ꜰᴏᴄᴜꜱ ᴏɴ ᴍᴇ × ᴋɪᴍ ʏᴜɢʏᴇᴏᴍ ×

1.

Las cosas no eran siempre como uno las planea, el dolor de perder a un ser querido marca para siempre mas si se es un niño indefenso de 8 años, Kim Yugyeom tuvo que presenciar a su corta edad la muerte de su padre. No sería algo fácil de superar para el menor y mucho menos si un año mas tarde su madre decidiera contraer nupcias con un afamado empresario en Seúl, Corea que no estaba solo, había enviudado y tenía una hija que criaba como suya, era bonita como una princesa eso pensó el infante al verla por primera vez, Yang Mi Lee sin en cambio era todo lo contrario al haber perdido a su madre se dijo así misma que lucharía por salir adelante y que sería una mejor persona cada día. Yugyeom por el contrario cambio de ser un niño bondadoso a ser un niño problema. 

Los años pasaron y la idea de ser una familia de nuevo quedo en el olvido, ambos menores ahora tenían la edad de 22 y 21, la convivencia entre ellos no era la mejor, él se esforzaba por hacer enojar a su madre, por consecuencia le hacía maldades a Yang Mi, ella evitaba tener contacto con Yugyeom pues con el paso de los años llego a verlo de distinta forma, pero no modificaba la idea de que era un espantoso dolor de cabeza tener que estar las 24 horas del día los 365 días del año con un idiota.

—¿Podrías dejar de hacer tanto ruido escoria? hay gente tratando de estudiar — le dijo la castaña del otro lado de la puerta.

—Pues si tanto te molesta, vete a estudiar a la gran biblioteca que construyo tu amado padre — en el cinismo que expresaba, trataba de esconder lo que realmente sentía, el había visto florecer a su hermanastra, ya no eran unos niños y mucho menos adolescentes, ambos habían madurado físicamente, en cuanto a personalidad Yang Mi era mucho mas responsable y consciente que Yugyeom.

—Esta cerrada, son las 3 de la mañana parásito — le dijo con obviedad.

—Si pues que te de las llaves, al fin que tu papito te resuelve la vida en menos de cinco minutos 

—Ahora entiendo porque le decepcionas tanto a tu madre, gracias por nada Yugyeom 

—De nada Lee 

Era Lunes la universidad esperaba por ambos, Yang Mi siempre ha sido la mejor estudiante, destacaba por sus notas altas en cada examen que presentaba, la universidad la trataba bien porque es la consentida de cada uno de sus profesores; mientras tanto Yugyeom se esforzaba lo mínimo en cada examen, tuvo que recusar tres materias para poder ir a la universidad y no retrasarse, siempre causaba problemas junto con sus dos amigos BamBam y Suho. 

—Buenos días — saludo Yang Mi con algo de somnolencia.

—Buenos días ¿otra vez no te dejo dormir? — pregunto su padre al verla, mientras que la señora Kim solo miraba. 

—Si pero no es su culpa, también estaba estudiando para la prueba de hoy

—No debes desvelarte mucho Yang Mi, eres mi princesa y las princesas no se desvelan

—Si lo se pa, pero esta princesa quiere grandes cosas en el futuro y debe trabajar duro para conseguirlas —la castaña sonrió orgullosa de sí misma, porque sabía que algún día lograría hacer todo lo que prometió el día que su madre murió.

—Estoy muy orgulloso de ti, eres una gran mujer y se que tu madre también está orgullosa

Yang Mi no pudo evitar sonreír por aquellas palabras que le ha dedicado el adulto al cual lo adoraba desde su niñez, ella sabía que no era su verdadero padre pero no le importaba porque sabía que era mejor tener un padre como él a añorar a alguien que nunca ha visto en su vida. Salió de la casa después de desayunar tenía la maña de esperar la salida de su hermanastro, al verlo salir todo desalineado con una tostada con mermelada en la boca, le causaba gracia y seguía su camino para llegar a la Universidad.

—Hola Yang Mi, te ves preciosa el día de hoy — saludo Youngjae en cuanto entro al salón de clases.

—Hola nutria, tu te ves sumamente adorable 

—Odio que me digas así, hoy no vendrá Min 

—Otra vez se saltara las clases con Jaebeom solo para ver a Park del otro salón — la castaña sabía lo mucho que le gustaba Park pero él nunca la miraba de esa forma y arrastraba a Jaebeom con ella.

—No, aviso que esta enferma — le respondió el castaño de manera tranquila.

—¿Por qué presiento que Mi esta hablando mal de mi? — dijo el pelinegro como si estuviera ofendido.

—Creí que Min te había llevado a acosar a Park otra vez 

—No, sabes me duele que este tras él cuando yo siempre estoy con ella 

—Ya deberías de decirle que te gusta — le respondieron ambos al mismo tiempo, Jaebeom era uno de los mejores estudiantes además de ser un excelente jugador en el equipo de Futbol americano, pero en lo que no era muy bueno es en expresarle sus sentimientos a Min Ra Choi y tenía que ver como ella se fijaba en alguien más.

—Todo es tu culpa Yang Mi, si no le gustaras al tonto de Sehun Oh no habría conocido a Park 

—Por favor JB no seas así, no es mi culpa que Baekhyun, Jinyoung sigan a todos lados a Sehun 

—Como sea, no le diré nada a Min hasta que Park le rompa el corazón 

—Excelente estrategia Hyung, harás que Min te golpee con toda su fuerza — rió el castaño a su lado.

Las clases prosiguieron normal como cualquier otro día, al menos las clases de política solo estaban ellos cuatro pero en Historia Contemporánea se unían Jackson y Mark, que iban algo avanzados y no tomaban ciertas clases, era hora del descanso antes de tomar historia, su tradición era ir al comedor por lo mismo de siempre, sopa de fideos y un poco de Kimbap. Yang Mi podía observar de lejos al grupo de idiotas que era su hermanastro y su par de amigos cavernicolas, que se la pasaban molestando a los de primer semestre.

—Idiotas — dijo Jackson al ver la escena.

—¿Cómo puedes vivir con alguien como el? — habló el rubio a su lado.

—No lo se Mark, a veces quisiera decirle a mi padre que me deje vivir en el departamento pero se que le dolería que rompa con su imagen de familia que aparentemente somos 

—Deberías de darle una golpiza a Yugyeom — expreso el pelinegro.

—Hyung no seas tan violento, es obvio que a Yang Mi le gusta y no podría golpear su carita de bebé — dijo el castaño de manera graciosa provocando que la castaña solo se atragantara con la sopa de fideos.

—Claro que no Youngjae, ese bueno para nada no me gusta 

— Te vuelve loca, lo sabemos — contesto el rubio, provocando las risas de todos.

Después de ocho horas en la universidad, ambos se dirigían a casa era como su tradición silenciosa de ambos, Yang Mi caminaba por delante de Yugyeom en pleno silencio y el solo se limitaba a mirarla mientras caminaba, nunca habían cruzado palabras a menos de que discutieran por alguna tontería sin sentido.