El Ático 🖤Malec🖤(TERMINADA)

Capitulo 1 "Nuevo Hogar"

-¿De nuevo dice eso? Ya sabemos que no vendrá mamá, Simon en serio quería verla a usted, pero ya vi que a usted no le importa en lo más mínimo. Si. Lo se. Pero... No, no, claro que no. Que no. Tal vez. Si si ya entendí. Robert Lightwood. Ajá. Bye. También la amo.

Colgó.

Magnus Bane y Simón Bane, hijos de Batari Bane mujer multimillonaria por ser la dueña de una de las empresas de vienes raíces mas cotizada de todo el mundo.

Batari decidió tener un edificio de sus ventas en América, así que se mudo con sus hijos allá dándole a ellos esa gran casa para albergar.

-Magnus, y-yo quería ver a mamá. -sollozó ligeramente el menor.

-Lo se bebé, pero mamá ahora esta ocupada con su trabajo. -trató de justificar a su madre.

-P-Pero...

-Nada de 'peros' Simon Bane. -regaño el mayor. -Ya tienes 12 años, bebé, deja de llorar por todo.

Simon asintió no dejando a sus lágrimas fluir.

-Mira, que te parece ir a fuera a jugar un rato el patio es grande así que podemos jugar a nuestras anchas, a parte no hay vecinos molestos como la señora Camille en Nueva York que nos diga que no hay que jugar por el ruido que hacíamos. -dijo Magnus agachándose a la altura de su hermanito.

-¡Si! -chilló feliz él menor saliendo corriendo fuera de la casa.

Magnus solo veía a Simon saliendo de la casa, hacía el jardín, jardín que parecía bosque ya que tenía bastantes de ellos, más aparte un pequeño lago en el cual había patos, todo eso hizo que soltara una sonrisa que hizo que sus ojos hicieran una líneas. Todo iba bien hasta que un ruido lo hizo alarmarse. Volteó su mirada al pasillo de la cocina tratando de ver, pero no vio nada.

-¿Señor Lightwood? -preguntó él castaño claro.

Hubo un silencio demasiado tétrico para Magnus dándole un terrible escalofrío que lo hacia dudar de moverse. Decidió ignorar el sonido de hace antes y salir a jugar con su hermano, pero otro ruido lo hizo alarmarse y sobresaltarse.

Con pasos cautelosos se fue acercando al pasillo para después ver la gran puerta marrón que cubrió los ruidos de botellas de vidrio moverse. Magnus sudaba frío, le temblaba las manos y sus piernas pero se armo de valor tomando con su mano sudorosa que titiriteaba y tomo el manojo de la puerta, abriendola lentamente, cuando ya esta estaba abierta de en par en par entro, no vió a nadie a simple vista. Se alzó de hombros y decidió salir de ahí para jugar con Simon, pero justamente cuando iba a voltearse, escucho a la puerta cerrarse lentamente hasta que azoto de forma brusca, provocando que saltara y dejara escapar un grito no muy varonil de su parte. También haciendo gritar a la otra persona.

-¡Jodido infierno! -gritó un pelinegro quitándose sus audífonos.

Magnus volteo pálido, con su cuerpo templando y sus ojos un pocos llorosos.

-¡¿Qui-Quién demonios eres tu?! -preguntó exaltado y rojo de la ira Magnus.

-¡¿Eso debería de preguntar yo, pequeña cosa?! ¡Casi me cago del susto! -exclamó enojado el pelinegro.

-¡Dimelo tú a mi, yo también casi me cago del susto, retrasado! -también gritó Magnus.

-Maggs, ¿qué pasa? -apareció Simon con un niño un poco más alto que él, era rubio.

-¡Pues este retrasado que hizo qué casi me cagara del susto! - dijo con su acento Indonesio, casi haciendo un berrinche.

-Oye, no le digas así a mi hermano. -le contesto el niño que acompañaba a Simon.