Habiendo llegado la mañana, el tan mentado día finalmente comenzó; una ligera brisa entró por la ventana de Thomas, haciendo que se despertara de bastante mala gana, cerró la ventana junto con las cortinas de esta y se recostó nuevamente para volver a dormir. Pues había llegado el sábado, por lo que tendría todo el tiempo del mundo para dormir.
—... ¡Feliz cumpleaños, Thomas!
Por desgracia, y como era de esperarse, la paz no le duró mucho tiempo; pues William entró a su habitación dispuesto a felicitarlo.
El ojiazul soltó un quejido y se tapó nuevamente con las sábanas, a lo que el menor respondió lanzándose a la cama para posteriormente comenzar a saltar en un intento por despertarlo; harto de ello, Thomas soltó un grito ciertamente molesto por la acción de su hermano pequeño.
—¡Felicidades! —exclamó el niño de pijama verde para darle un abrazo al chico, el castaño bufó molesto por el contacto; pero después de todo debía admitir que los abrazos que el pequeño le daba eran bastante agradables.
El par de hermanos pasaron el resto de la mañana hablando, o al menos hasta que sus padres despertaran para bajar a desayunar.
—... ¿Qué es lo que más te gustaría de regalo? —Will le preguntó, Thomas se detuvo a pensar por un momento, eventualmente tomó un lápiz junto con una hoja y comenzó a dibujar lo que él deseaba como regalo de cumpleaños.
El pequeño observaba con atención cada uno de los trazos que el castaño realizaba sobre la hoja. Una inconsciente sonrisa se plasmó en sus labios al tiempo que le dedicaba al mayor su entusiasta y ciertamente curiosa mirada, pues debía admitir que jamás lo había visto comunicarse de tal manera.
—Uuy, interesante —mencionó el menor, curiosamente no se sorprendió del todo; pues era algo que Thomas deseaba desde hace bastante tiempo.
Después de un rato ambos bajaron para el desayuno en compañía de sus padres, mientras que el ojiazul disfrutaba tranquilamente de sus waffles con helado; los mayores comenzaron a hablar sobre una pequeña "reunión" que se llevaría a cabo por el cumpleaños del chico esa misma tarde.
—Entonces... ¿Invitarás a tu amigo, Thomas?
Preguntó su padre, a lo que el castaño contestó asintiendo con entusiasmo, pues no perdió la oportunidad de hacerlo el día anterior.
—Oh, a propósito... —Claire añadió—. ¡También vendrán los tíos Paul y Robert! ¿no estás emocionado?
Al escuchar ese comentario, el ojiazul soltó repentinamente sus cubiertos debido al miedo. Pues sabía que si sus tíos estarían invitados, lógicamente también lo estaría Ethan... Y eso era lo que menos deseaba, no quería que el de cabello teñido le hiciera pasar un mal rato; mucho menos en su cumpleaños.
—... ¿No pueden hacer que vengan sin Ethan? —preguntó el menor al notar el nerviosismo en su hermano mayor.
—¿Qué?, ¿Por qué no quieren que él venga? —Stuart lo miró extrañado
—Cierto, además, él y Thomas siempre han sido inseparables —comentó la mujer, dando un aparente "caso cerrado" con esa frase.
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Against The World [EN EDICIÓN]
Teen Fiction«La vida está llena de giros y sorpresas inexplicables» Tras mudarse en espera de apartarse de todo lo que alguna vez vivió, Thomas no se encuentra del todo confiado al respecto, pues tener que comenzar de cero en una nueva ciudad es algo que lo asu...