Volvere a ti (Completa)

Capítulo 43

Pit

Tami estaba esperando un bebé y yo era el padre, estaba muy feliz iba optimista sabiendo que podía tener una oportunidad con ella.

Ese hombre era un caballero ya entendía por que antes de dejarlo prefirió dejarme a mi, yo estuve muchos años ausente, ellos se conocía mejor de lo que ella y yo nos conocíamos, desde el mismo instante en que supe de su existencia lo odie por el simple hecho de estar en el lugar que yo debia estar.

La vida está inverosímil, ahora  el me esta guiando hacia mi felicidad apesar que esos mismo camino lo conducen a el a su infelicidad.

Llegamos a la casa de ellos donde por tantos años compartieron todo el uno del otro, cada esquina tenía recuerdos de su vida junto e inmediatamente tuve celos.

El ambiente era muy acogedor, la casa estaba llenas retratos de ellos y su niña, me sentí un intruso en su vida, sentí a ver llegado para destruir una vida aparentemente bella.

—Ella está en esa habitación, por favor trátala con tacto y no hagas reproches de nada —Me dijo duramente abriéndome una puerta que dejaba ver un family impecable, de paredes altas y blancas.

Observe la estancia y la vislumbre en una esquina balanceándose en una mecedora que daba la espalda nosotros y el frente a un hermoso jardin, la observé tan frangir que el alma se me partía.

Me acerqué a ella y me baje hasta su altura, la miré a los ojos, pero ella seguía perdida, me horrorizó ver su semblante demacrado y perdido.

—Tami, tami...—La llamaba pero ella seguí en un limbo.

—Mírame.—Acune su rostros en mis manos y con los dos dedos pulgares peinaba sus cejas, en un instante me miro y acaricio mis labios, y nombro mi nombre.

—Soy Pit, dime que te pasa  le pregunte con el alma despedazada.

La abrace y llore amargamente, quería recuperarla a toda costa y no tuve en cuenta  sus sentimientos, solo estaba presionándola todo este tiempo y por mi estaba en ese estado.

La vida de ella no había sido fácil, en esto últimos meses tuvo que pasar por la enfermedad de Tilo, perder su amistad con Sarah y además todo lo que conllevó nuestro reencuentro, esta vez sería diferente, no la voy a presionar al igual que el, sacrificare mi amor, que sea ella la que decida sin presion, la vida que queria y si ha de volver a mi aqui estare esperandola con los brazos abiertos.

Perdido en el tiempo, abrí los ojos para darme cuenta que ella estaba recostada de mi cuello llamando mi nombre insistentemente.

—Aquí estoy le susurraba al oído besando sus manos, la miré a los ojos y pude ver la lucidez en sus ojos, ella estaba aquí de nuevo, estaba pasando por un tiempo duro pero aquí estaba, habia vuelto.