Eran las 7:58 pm, y para ser ésta hora ya no había mucha gente.
Me senté en la banqueta frente a un parque, mi mente voló.
No sé cuanto tiempo estuve ahí sentada observando la nada. Empezó a llover, la gente corría de un lado a otro, yo permanecía sentada, mis lágrimas comenzaron a salir de nuevo.
- Señorita no puede estar aquí.- dijo un hombre algo mayor.-cubrase con esto.- dijo dándome una larga chamarra
- Gracias, debo irme.- dije dejando al señor confundido
Mi celular sonó, es Joel. Saqué mi celular, mis manos temblorosas no lo aguantaron.
Mierda, dije al ver mi celular en un charco
La lluvia se intensificó y con ello mi llanto, sinceramente ya no sé porqué lloraba. Para haber hecho lo que hice no me sentía tan culpable, no todo es mi culpa. Pero sinceramente había sido tan estúpida, Chris no merece sufrir, él es.. increíble.
Comencé a caminar más rápido ya que mi cuerpo comenzaba a enfriarse, la chamarra estaba más que empapada, y no traigo dinero.
Pit pit
Un auto pitó, giré la cabeza.- Subete.- dijo Richard abriendo la puerta
- Gracias.- dije, dejé la chamarra en el suelo y Richard arrancó
- ¿Que haces acá, y lloviendo?.-preguntó
- Salí a caminar y comenzó a llover.- dije mirando por la ventana
- Eso no es verdad, ______ te conozco.- dijo mirándome rápidamente
- Enserio.- dije sin interés.- me podrías llevar a mi casa por favor.- dije Richard asintió
Llegamos a mi casa.
- Gracias.- dije abriendo la puerta, Richard me jaló del brazo
- ¿Segura que estás bien?.- preguntó, asenti y me soltó
Corrí hasta llegar a la puerta y toqué el timbre.
- ¿Niña está bien?.- preguntó Mali dejándome pasar
- Si Mali, ¿Joel no ha venido?.-pregunté, Malí negó
Subí a mi habitación para cambiarme la ropa.
Me di un baño con agua calentita, espero no enfermar.
Me puse un pans calientito y una sudadera, los calcetines no pueden faltar.Estaba sentada frente al ventanal, observando como caían las gotas sobre la ventana.
Un aroma a chocolate caliente llegó a mi nariz.
Me puse mis pantuflas y bajé.
- ¿Que haces, Malí?.- pregunté sentandome frente a la barra
- Preparo chocolate, ¿quieres?.- asenti frenéticamente, Malí sonrío con ternura
Me sirvió un poco de chocolate, que por cierto está delicioso, el timbre sonó. Malí fue a abrir
- Joven Joel, mire como está.- dijo Malí, me levanté y fui hasta la sala
Ahí estaba Joel, literalmente bañado, sonreí al verlo así, se miraba muy gracioso.
- Ven, vamos a que te cambies.- dije seria
Subimos hasta mi habitación, mientras Joel se bañaba yo buscaba su ropa.
Salió de bañarse, se ve tan bien, el agua caía por su abdomen, mi mirada subía y bajaba por el cuerpo de Joel.
- ¿Te gusta lo que ves?.- preguntó Joel sonriente, me sonroje al instante y bajé la mirada
Joel se acercó a mi, me tomó del mentón y me besó, me besó con tanto deseo, yo lo besaba desesperadamente.
Me cargó dejando caer la toalla que lo envolvía, comenzó a quitar mi sudadera, se puso entre mis piernas, podía sentir su gran erección, llevo sus manos hasta mi sostén deshaciendose de el, bajo mi pans y con el mis bragas, sin previo aviso entró en mi de una sola estocada, un gemido fuerte salió de mí deshaciendo el beso.
- ¡AAHH!.- dije enterrando mis uñas en su espalda
Dejó de besarme, sus embestidas eran fuertes, me dolía, esto no se siente nada bien.
- Basta Joel.- dije
- ¿Soy mejor que el pendejo ese?.- dijo embistiendome fuertemente.- ¡Dilo¡, quiero escucharlo
- Vas a lastimar al bebé.- trataba de alejarlo con mis piernas, pero era imposible
- Sólo dilo.- gritó, sus embestidas eran fuertes, cada vez me dolía más
- Si Joel, eres mejor que Chris.- dije llorando.- Ahora déjame, lastimaras a mi bebé.- sus embestidas pararon, y así como entró en mí, salió, sin decir nada
Se acostó a mi lado y me levanté, tome mi pans y sudadera, entré al baño, y comencé a llorar.
No sé que me dolía más, si las fuertes embestidas o lo que había dicho, me había dado duro por sus estúpidos celos, me ha lastimado, Joel no era así.
Me dejé caer sobre el piso, ahora si tenía motivos para llorar, y lo haría, mis sollozos se apoderaron del momento, estaba desnuda abrazando mis piernas mientras lloraba desconsoladamente.
- _______.- habló Joel del otro lado, no contesté.- _______ abre la puerta por favor.- decía Joel mientras intentaba abrir la puerta, pero le había puesto seguro
- ¡Lárgate!.- contesté con voz rota
- Por favor abre la puerta, tenemos que hablar.- espetó
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Espero les esté gustando, no soy la mejor escribiendo, pero siempre trato de dar lo mejor de mi, hago mi mejor esfuerzo.
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Una vida contigo. |Joel Pimentel. TERMINADA
RandomBien dicen que no hay final triste, pero nadie tiene la certeza de que eso que se dice sea cierto. Entra y descubre. 🌹Originalmente mía🌹 No copia y/o adaptación sin mi consentimiento