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/En esta historia no hay necesidad de usar una insignia para ver a Luka, pero es una persona normal como quedo en la pelicula n.n/ 



Un joven que habitaba junto a sus hermanos ya teniendo una vida "normal", luego de haberse hecho amigo de un chico llamado "Nobita" realmente le había cambiado la vida, luego de varios días que se convirtieron en meses ya comenzaba a sentir una necesidad de ir a visitarlo y a los demás claro.

Avisándole a su hermana Luna de que iría por un corto tiempo nuevamente a la tierra, esta vez no había que preocuparse pues lo que más temían, gracias a Nobita y los demás, lograron traer la tranquilidad a su planeta y a ellos.
Logro tener una respuesta afirmativa de Luna ,a lo que con tanto entusiasmo fue a poner algunas cosas en su mochila para poder ir de una vez al planeta Tierra, ya no tenía por qué usar gorra pero le gustaba de todas formas.

Y en el planeta Tierra. . .

– Ah que aburrido... ¿Cómo pudiste rechazar la invitación de dekisugi para ir al acuario? – Dijo Doraemon sentado en el suelo de la habitación del azabache mientras miraba el techo.

– No es mi culpa, además... ¿Nosotros podemos ir a ver cuando queramos, no? Con la puerta mágica – Contesto Nobita desde la silla donde estaba sentado mirando a Doraemon.

– Si pero... – Se sentó en donde estaba volteándose a ver a Nobita. – No es lo mismo, seria aburrido aun así, en cambio ir con los demás es más entretenido – Continuo.

– ¿Estás diciendo que te aburrirías ir solo conmigo, Doraemon? – EN un tono triste y reclamante hablo, extendiendo sus manos, sin moverse de donde estaba.

– Que no es eso Nobita... Ah, no se te puede explicar nada a ti, mejor bajemos a comer lo que mama dejo – Decía mientras se levantaba de donde estaba para dirigirse a la puerta, abrirla y antes de salir veía como Nobita se encontraba mirando la ventana. – ¿No vienes Nobita? –

– Si... Ya voy, adelántate – Luego de haber dicho eso, escucho la puerta cerrarse quedándose solo en la habitación.


Al cabo de unos minutos ambos chicos ya estaban en la sala de dicha casa viendo la TV mientras comían Dorayakis, ya se estaba haciendo de tarde y faltaban un par de horas para que sus padres regresaran a casa, el timbre sonó a lo que ambos se miraron confundidos pues sus amigos habían salido y sus padres no regresarían hasta dentro de unas horas. ¿Quién podría ser?

– Ya va – Dijo Doraemon levantándose de donde estaba mientras Nobita lo seguía con la mirada hasta que desapareció de su punto de vista.

No paso mucho hasta que la curiosidad de Nobita se hizo presente ya que Doraemon no regresaba, aunque no habían pasado más de 2 minutos. – Doraemon... ¿Quién era? –

Doraemon se dio la vuelta para ver al azabache, que a la vez un chico de cabellos plateados coloco su mirada en Nobita.

– ¿Luka? – Sorprendido dijo mientras un brillo de felicidad apareció en sus ojos, queriendo dar un paso hacia adelante pero el otro chico le gano tirándose encima para abrazarlo como la última vez.

– Te extrañe, Nobita –Hablo cerrando sus ojos aun rodeándolo con sus brazos con algo de fuerza.

– Hombre, pero si solo han pasado unos tres meses... – Dijo mientras correspondía el abrazado sonriendo muy a gusto. – Aunque también te eh extrañado Luka – De poco en poco se separó del abrazo. – Aunque... ¿Por qué has venido? ¿Algo ah pasado? – Su expresión cambio a una de preocupación mirando a su contrario.

– De hecho vino a pasar unos días con nosotros, trajo sus cosas – Decía Doraemon teniendo ahora en sus manos la mochila de Luka que había dejado en el suelo cuando estaba teniendo una pequeña charla con él.

– ¡Genial! ¿Dónde piensas quedarte, luka? – Luego de haber mirado a Doraemon fijo su mirada en el mencionado anteriormente.

– ¿No me podría quedar con ustedes? – Decía mientras llevo una mano a su nuca sobándola levemente pues por la emoción no lo había pensado bien. – Pero si les hago mucho problema, puedo dormir en mi nave –

– No, tranquilo, podemos preguntarle a mi mama o... Tampoco tiene porque saberlo – Dijo mientras reía levemente.

– ¿Cómo piensas ocultar a una persona en tu habitación sin que mama se dé cuenta? ¿Eh, Nobita? – Arqueo una ceja Doraemon mientras se cruzaba de brazos.

– Pues... uno de tus inventos puede funcionar ¿No? Pero por mientras... Vamos Luka! – Le tomo de la mano al oji verde para correr a las escaleras y subir ambos.

– Hey! Espera! Ah... Este Nobita – Suspiro con ligera preocupación para así subir a la habitación de Nobita.

Estando ya en la habitación ambos estaban sentados en el suelo charlando.

– ¿Piensas ir a la escuela otra vez? Para pasarla más tiempo juntos! – Le pregunto mientras colocaba sus manos en el suelo.

– Claro, ¿les avisaras a tus amigos que estoy aquí o le dirás cuando vallas al cole? – Ladeo un poco su cabeza mientras lo miraba con una sonrisa.

– Que se esperen hasta mañana! Ahora seguro se están divirtiendo – frunció levemente el ceño mirando a otro lado re celoso.

– ¿Y eso? ¿Ah pasado algo? – Luka arqueo una ceja mirándole.

– Solo lo mismo de siempre, ahora los demás están de visita al acuario, bueno Luka, ahora veremos cómo te instalamos aquí –Dijo con una sonrisa Doraemon mientras dejaba la mochila de Luka al costado del dueño.

– Pero ya no hablemos más de esto, ahora que estas aquí, las cosas se pondrán más divertidas – Hablo Nobita entusiasmado tomando las manos de Luka sonriéndole como acostumbra hacer.

– Claro, si tú lo dices – Por parte del contrario, asintió con la cabeza mientras un leve sonrojo aparecía en sus mejillas, con una sonrisa para el ajeno.

– Y por mientras... ¿No tendrás hambre? Quizás el viaje te ha dejado cansado o yo que sé – Se separó Nobita mientras se ponía de pie mirándolo.

. . .

Al llegar la noche, lograron mantener a Luka en secreto de los padres de Nobita, a la hora de dormir estaban charlando sobre qué Luka tendrá que salir por la ventana con el gorrocoptero para que su madre no se diera cuenta de él.

– Te lo dejare ahora por si no logro levantarme – Decía Doraemon mientras sacaba dicho aparato de su bolsillo y así dárselo. – Que descansen chicos – Luego de esto entro al armario para poder dormir a gusto.

– Gracias Doraemon – Hablo luka antes de que el robot se metiera al armario, luego volteo a mirar a Nobita y solo sonreír.

– Ah... Sabes, no haber ido al acuario tampoco fue mala suerte del todo – Sonrió mientras se recostaba sobre su futon

– ¿Eh? ¿Por qué dices eso? – Pregunto mientras estaba sentado al lado del futon de Nobita.

– Pude estar aquí para cuando llegaste – Dijo con sinceridad mientras aún tenía una sonrisa en su rostro. – Sera mejor descansar de una vez – Se acomodó dónde estaba quitándose los lentes.

–... – No llego a decir nada pues sintió como su corazón se había acelerado por un momento, desviando su mirada para ocultar su rostro que estaba rojo.

– Eh... Luka – Hablo Nobita sin moverse.

– S-Si? – Respondió al instante aun nervioso volteándose a verlo.

– ¿Podrías apagar la luz?.. Se me ha olvidado y ya estoy calentito – Dijo con una ligera sonrisa, se había volteado a verlo pero veía borroso.

– Ah sí, claro – Se levantó de donde estaba para poder apagar la luz.

– Gracias – Termino por decir Nobita ya un poco adormilado.

El de cabellos plateados se quedó sentado al costado de Nobita, a pesar de que Doraemon ya le había dado un espacio para que él pudiera quedarse, uno oculto en la habitación, decidió preguntar.

– Nobita... Nobita... – Coloco una mano en el hombro del antes mencionado.

– ¿Eh...? ¿Q-Que pasa...? – Adormilado, ni siquiera abrió los ojos, solo se movió un poco en donde estaba.

Se quedó un rato en silencio mientras estando nervioso por lo que preguntaría– ¿Puedo dormir contigo? – Cuando termino de decirlo cerró sus ojos con fuerza esperando la respuesta.
  
– Eh... – Como estaba medio dormido capto algo tarde la pregunta a lo que se empezó a mover hacia un lado mientras alzaba la colcha – Claro... Deja te hago un espacio – Al terminar de moverse sonrió con levedad – Ven, échate aquí –

Por otro lado, el ajeno estando aliviado de la respuesta, hizo caso acercándose al lugar donde le hizo un espacio para ponerse cómodo. – Gracias Nobita... Descansa – Se volteo a mirarlo, al hacer esto pues el futon era para una sola persona, chocaron sus narices cosa que Nobita ni cuenta pues estaba ya dormido, por otro lado Luka simplemente volteo a mirar al techo para luego llevar ambas manos a su rostro cubriéndoselo.

Nuevamente su corazón volvió a latir con rapidez, realmente todo esto que estaba sintiendo era nuevo para él pero no quería preguntar, por otro lado, estar a su lado se sentía bien.

Poco a poco se descubrió el rostro aun teniendo su rostro rojo, se volteo a mirar a Nobita esta vez con cuidado, viéndolo dormir este poco a poco cerro sus ojos ya teniendo en cuenta que debía levantarse temprano para no hacerle problemas al azabache.

Al ya quedarse dormido, al moverse mucho cierto azabache llegaba a mover a su contrario pero este se aferró a este hasta que terminaron, siendo el oji verde abrazando al contrario siendo cómoda esta posición para ambos, y para su suerte, solo estaría consciente de esto Luka, ya que se iría antes de que se despertaran los dos para así esperarlos en un punto cercano. 

Combinados (Nobita x todos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora