Yo Soy Mujer.

Capitulo 25

Mi pulso se disparó, Nick y yo compartimos miradas, la suya era penetrante, causando un rubor natural en mis mejillas, vuelo la vista al televisor ignorando los martillazos de mi corazón.

Debo controlarme.

Escuchaba los murmullos de Dior en la cocina y odié el echo de que a toda mi familia —a excepción de mi padre— le agrada Dior.

Riad se lanzó a mi lado colocando mis piernas sobre su regazo.

—¿Como te fue? —me pregunta, yo solo giro la cabeza de manera perezosa y levanto los pulgares, estoy tan nerviosa que seguramente mi voz saldrá cortada.

No tarda mucho para que Dior se nos acerque, al verme sus ojos se abren, pero disimula y se sienta en el sillón que esta diagonal a nosotros sin quitarme la mirada de encima.

Mierda.

¿Que hace a esta hora aquí?

Solo quiero levantarme e irme a mi habitación, me siento jodidamente incomoda en mi propia casa, ¿eso es posible?.

Intento ignorarlo viendo la tele pero me es imposible, levanto la vista a su dirección y aun continua mirándome de manera tan... estoica. Quisiera que no fuera tan inexpresivo para poder saber que le pasa, pero es como si subiera un muro entre el y yo, y eso me molesta, mucho.

De pronto escucho el sonido de mi celular que esta sobre la mesita frente al sofá, lo tomo y observo el nombre: Leon. No espero un segundo mas y tomo la llamada, me pongo de pie y salgo de la casa, sentándome en los peldaños de la entrada.

«—¡Hola, Ana! »

«—Hola.»

«—Estaba pensando en que tal vez podamos ir mañana a un Club, claro si no tienes nada planeado con tu familia.»

«—Ah. Si, me parece bien. Seguramente comeremos en algún restaurante pero estoy disponible en la noche.»

La emoción es clara en mi voz.

«—Genial. ¿Oye, Ana?»

«—¿Si?»

«—¿Que sucede con Dior?»

Suspiro.

«—Es complicado.»

Una punzada se instala en mi corazón cuando recuerdo lo sucedido esta tarde y pronto el escozor llega.

«—Estás segura con el.»

Que mas quisiera. Pero lo único que estoy es insegura de mi misma.

«—Ya se acabo, Leon. No funcionamos.»

«—¿Estas bien?.

Tomo una bocada de aire para poder hablar.

«—Si, bueno en lo que cabe. Estaba muy ilusionada creeme, aun lo estoy. Pero no funcionara»

«—¿Por que? Puedes hablarlo conmigo si es lo que necesitas.»

«—Hoy lo vi besándose con una chica.»

Decir eso me cuesta, las lágrimas no tardan y el silencio de Leon a través de la linea se me hace eterno. Sollozo.

«—Oye, no tienes que estar así, escucha, se que te atrae demasiado y estoy orgulloso de que hayas terminado con el, no debes arrepentirte, debes darte tu lugar, nena.»

Mi corazón se cae antes sus palabras y las lágrimas caen en mayor cantidad, Leon siempre ha sido tan bueno y cuidadoso conmigo, me agrada tenerlo y poder contarle mis problemas, siempre me escucha.