Maktub (Finalizada)

"Fuerte arrepentimiento "

En aquel coche se encontraban un omega con el corazón hecho trizas y un alfa con un incendio en su interior desde el momento en que Hao Xuan sacó a Zhan de aquel lugar y lo llevo a su vehículo Zhan no volvió a mirarlo, ni siquiera la palabra le dirigió, el omega se sentía tan avergonzado que sólo rogaba que la tierra se abriera y terminara tragandolo.

- ¡Vamos a tu casa!.- Hao Xuan seguia viendo el camino.

- ¡No!...no...- Xiao Zhan se giró hacia el.- A mi casa no...no así...- Se miró la vestimenta.- No puedo dejar que mi hijo me vea de esta manera...tampoco Liu.- Las lágrimas amenazaban con salir.- Vamos...vamos a detenernos en algún lugar para comprar algo y cambiarme esto.- Xiao Zhan volvió a cubrirse.

- ¡Está bien!

Después de aquella corta charla no hubieron más palabras, Xiao Zhan se avergonzaba del estado en que se encontraba y no quería que su familia lo viera en ese estado, sobre todo su pequeño, en ese momento el omega se sentía el ser más miserable de la tierra, se empezó a odiar por haber bajado la guardia ante Yibo, por haber sido usado de esa manera y por haber sido maltratado, incluso llegó a sentir que lo merecía por ser tan ingenuo.

Pensó en Yibo y se sintió aún peor, se preguntó como alguna vez en su vida había llegado a enamorarse de esa persona, intuyó que en realidad nunca llegó a conocerlo en verdad, puesto que ante sus ojos aquel alfa siempre había sido un ser maravilloso el cual lo cuidaba y daba todo su amor, pero el hombre ante el era diferente, era frío, lleno de artimañas y con intenciones negras, lo volvió a odiar, porque nunca le creyo, nunca lo quiso escuchar, nunca lo busco y ahora volvía a lastimarlo. Xiao Zhan iba inmerso en sus pensamientos cuando el auto finalmente se detuvo.

- ¡Espera!...¿Dónde estamos?.- Xiao Zhan miró a todos lados.

- Iremos a mi departamento.

- ¿Tú que?.

- Tiene que cambiar tu ropa...no puedes ir así a tu hogar...te voy a prestar algo para que te cambies...

- Ya has hecho demasiado.- Xiao Zhan bajo la mirada.

- Para ti...nunca es demasiado...- Hao Xuan bajo del coche y fue hacia Zhan.-  ¡Vamos!

Ambos caminaron hacia el elevador, Xiao Zhan seguía sujetando la chaqueta impidiendo que el mal estado de su vestimenta y aquellas marcas se vieran, Hao Xuan por su parte estaba en silencio muriéndose de la impotencia por no haber terminado con Yibo cuando pudo, pero algo tenía bien claro, eso no se iba a quedar así.

- Pasa adelante...sientete como en casa.- Hao Xuan le daba la bienvenida a Zhan.

- Gracias.- Xiao Zhan trago de dibujar una sonrisa pero fue imposible.

El omega camino por aquel lugar, el departamento era de tamaño promedio, adecuado para un hombre soltero, tenía una decoración moderna, la cual mostraba que el hombre que vivía allí era amante de todo lo concerniente a la electrónica, si hubiera sido en otro momento Zhan  hubiera curioseando por el lugar.

Hao Xuan tomó la mano de Zhan y tiró de el con suavidad, lo condujo por un pasillo hasta quedar frente a la puerta que daba a su habitación, cuando el alfa la abrió mostrando lo que había la mirada de Zhan se quedó fija en aquel lugar, una habitación de buen tamaño, de paredes tapizadas de color azul y la cama estaba cubierta con sábanas de seda negra, en una pared colgaba un retrato en blanco y negro del rostro de aquel alfa en su niñez, era un lugar que emanaba romance.

Xiao Zhan se avergonzo en el instante en que entró a aquel lugar, por primera vez visitaba el hogar de aquel alfa y sobre todo pisaba un lugar tan íntimo, el omega vio a Hao Xuan desaparecer por la puerta que daba al cuarto de baño y volver a aparecer ante el.