Domingo.
Jack volvía de misa.
Varya bajó del auto con él. Lo cual me indicaba que se quedaría en casa a comer y que había asistido a la misma ceremonia que mi padre.
Mientras yo con suerte lograba despegar mis párpados y evitar quedarme dormida sobre la mesada.Su relación con mi hermano parecía haber crecido aún más, a pesar de que varias veces tenían pequeñas discusiones, o eso era lo que escuchaba desde las paredes de mi alcoba.
Agradecía que fueran peleas. Si era lo otro no creía ser capaz de soportarlo.
Sierra también estaba en casa con nosotros. De hecho mantenía una charla con mi madre acerca de futuras ideas para la boda.
Estaba tan contenta por ellos, en especial porque Caleb tendría la maravillosa oportunidad de vivir en una casa diferente a la de Jack y sentiría por primera vez paz mental y algo tan bueno que se perdió en años como lo era alejarse de ese hombre.
Además, tenía la esperanza de que en un futuro ellos decidirían formar una familia y me vería muy agradecida si me convertían en tía.—¿Pensaste en algún tipo de vestido?—Le pregunté a mi cuñada.
—Me gustaría algo así.
Ella me mostró de su teléfono móvil una foto de un gran vestido blanco con brillos de Pinterest. Mi madre al igual que yo, quedó fascinada.
Era una prenda realmente hermosa y ansiaba verlo puesto en las semejantes curvas que tenía la futura esposa.—Tú serás la madrina.—Me guiñó el ojo y no pude evitar abrazarla. Creí que elegiría a Varya para eso.
Internamente estaba saltando de la emoción.
Nos reunimos todos en la mesa. Era hora del almuerzo.
Luego de la discusión con mi padre, mamá tuvo una charla con él y el mismísimo Jack se acercó a mí para pedirme disculpas, incluso cuando fue claro al decir que él no me perdonaría.
Yo fui obligada a aceptarlo, pero muy bien sabía que yo no le disculparía nada y que todo lo que me causaba daño por su parte lo iba anotando en una lista negra dentro de mi mente para cuando sea el tiempo indicado de pasarle factura.Aún la relación la tomábamos con pinzas y se podía percibir cierta incomodidad en el aire.
—¿Brooke, me pasas la sal?—Le alcancé lo que me pidió la rusa con una sonrisa —totalmente falsa— amable y seguí deleitándome con el delicioso plato de pasta que mi madre había preparado.
Jack aclaró su garganta.
—Su madre y yo nos iremos el fin de semana con Caleb para conocer a los parientes de Sierra, que viven en Fresno.
Mi cuñada me había contado su historia; toda su familia pertenecía a la ciudad de Fresno, pero desde pequeña sus padres se mudaron por trabajo a Bakersfield y sólo ve al resto de sus parientes en fechas especiales o vacaciones.
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𝐁𝐑𝐎𝐓𝐇𝐄𝐑 ✔
Teen FictionAños pasaron tras la separación de los padres de Brooklyn Bedling, sin embargo esta seguía reprimiendo las ganas de matar a su padre por el hecho de como terminaron las cosas; y más ahora, que ella estaba destinada a volver con ese cincuentón que ha...