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Junio 29 de 2016

Era mi último día como hombre casado, después de esta cena el mundo definitivamente iba a confirmar nuestra separación. Claro que ya había hecho mi trabajo, me mostré como marido de la Princesa Dulce, amable y caballero.

Había pasado un día de mi gran entrevista televisiva desde el Palacio. Mi madre me había pedido que por una vez en mi vida me mostrará sincero ante las preguntas que habían arreglado con el conductor de televisión.

Natalia me había pedido que no la mencionara, estaba muy estresada. Salía a la calle y la gente le gritaba cosas como "roba maridos", "sin vergüenza" o "eres madre de familia y fácil". Su esposo Josh Hamilton le había contratado personal de seguridad. Después del incidente que tuvo saliendo del salón de belleza tenía miedo de estar sola.

El incidente habia sido menor, pero podría llegar a ser peor. Mientras ella estaba arreglando su cabello en el salón de belleza los seguidores de mi ex esposa le habían escrito su Mercedes nuevo que le regalé por su cumpleaños 35, nadie se había acordado de ella... o mejor dicho, sus amigos le estaban dando la espalda.

Era muy difícil la situación que viviamos Natalia y yo, su esposo no quería darle el divorcio, la gente la odiaba y sobretodo mis hijos no podían verla. Había tratado que ambos lado se unieran como las típicas familias ensambladas, pero fue imposible. Tom, el hijo de Natalia no quería que su madre estuviera conmigo y por eso hacía un mes había decidido mudarse ,con tan sólo trece años, a Italia con su padre.

Natalia estaba sola, yo trataba de estar mi tiempo libre con ella, pero lo cierto era que mi deber como Príncipe me robaba casi el ochenta por ciento de mi día. Pero había tratado de arreglar algunas cuestiones con la familia real, quería que Natalia fuera parte de ella.
Obviamente la reina madre se negó a que ella fuera la próxima princesa de Gales, lo que desató una discusión en toda Inglaterra. La gente colgaba carteles adelante del Palacio con mensajes como "La única princesa que queremos es a Lady Dulce".

Debía solucionar esto, y según mi madre y Jonh, la mejor manera fue dar la entrevista.

Flashback

El entrevistador ya estaba en mi oficina, las cámaras enfocaban mi escritorio con la foto de mis hijos, se sentó frente a mi y me pregunto si estaba listo. Ahora si, no había vuelta atrás.

— Príncipe, el pueblo espera sus palabras ante el silencio de su ex esposa la gente quiere saber ¿Qué sucedió?— comenzó.

— Gracias por el espacio — Agradecí— Supongo que a veces el amor se acaba y la lucha para salir adelante termina debilitando a alguna parte.

— Príncipe Christopher, los amigos de su esposa hablan de una enfermedad causada en efecto de como decirlo.... desinterés por su parte..

— Mira, Richard. Como Príncipe nunca tuve mi tiempo libre, traté de llevar a mi esposa a cada lugar y que estuviera presente. Me gustaba que estuviera a mi lado y demostrarle lo orgulloso que estaba de ella.

— Pero, según su círculo íntimo, esto sólo fue pantalla.— intervino Richard.

— No es así, la cuestión en esta historia es que la gente piensa que el amor es para siempre.

— ¿No lo es?

— Yo creo que la palabra amor es tan amplió que el ser humano en realidad no sabe que es.

— ¿Natalia de Hamilton es una persona importante?

— No entiendo el fin de esa pregunta— respondo molesto al notar que el entrevistador quiere afectar mi imagen.

Secret of the prince: ¿Qué hay de mi? #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora