su vida que no había visto antes.

El grosor de la alfombra en el suelo me hace querer quitar mis zapatos y caminar sobre ella. Su cama tan grande, sin duda es un perfecto lugar con almohadas tan acogedoras que fácilmente se puede relajar. Solo quería pasar mis dedos por las colchas y ansiosamente meter mi cara entre sus cobijas. Me imagino a Kate dentro de ellas y no podría salir de aquí jamás. Me descubro ruborizada con mi pensamiento y, a tiempo, desvío rápidamente la mirada evitando ir más dentro de mi imaginación. Veo una maleta grande que parece estar bien equipada, y pienso que no la ha deshecho desde que llegó. Su closet daba al sentido contrario que el mío, también su mesita de noche. Me doy cuenta que aún quedan cosas de su niñez.

KateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora