ꜰᴏᴄᴜꜱ ᴏɴ ᴍᴇ × ᴋɪᴍ ʏᴜɢʏᴇᴏᴍ ×

29.

Los meses seguían pasando, la castaña había dejado de serlo ahora era rubia, había cortado considerablemente su cabello; llevaba una vida plena en Francia, estaba comprometida ahora aunque no estaba muy segura de casarse, ¿Quién podría estar listo para casarse tan joven? además que estaba segura que había aceptado porque no tenía otra opción. Ella no vivía con Sehun porque él estaba en un bufet muy importante de abogados a nivel internacional y la mayor parte del tiempo se la pasa viajando. 

Había llegado Octubre, estaba sumamente nerviosa porque su padre le dijo que tenía que decirle algo importante, hace mucho no lo veía y temía lo peor. 

—Hola Yang Mi

—Hola pa ¿Cómo están? 

—Todo bien, crees que puedas regresar a Corea este mes 

—¿Necesitas mi ayuda en algo? — cuestionó preocupada — la empresa va mal ¿verdad? 

—No hija tranquila, esto es porque renovare mis votos con la señora Kim y quiero que estés presente — podía sentir que su padre sonreía como nunca — además hace mucho no veo a mi princesa 

—Claro, veré si me dan permiso en el trabajo para ir con ustedes 

—Espero que si, nos vemos pronto mi bebé 

—Ya no soy una bebé, nos vemos luego

Termino la llamada, se sentía emocionada porque de algún modo amaba escuchar a su padre feliz, además teniendo en cuenta todo sería una ceremonia de renovación de votos muy emotiva, pero también esa chispa de curiosidad se encendía, hace mucho tiempo no lo veía, hace mucho tiempo no escuchaba su voz. Se preguntaba si el menor habría cambiado o seguía siendo igual. Después de hablar con Sehun le dijo que llegaría una semana después a Corea si es que a ella le daban permiso de ausentarse.

No demoro mucho en pedir ese permiso de trabajar al menos por unos meses desde Corea, no se negaron porque Yang Mi ha demostrado su esfuerzo desde el primer día, no le diría a nadie que regresaba, quería que fuese una sorpresa para todos. 

"Pasajeros del vuelo 304B destino a Corea favor de abordar"

(...)

Entraron desesperadamente al departamento, él la miraba con deseo su pasatiempo favorito era desnudarla, tiraba de su ropa desgarrándola por completo, ella desabrochaba los botones de su camisa con una mano mientras con la otra lo jalaba de la corbata hacia la habitación, la detuvo en el pasillo, alzo su falda y toco su parte mas intima haciendo que hiciera su cabeza hacia atrás, como pudo se bajo el pantalón junto con su ropa interior, amaba que ella no usara lencería porque hacía su trabajo mas fácil, entro en ella provocando un grito ahogado, apretaba sus senos mientras succionaba su cuello, se embriagaba con su perfume, ella enredo sus piernas en sus caderas obligándolo a entrar mas profundo en ella, como pudieron llegaron a la habitación cerrando la puerta detrás de ellos, la tumbo en la cama con él adentro, la embestía de una manera brusca haciendo que la cama se moviera mas de lo normal. 

—Min Ra sorpresa ya lleg... — salió del closet al ver la escena se volteo. 

—Yang Mi, ¿pero que diablos? — dijo el pelinegro, si los habían interrumpido en plena sesión. 

—Dios parecen conejos, que no se cansan o algo — dijo aún con las manos en los ojos — voy a salir y los esperare afuera 

Se movió como pudo hasta la puerta pero choco con la esquina de la cama, como pudo salió de esa habitación, era la segunda vez que los veía tener relaciones y seguían siendo igual de salvajes y apasionados, deseaba mejor haber ido a ver a Jackson o a Mark pero no, decidió visitar a su mejor amiga darle esa sorpresa y la que se termino llevando la sorpresa fue ella. Cuando por fin salieron de la habitación, se sentaron en la sala junto a la ahora rubia. 

—Yang Mi ¿qué haces aquí? — le dijo con cierto tono de reproche, si su mejor amiga estaba enojada con ella. 

—Disculpa por molestarte con mi amistad, solo quería venir a verte — rodo los ojos — no es mi culpa que estén todo el tiempo en celo como los gatos o mas bien como los conejos 

—Es que nos hubieras avisado — rasco su nuca con nerviosismo, el pelinegro se sentía incomodo — para esperar y poder hacer nuestras cosas 

—Quería que fuera sorpresa Jae, pero la sorpresa me la lleve yo al verlos 

—¿Te quedarás? — cuestionó su mejor amiga — o solo viniste a molestar unos días 

—Estaré aquí por un tiempo, mi papá va a renovar votos con la señora Kim y quería que estuviera presente — sonrió — me alegra verlos, me iré para que puedan hacer sus tareas pendientes, por cierto espero ser tía pronto 

— Yang Mi eres una tonta — abrazaron a la rubia, hace mucho no se veían y esta vez se verían con mas frecuencia. 

Salió del departamento de sus mejores amigos, caminaba con su equipaje en las grandes calles de Seúl, se quedo en el río Han admirando todo, recordó aquellas veces que venía con sus amigos o solo venía con Youngjae y coco, siguió caminando hasta donde se encontraba un grupo de personas observando, miró bien y ahí estaba él cantando mientras tocaba el piano, era de sus cosas favoritas cuando iba a casa de Youngjae, verlo tocar y escuchar cuando cantaba. La canción terminó, se quedo ahí mirándolo. Sobre el instrumento estaba un tulipán de color rosa, sintió a su corazón acelerarse, cuando vio que el la miraba, le sonrió de forma tierna. 

Las personas se habían ido solo estaban ellos dos ahí, se levanto tomando el tulipán y se acerco a ella, estaba feliz de verla, quería decirle que fue un tonto al haberse alejado, pero no sabía si debía, lo único que quería era abrazarla, se arrepentía de haberle dicho a Yugyeom que se alejaría porque pensó que ya la había superado pero no era así. 

— Hola, esto es para ti —  le extendió la flor —  siempre tengo una esperando a que una bella chica amante de estas flores venga a reclamarla 

— Gra... gra.. gracias —  tragó saliva —  no sabía que ahora cantabas 

— Siempre me ha gustado, solo que ahora ya no me da tanto pánico hacerlo frente a muchas personas 

— Me alegra escuchar eso, debo irme fue un gusto verte —  se dio la vuelta para comenzar a caminar hasta que una mano la detuvo, la hizo girar de un solo movimiento, la abrazo sin importar nada, ella estaba bastante sorprendida pensaba que nunca volvería a hablar con él o sentirlo cerca, lo había necesitado, sin darse cuenta estaba llorando lo extrañaba mucho y lo seguía queriendo demasiado, Youngjae tomo su rostro secando sus lágrimas no se resistió mas y la besó, quería demostrarle que todo estaba perdonado, que ella no había tenido la culpa aquella vez hace bastante tiempo, sorpresivamente para él Yang Mi correspondió su gesto. Se separaron luego de unos minutos por la falta de aire. 

— No voy a dejarte ir otra vez, fui un completo idiota al separarme de ti —  suspiro —  deje que los celos me dominaran, Yang Mi eres demasiado especial para mi y no quiero volver a perderte, no quiero que estemos enojados, todo este tiempo sin ti ha sido una tortura para mi corazón, todos los días compro un tulipán de distinto color para sentirte cerca y se que tu no sientes lo mismo por mi, creí que podría superarte pero no pude hacerlo 

— Youngjae yo no se que decirte, esto me toma por sorpresa y yo también te he extrañado todo este tiempo, la verdad creí que nunca volveríamos a hablar mi vida sin ti ya no fue igual 

—Esto es tuyo —  saco la pulsera que aun conservaba era una promesa —  sabía que cuando la dejaste prometiste volver —  se la coloco en la muñeca —  ahí es donde debe estar 

— No creí que la conservaras, pensé que la habías tirado a la basura o simplemente nunca fuiste por ella 

— No podría hacerlo, siempre quiero que lleves algo de mi contigo 

<Nota>

Capullitos, pollitos, de mi corazón se logró la actualización de hoy. 

A que no se esperaban esto, y ya se viene el drama de nuevo. 

Voy a llorar si que si porque estamos a nada de llegar a la recta final. 

Estrellitas arriba, nos vemos el miércoles y déjenme sus comentarios de que les pareció.