Capítulo 6

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Estaba en camino a la clínica Istil con la copia de la historia clínica en la mano llena de determinación y esperanza de que esta enfermedad será solo una mala etapa de nuestras vidas que pronto pasara, al llegar los pasillos estaban llenos de pacientes, me sentí tan cerca y al mismo tiempo tan lejos de esta ciudad, me marche hace tantos años que aun así pensé que podría reconocer algún rostro, pero la realidad me hizo entender que aunque amaba añoraba mi pueblo ya no pertenecía aquí, de aquí solo me quedaba Tilo, Sarah y mis recuerdos de Pit.

Sarah y yo eramos buenas amigas, nuestra amistad perduro durante todos estos años, ella siempre me visitaba y nunca permitió que nuestra amistad se deteriorara a pesar de la distancia.

A Pit nunca más lo volví a ver, sus padres se lo llevaron del país varios meses antes de yo viajar a estados unidos, se fue a un país desconocido para nosotras, sarah y yo sufrimos su ausencia cada día de nuestra vida desde la adolescencia hasta la edad adulta, a el sentí a verlo perdido para siempre desde lo más profundo de mi corazón.

Estaba frente a la puerta de consultorio del Dr. Miller su secretaria le informo que había llegado. de inmediatamente me hizo pasar a su consultorio, tome asiento sin dirigir la mirada al Dr. comencé a apreciar el espacio, era blanco y con lo mínimo para realizar sus labores, observe con detenimiento en busca de algo que me hablara de él, pero no había más que en una pequeña repisa, una foto de el con un pequeño cachorro, varias miniaturas de carros de diferentes modelos y un pedazo de madera con forma de corazón... me pare abruptamente del asiento ante la impresión que me causo aquel objeto y tomé la madera en mis manos por instinto, acaricie dos iniciales que tenia escrita y la arrulle contra mi pecho, un nudo se me formo en la garganta, el Dr. Se acercó a mi tomo de mis manos la piedra ásperamente y la dejo en su lugar.

—Esta piedra es muy importante para mí perdóneme mi brusquedad pero no permito que nadie la toque...—Estaba molesto, un poco extasiado, me sentí intimidada di un paso hacia atrás, y volví a mi asiento, no estaba segura si era lo que estaba pensando, no quería ser tonta y tocar un tema tan sensible para mi con un extraño, pero ese trozo de madera era similar y las iniciales también, la primera vez que lo vi tuve una sensación sobre el inexplicable, él tomo asiento me miró fijamente a los ojos y tuve un poco de vergüenza, tanto que no pude mantener la mirada.

—Dra. Smith, nunca nadie antes excepto yo había tocado esa piedra, es un objeto invaluable y no quería que nadie lo tocara excepto su dueña.—Me aleje de el dando le la espalda, mi  corazón comenzó acelerarse,  no podía ser tanta  casualidad como iba a creer que era el, si fuera el, en el mismo instante que lo vi lo hubiese reconocido, mi corazón estaba desbocado, últimamente la ansiedad me hacia ver cosas que no era, aun así no podía quedarme con las dudas.

—Eres Pit?—Tartamudee,  lo repetí tantas veces en tan escaso tiempo que el Dr. Miller de un salto llego hacia mí, me miro incrédulo, estaba perplejo, estudió cada facción de mi rostro buscando algún indicioso que descifrara mi procedencia, me toco el cabello con delicadeza, de su cuerpo emanaba un olor y una cercanía que me gritaba que si, era el.

— Eres Tami? fueron las palanras que bastaron,dos gruesa lagrimas rondaron por sus mejillas — Mis ojos también comenzaron a desatar en un torrencial de ese liquido cristalino, que emanaba de mi sin piedad,  asentí a su pregunta agonda en ese manatial que brotaba de mis ojos sin parar, se acerco a mi y me abrazo  enfundándonos los dos en una calidez intensa.

Volvere a  ti (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora