Después de mi quedada con Mangel pude volver a casa y prepararme, hoy me tocaba quedarme en la taberna toda la noche, realmente la idea de la taberna era muy buena y ganabamos un montón de diamantes.
Fargan también estaría por la taberna vendiendo la mercancía a nuestros clientes, como armas, droga, mujeres hombres...
Realmente era cansado y aburrido estar tras la barra, pero era aún mas aburrido solo observando como mis empleados trabajaban.
—Hombre el Rubias —dijo alguien a mis espaldas, me gire encontrando a Alex, este me sonreia de manera coqueta como hacia a todos.
—Hola enano —salude apoyando mi espalda en la barra.
—Os va muy bien el negocio, ¿Eh?
—Si eso parece —dije con desinterés.
—Los domingos se supone que vosotros cerrabais la taberna, ese era el trato —dijo con algo de mosqueo, rode los ojos.
—¿A caso tu socio no te a dicho que me dejaba abrir? —pregunté mirandole de reojo, fruncio el ceño —. Si no te lo a dicho no es mi problema para que vengas a comerme la cabeza. Que poca comunicación tienes con tu socio —me mofe de el en la ultima frase.
Me miro realmente mal.
Realmente Alex estaba muy bueno y este no lo ocultaba, siempre iba sin camisa y con una minifalda y unas medias altas, realmente si no le perteneciera a Mangel le quitaria yo mismo esa falda aquí mismo.
Sonreír ante mi pensamiento.
—¡Un chupito de tequila! —exclamo llendose de mi lado.
Una hora después, la puerta de la taberna fue abierta y mi mirada se capto a los dos nuevos que entraban, Willy y Vegetta cogidos de la mano, Vegetta buscaba algo con la mirada asta mirarme y sonreirme se manera coqueta.
¿Acaso estaba loco? ¿Me estaba provocando casi a los ojos de su novio?
¿Y lo peor de todo? Me gustaba que lo hiciera, realmente Vegetta era una maquina sexual.
Willy con una sonrisa se acerco a mi junto a Vegetta.
—Hombre compañero —me saludo.
—Hola Willy —le sonreí —. Hola Vegetta —le salude con un apretón de manos —. ¿Qué os trae por aquí?
—Recuerda que también soy socio —dijo en broma.
—¿¡En serio!? ¿De verdad, Willy? —dije con falsa impresión, Willy me miro molesto —. Me refiero idiota, que que haces aquí en tu día libre.
—Salir de fiesta con Vegetta ¿Puedo Rubius? ¿Me días permiso?
Sonreí.
—¡Faltaría mas! —exclame seguido de reirnos.
Realmente me llevaba genial con Willy, no me sentía mal a la hora de acostarme con su novio, Vegetta, pues este se tiraba a veces a uno de karmaland.
—¡Hola chicos! —saludo alguien con voz aterciopelada.
Hablando del rey de roma.
—Hola Fargan —saludo Willy.
¡Diablos! ¿¡Soy el único en sentir la tensión sexual?
Fargan sonrió a Willy y luego saludo a Vegetta.
Fargan siempre era muy coqueto, se arreglaba siempre con mucha elegancia, todo de el irradiaba belleza. También estaba muy bueno.
Mientras Willy y Fargan hablaba, Vegetta me miraba mientras mordia su labio y disimuladamente me hacia señas.
—Voy al baño, ahora vuelvo —dije caminando al baño. Minutos después Vegetta entro a el con cara de picardía.
—¿No puedes esperar a mañana? —dije coqueto. Este sonrió.
—Poder puedo —aseguro acercandose a mi —. Pero no me da la gana —dijo seguido de atacar mis labios.
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Sσℓσ ∂єѕєσ ¢αяиαℓ. яυвєgєттα.
FanficTodo iba bien, asta que la cague, asta que me enamoré. Sin siquiera darme cuenta Vegetta me tenia enganchado en sus redes, digamos que era demasiado bueno en lo que hacia y hacia conmigo lo que quería. -¡Dejalo! ¡En el fondo me quieres a mi! ¡No a...